Xenoblade Chronicles es, sin lugar a dudas, una de las sagas más importantes del JRPG’s de la última década. Monolith Soft lanzó por primera vez el título al mercado en 2010 para la consola WII y, posteriormente, en 3DS, consolidándose como uno de los JRPG más importantes de su generación. De la misma forma, durante estos diez últimos años la compañía bajo el amparo de Nintendo nos ha ofrecido una secuela y un spin-off todos ellos con unas cotas de calidad exquisitas.
No obstante, los fans de Xenoblade deseaban ver el juego que dio comienzo a todo con un nuevo lavado de cara, y eso es justo lo que hemos obtenido; Xenoblade Chronicles Definitive Edition es prácticamente un remake de la obra original que nos enamoró allá por 2010 y llega ahora a Nintendo Switch. Entre otras cosas, esta incluye múltiples mejoras y un nuevo capítulo en la historia nunca antes visto.
Bionis y Mekonis
La historia transcurre en un mundo cubierto por un mar infinito, excepto por dos figuras de proporciones gigantescas que se alzan sobre él: los gigantes Bionis y Mekonis. Antiguamente, estos dos titanes libraron una encarnizada batalla la cual terminó en punto muerto dejando a ambos inmóviles durante milenios; la vida floreció y nacieron distintas formas de vida sobre ellos. Nosotros seguiremos los pasos del joven Shulk, cuyo destino se cruzará con una misteriosa espada llamada Monado y las preguntas que rodean Mekonis y Bionis.
A la hora de la verdad, hablamos de una historia épica y llena de giros de guion que os mantendrán al borde de la silla en todo momento. A todo esto le sumamos un elenco de protagonistas y secundarios entrañables. Asimismo, debo darle una mención especial a el pequeño nopon (una raza del juego) Rikki, quien ha cautivado por completo mi corazón con su ternura e inocencia. No puedo olvidarme, por supuesto, de otros como Reyn, Dunban o Sharla.
Por desgracia, el contenido fuera de la línea principal dista de ser igual de memorable. De hecho, sus misiones secundarias son de una calidad muy cuestionable. AL final, se basan únicamente en tareas de recadero; hablamos de peticiones típicas tales como recolectar ‘X’ objetos o matar ‘X’ cantidad de monstruos. Lo curioso es que, muchas veces, nos veremos en la obligación de realizar dichas misiones, ya que reportará puntos de experiencia para subir de nivel y superar los picos de dificultad elevados que tendremos durante la historia principal.
Vasto e Inmenso
Si tuviera que definir Xenoblade Chronicles con una palabra seria «gigantesco». Estamos ante un mundo de proporciones totalmente desmesuradas. Los gigantes Bionis y Mekonis son los escenarios por los que transcurre nuestra aventura. Dichos titanes han desarrollado distintas formas de vida y ecosistemas sobre ellos. Desde enormes planicies frondosas, hasta mares, cascadas y junglas de tamaños formidables. Xenoblade consigue que nos sintamos pequeños en muchos sentidos. Ya sea por sus enormes estructuras que sobrepasan el alcance de nuestra vista, como tambien por un repertorio de criaturas salvajes y enemigos que pueblan dichos ecosistemas de un tamaño más que considerable.
Sus escenarios, llenos de secretos, misiones y objetivos secundarios harán las delicias de los fans de los mundos abiertos; podremos perdernos por este mundo y sentirnos como una pequeña hormiga caminando por él, descubriendo distintos recovecos, localizaciones y enemigos a cada paso que demos. Pero cuidado, porque tendremos que prestar especial atención al explorar. ¿Por qué? Porque la fauna salvaje puede ser peligrosa si no medimos nuestras acciones. Esto se debe a que en una misma zona podremos encontrar enemigos de nivel bajo, pero también enemigos de un nivel altísimo pululando por el mapeado.
Escalando en Complejidad
Llegamos a un punto muy peliagudo de análisis. ¿El motivo? Pues bien, si sois conocedores de los JRPG, sabréis que esta clase de juegos —en cuanto a mecánicas jugables se refiere— pueden llegar a ser muy complejos. En su caso, Xenoblade Chronicles se encuentra en un punto intermedio entre complejidad abrumadora y mecánicas sencillas.
El combate se desarrolla de modo automático en tiempo real. Esto se traduce en que nuestro personaje golpeará él solo a los enemigos con los que entablemos combate. Para realizar distintos movimientos especiales debemos fijarnos en la barra de habilidad en la parte inferior de la pantalla, las cuales se irán recargando a medida que pasen los segundos. Simplemente debemos seleccionar la habilidad, el momento y posición adecuada respecto al enemigo para causar gran cantidad de daño. Además de esto, a medida que avance la batalla, se irá rellenando una barra de grupo en la parte superior izquierda de la pantalla. Una vez rellenada podremos iniciar una sucesión de ataques en cadena e infligir una cantidad masiva de daño al enemigo.
