El rey de los demonios ha regresado. Tras una muy larga espera, la ya extinta edición de Norma ha encontrado a un grandísimo sucesor. Así es, Kitsune Manga ha entrado por la puerta grande con una puesta en escena brutal que nos ha dejado con la boca abierta. Habiendo olvidado los errores del pasado y dado un paso hacia delante con la calidad de sus productos, están más que preparados para darle una patada a los especuladores con una de las mejores series de su tiempo. Hoy, en FreakEliteX, tenemos el sumo placer de hablaros de ello en nuestra reseña de Zatch Bell.
Sea como fuere, vayamos por partes. En primer lugar, ¿qué es Zatch Bell? Muchos os estaréis preguntando a qué viene tanta fanfarria, pero ya os adelanto que está perfectamente justificado. A fin de cuentas, hablamos de uno de los mangas más notables de la primera década de los 200 y de todo un hito en la historia de la animación japonesa en España. Amigo de muchos niños, zatch Bell se convirtió en uno de los estrenos más comentados allá en su momento.
Su anime, con 150 episodios y una película, nos sigue acompañando hoy día. No obstante, hoy queremos hablaros del manga. Un manga que lleva años fuera de línea en España y que se ha convertido en carne de especulación. Un manga que, por suerte, ha renacido de la mano de Kitsune con una edición kazenban espectacular que extiende los dominios de Makoto Raiku, su autor, a una nueva generación.
Reseña de Zatch Bell n.º 1 | Portada, sinopsis y edición
Kiyomaro no sabe qué hacer con su vida. Aburrido de la escuela y de todos los que le rodean, se limita a dejar pasar los días. Hasta que, sin previo aviso, su padre le envía un regalo de cumpleaños de lo más extraño: un niño llamado Zatch Bell que trae bajo el brazo un libro rojo aparentemente indescifrable… ¿De dónde han salido? ¿Qué poder ocultan las páginas del libro? ¿Por qué de pronto le persiguen los problemas? Y, ¿cómo se convierte uno en un héroe de la noche a la mañana?
Autoría | Makoto Raiku |
Traducción | Makoto Morinaga |
Precio | 17,95 € |
Formato | 13 x 18 cm, rústica con sobrecubierta |
N.º de páginas | 386 páginas |
Traducción | María Ferrer Simó |
Fecha de publicación | 12/12/2022 |
Empezamos alabando a un clásico que hoy día debería ser considerado atemporal, mas no por ello debemos olvidarnos de aspectos tan importantes como la edición. Sobre todo cuando hablamos de Kitsune Manga, una editorial que tenía problemas… hasta ahora. Ya lo hemos comprobado con Nukuto, pero con Zatch Bell lo hemos terminado de ratificar: han dado un paso adelante.Y nosotros que nos alegramos, porque ahora podemos hablar de un vacuo recuerdo que no empaña ni en lo más mínimo a una gran edición.
Consecuentemente, desde su primer tomo, Zatch Bell puede ser descrito como un producto de gran calidad con la capacidad de soportar el tremendo hype que generó su anunció. Porque, una vez más, os recordamos que hablamos de todo un clásico que llevamos pidiendo durante años. Eso sí, nos hemos encontrado (en realidad) con un pero menor, y es que lo que sí hay son algunos errores en la corrección. Más allá de eso, sí nos ha dejado con buen sabor de boca en general.
El regreso del rey de los demonios
Dicho esto, pues nos toca hablar del manga propiamente. Habiendo echado un vistazo a la sinopsis, nos percatamos muy rápidamente de que estamos ante un manga de acción y aventura con grandes tintes de fantasía. Sus protagonistas son Kiyomayo y Zatch Bell. El primero es un joven estudiante de instituto con malas pulgas y dificultades sociales, mientras que el segundo es un niño con amnesia que se descubre como un candidato a rey demonio (en otro mundo) mediante explicaciones de terceros.
Sin duda alguna, ambos son el motor de una historia que, aunque parezca infantil por su disparatado sentido del humor, demuestra una sensibilidad y una profundidad impropias de un shonen. Dramático de principio a fin, acomete muy diversas subtramas casi desde el principio con un trasfondo bastante duro: el destino de Zatch y el resto de mamodo (así se llaman estos demonios) es regresar a su mundo.
Es decir, que gane o pierda, sabemos que tanto Zatch como el resto de los candidatos, sean más o menos amigos de sus compañeros humanos, se marcharán. Esto es especialmente triste cuando tanto nuestro protagonista humano como su fiel heraldo de los rayos trazan amistad con otros usuarios. Su destino inevitable es enfrentarse los unos a los otros, lo que ya nos deja una perspectiva bastante cruda, pero realista, sobre el devenir de los acontecimientos.
Dos protagonistas cargados de carisma y una historia con matices
Así pues, sin adelantaros demasiados acontecimientos, os preparo para el futuro: drama y tensión. El manga nos pondrá a prueba como lectores, pues habrá situaciones bastante dolorosas, pero no desde un enfoque lúgubre. Zatch Bell es una serie alegre y divertida que trasmite buen rollo y es por eso, precisamente, que los momentos más tensos son tan duros. Más aún sí tenemos en cuenta que el propio Zatch, como personaje, es un ser de luz.
