Los gráficos no siempre son importantes: disfrutemos de los videojuegos

Vivimos en un mundo en el que los gráficos lo son todo

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Actualmente, con la nueva generación de consolas, (poco explotada), que nos permite embarcarnos por unas realistas, -y bien iluminadas-, calles de Nueva York de la mano de Spider-Man, ver unos rostros perfectamente definidos en The Callisto Protocol o ignorar casi por completo los tiempos de carga como en Ratchet & Clank: Una Dimensión Aparte, no es raro escuchar voces que están, -y siempre lo han estado-, inmersos en los gráficos de los juegos.

A veces, casi de una forma enfermiza. Y es que hay por ahí flotando una tendencia que parece indicar que si los videojuegos no cuenta con unos gráficos apabullantes, no merece la pena. Yo, como jugadora veterana, no por la edad, sino por los años de experiencia, observo con cierta pena como grandes juegos con grandes propuestas quedan eclipsados por su falta de medios.

Obviamente, con gráficos hago alusión a la parte visual de estos. No justifico problemas de rendimiento o problemas gráficos directamente como haya podido pasar en su día con Cyberpunk 2077 o con Pokémon Escarlata y Púrpura en la actualidad. No, hablo de una apariencia, de esa tendencia de que si los juegos no tienen fotorrealismo a lo Forza Horizon 5 no valen la pena.

Hoy, quiero hablaros de dos juegos que me acabo de encontrar, en 2022, y con una PlayStation 5 en el comedor. Dos juegos que, lejos de infravalorar la diversión de un God of War: Ragnarok, me han mantenido enganchada a mi Nintendo Switch y jugarlos me ha transportado a esa época en la que, enganchada a un mando de Mega Drive, disfrutaba de cualquier cosa que fuera divertida.

No todos son gráficos en los videojuegos

El primero de ellos ha sido The Last Door, que si bien no es un juego reciente, sí que acaba de estar de actualidad gracias al lanzamiento de la versión física de la mano de Tesura Games. Y es que este título de The Game Kitchen, autores de Blasphemous, cuenta con un pixel-art muy pronunciado y una jugabilidad de aventura gráfica point & click. 

En ocasiones, distinguir todos los matices de los objetos es complicado, sin embargo, su historia y atmósfera son tan atrapantes que cuando te das cuenta, estás totalmente inmerso en la propuesta. Sus medios limitados se suplen con una estupenda banda sonora, unos giros de guión apabullantes y un inicio potente que hace que estés interesado casi desde un inicio. La narrativa es el pilar principal sobreponiéndose a otros apartados como la jugabilidad y los gráficos y, en contra de lo que se podría pensar, funciona. Y lo hace porque derrocha personalidad, unos diálogos concisos y cierto toque macabro que te pone los pelos de punta.

El siguiente ha llegado de la mano de Flynn’s Arcade y se trata de A Winding Path, del estudio Three Eyed Games. Un juego cuyo estilo artístico está basado en la sensación de ser un dibujo en un folio pintado a lápiz. Un juego de puzles, con mecánicas point & clik también, en el que el protagonista es el icono de una persona. Ya está, sin más, minimalista, simple… y adorable.

Su inventiva a la hora de sacar partido a la escasez de medios es tan ingeniosa que resulta suficiente para seguir avanzando. Además, tiene un punto de cuento, con una narración detallada y diálogos de novela que hace que la sensación que tengamos sea la de leer un libro con vida propia. A lo largo de todo su recorrido, exploraremos el mundo que nos rodea y las vidas de los personajes que vamos encontrando y que se caracterizan por su propia personalidad.

gráficos videojuegos

No siempre necesitamos de juegos de mundo abierto, que me encantan, pero a veces también se agradece propuestas sencillas, perfectas para desconectar, para relajarnos después de un largo día de trabajo. Y, por ello, no me cansaré de decir que la portátil de Nintendo es una de las mejores plataformas para probar toda esta clase de títulos, porque, además de estar tirados de precio, permite que los disfrutemos desde la cama.

Y con la gala de los GOTY recién pasada, no es mala idea de vez en cuando pararse a hablar de esos títulos indie más desapercibidos pero igual de apasionantes para los amantes de los videojuegos. A veces menos es más. ¿Vosotros qué opináis sobre los gráficos en los videojuegos?

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