Y aunque todo esto —sobre el papel— suena sencillo, no lo es para nada. A fin de cuentas, hay muchísimos factores a tener en cuenta la hora de luchar. Por ejemplo, posicionamiento del personaje, estados alterados, afinidad con tus compañeros, habilidades potenciadas, reducciones de habilidad, nivel y rareza del enemigo, etc. Esto se da, sobretodo, en los compases finales del juego, donde los picos de dificultad son ridículamente elevados.
A todo esto hay que sumarle una cantidad enorme de gestión de habilidades, equipo, armaduras y armas para cada uno de los 7 personajes controlables. Al final, el conjunto de Xenoblade Chronicles Definitive Edition nos llevará a rompernos la cabeza para encontrar la configuración óptima para cada personaje; pasaréis mucho rato en los menús, que no os quepa duda alguna.
Entabla confianza
Uno de los elementos más importantes, y que puede pasar muy desapercibido, es el Afinigrama. Como consecuencia de una pobre explicación por parte del juego, seguramente no sabremos muy bien que hacer con dicho apartado, el cual es fundamental para optimizar nuestros combates y el estilo. A medida que conozcamos a nuestros compañeros de grupo, su relación irá fortaleciéndose gracias a combatir juntos, tener conversaciones íntimas o realizar regalos.
Una vez hecho esto, cada personaje tendrá 3 árboles de habilidad distintos, cada uno enfocado a un estilo. No obstante, la cosa no acaba ahí, y es que las habilidades que vayamos desbloqueando en cada árbol de cada personaje podrá ser enlazada con otro distinto si cumplimos con los requisitos de confianza entre ellos primero. Por lo tanto, tendremos una variedad casi infinita de combinaciones distintas para cada uno de nuestros compañeros. Y es incomprensible que dicho apartado sea tan mal explicado cuando es algo fundamental.
Gráficos, sonido y Jugabilidad
Esta nueva versión de Xenoblade Chronicles podría considerarse un remake. El trabajo de remodelado ha sido muy extenso, pues las diferencias con los personajes originales eran (para que engañarnos) horribles. Ahora lucen mucho mejor. Además, en esta nueva edición se ha optado por un toque anime con diseños mucho más agradables a la vista. Se trata de un completo rediseño de su interfaz, ahora mucho más limpia y con todo en general mucho más claro. ¿Y que decir de su apartado artístico? Sencillamente, no encontrarás otr cosa igual fuera de la saga Xenoblade. Cabe mencionar que en modo portátil tiene una resolución de 560p. En modo dock, 720p. Es cierto que no son grandes números, pero luce excelente y apenas podría poner quejas dada la calidad artística del proyecto.
En cuanto a su banda sonora, podría decirse que es casi uno de sus mejores apartados. Incluye composición creadas por la mismísima Yōko Shimomura de sagas como Final Fantasy o Kingdom Hearts y otros grandes compositores del sector. Melodías originales como Beyond The Sky resonaran en vuestras cabezas durante días como una de las canciones más hermosas de los videojuegos. Sus temas han sido remasterizados respecto a sus versiones originales, lo cual le da un toque más orquestal y épico si cabe. Sin embargo, si preferimos su banda sonora original, podremos intercambiarla siempre que queramos. Además, viene con voces en inglés o japonés. Eso sí, prestad mucho ojo a la joya que es la traducción al castellano porque es para enmarcarla.
Su jugabilidad es adictiva y divertida y sus combates —una vez pillado el truco— son satisfactorios, pero peca de no explicar muy bien todos sus aspectos jugables. Por otro lado, cuando llevemos 60 horas y tengamos que farmear durante horas para seguir avanzando, puede que la diversión se resienta un poco. En general, se trata de un título redondo en cuanto a exploración de escenarios y combate a tiempo real se refiere, gracias en especial a la gran cantidad de opciones que ofrece y estilos de juego posibles con sus distintos personajes.
Conclusiones
Xenoblade Chronicles es un juego abrumador. Durante vuestras primeras horas os sentiréis como hormigas en un mundo que no está hecho a vuestra medida. Sin embargo, una vez terminado, os sentiréis como auténticos gigantes por haber completado semejante epopeya. Quedaréis fascinados por un mundo único y unos personajes cautivadores, por una historia increíble y unos villanos memorables, además de una banda sonora épica. Es una pena que ciertos apartados (pese a lo mucho que me duela) no están bien pulidos.
¿Ejemplos? Sus repetitivas e infinitas misiones secundarias, sus picos de dificultad inexplicables. Además, pese a tener una infinidad de tutoriales, siento que faltan muchos aspectos importantes por explicar al jugador. Si obvias estos detalles tendréis una aventura que os podría llegar perfectamente a las 100 horas y muchísimo más. Para concluir, y por si fuera poco, una vez terminada la historia tendremos su nuevo contenido adicional llamado Futuros Conectados, contenido adicional que nos llevará hasta unas 15 o 20 horas extra para terminarlo. Incluye nuevos escenarios, enemigos y mecánicas jugables nuevas.