Es un joven con sus propios traumas e inseguridades, pero con un carisma y unas ganas de vivir tremendas. Es pura energía y por eso hace tan buena pareja con Kiyomaro. Su compañero humano es un genio adolescente con una inteligencia sin parangón. Esto provocó que muchos de sus compañeros le acabasen rechazando por envidia, lo que acabó de generando en una personalidad apática y huraña.
Esto encuentra pronta solución gracias a Zacth, quien le devuelve las ganas de ser algo más. Y aunque el cambio puede ser rápido, siendo un adolescente, nos cuadra que su personalidad pueda ser tan voluble al principio. Dicho en pocas palabras, solo necesitaba a alguien fuera de su familia que confiase plenamente en él. Esto le permite abrirse y demostrarnos que, en realidad, es un protagonista único y carismático.
Reseña de Zatch Bell: una carta de presentación inmejorable
Juntos, Zatch y Kiyomaro forman un tándem colosal que nos dejan grandes momentos de todo tipo, pues son capaces de abordar casi cualquier tanto desde el humor como de la seriedad. Por suerte, no estarán solos, ya que Zatch Bell va presentando, poco a poco, a unos cuantos secundarios con muchísimas cosas qué decir. Empero, no queremos adelantar acontecimientos, así que pasaremos a hablar de la trama.
Sabiendo que los dos personajes tienen un potencial tremendo y que su carta de presentación es inmejorable, nos toca analizar la calidad narrativa de un manga que sorprende en todo momento. Su enfoque cómico hace que las escenas de acción sean todavía más sorprendentes, lo que se transcribe en una narrativa dinámica y con muchos ganchos de interés.
Imprevisible por momentos, destaca por su gran ritmo, aunque peca de algunos manerismos demasiado clasistas. Algunos de sus preceptos nos hablan del típico héroe que (casi) siempre triunfa ante la adversidad y acaba recibiendo atención debido a su carisma. Más allá de esto, y de alguna secuencia que no termina de encajar, Zatch Bell se construye tremendamente bien como historia a largo plazo.
Esto lo notamos todavía más gracias a este formato kazenban, puesto que dispone de más episodios. Sin duda alguna, esto le sienta muy bien al manga, aunque en realidad arranca con mucha fuerza. El resumen, por lo tanto, es el de una trama tremendamente entretenida, unos personajes con mucho gancho, una premisa atractiva, un desarrollo adecuado y ciertos dejes clásicos que pueden chocar en la cultura contemporánea.
A caballo entre dos tiempos
Por lo demás, Zatch Bell es una obra que nos tiene completamente enamorados. Sobre todo si le sumamos un dibujo con mucha personalidad. En efecto, el arte de Makoto Raiku nos encanta. Siendo realistas y objetivos, no alcanza el nivel de la mayoría de obras actuales. La evolución de la tecnología, las facilidades del arte digital y el desarrollo de nuevas técnicas ha hecho que el dibujo manga crezca enormemente.
Esto destaca todavía más cuando comparamos obras antiguas con obras nuevas. Las primeras suelen tener defectos más evidentes o detalles menos trabajados. A cambio, suelen tener muchísima más personalidad. Este es uno de esos casos. Zatch Bell es un manga que destaca en cada panel gracias al estilo de su autor. Para nosotros, Makoto es un grandísimo mangaka que, por desgracia, no encontró una fórmula tan efectiva como Zatch Bell una vez terminó su serialización.
Por suerte, el manga, aunque terminó en 2007, regresó hace poco con una secuela oficial que es todavía más oscura que su predecesora. Tiene una pinta tremenda y nos encantaría verla una vez Kitsune termine con la primera parte, pero estamos adelantando acontecimientos. Por el momento nos quedamos con que el manga ha regresado con una edición impresionante.
Reseña de Zatch Bell: conclusiones
Para despedirnos, nos gustaría destacar que Zatch Bell es una obra que se encuentra a caballo entre los mangas clásicos y series más contemporáneas. Bebe de las primeras, y se nota mucho tanto en la dinámica narrativa como en el humor o la dirección artística, pero se acerca mucho a las actuales al mejorar notablemente la técnica de dibujo.
En ese sentido nos podemos encontrar con un manga un tanto errático por momentos. No obstante, esto no empaña la lectura general ni la calidad del producto, ya que, aun con sus defectos, sigue siendo una lectura indispensable. Para nosotros, Zatch Bell era y sigue siendo uno de los mejores mangas de la primera década de los 2000.
Hablamos en líneas generales porque ya la hemos leído, por lo que esta primera reseña es algo así como un reencuentro con un viejo amigo. Sea como fuere, no os preocupéis, porque aunque adelantemos impresiones, no haremos ningún spoiler ni nos desviaremos mucho del tema. Iremos tomo a tomo. ¿No era partido a partido? No. Tomo a tomo. Siempre se ha dicho así.
- Es un clásico que ha envejecido realmente bien. Pura nostalgia, pero con potencial para las nuevas generaciones.
- La edición roza el sobresaliente. Kitsune Manga ha dado un paso adelante. El formato kazenban le sienta genial.
- Sus personajes tienen un carisma brutal, el ritmo es bueno, la narrativa atrapa y la premisa es interesante.
- Combina muy hábilmente el drama, el humor, la acción y otros momentos de diversas características.
- El dibujo tiene muchísima personalidad.
- Se nota que es un manga algo antiguo en ciertos manerismos e idiosincrasias.
- Pierde puntos si se le resta el factor nostalgia.