Sony sorprendió el pasado jueves con un State of Play repleto de juegos muy esperados e interesantes. Pudimos ver títulos tan deseados como Resident Evil 4 Remake, Callisto Protocol o Street Fighter 6. Sin embargo, si hay un mensaje que la compañía dejó de forma indirecta y contundente es el de la tecnología de la Realidad Virtual. A fin de cuentas, sigue contando a día de hoy con mucho escepticismo. No obstante, ha llegado para quedarse y ya es el momento de empezar a darle la importancia que merece con PSVR 2.
La apuesta de Sony por el PSVR 2
En estos años que vengo disfrutando de la VR me ha quedado algo claro: esta nueva manera de entender los videojuegos que no viene en absoluto a sustituir sino a complementar, tiene la capacidad de ofrecer experiencias que en el videojuego tradicional son imposibles de plasmar.
Puede que modas pretéritas como el sistema de control por movimiento que implementó Nintendo Wii o la decepcionante promesa de Kinect hayan provocado en las compañías más importantes cierta precaución a la hora de apostar por la Realidad Virtual, dudosas aún de que esta tecnología pueda correr la misma suerte que tuvieron otras “revoluciones” en nuestra forma de jugar. Es por ello que, cuando uno se sumerge en el denso catálogo de videojuegos para VR que podemos encontrar tanto en Steam como en la tienda de Oculus, es plenamente consciente de algo: hay potencial e ideas fantásticas que funcionan a las mil maravillas, pero faltan nombres importantes, estudios grandes y, por tanto, inversión.
Hace falta un nuevo impulso y parece que Sony lo dará
Prácticamente, el 90% del catálogo de Realidad Virtual son propuestas de estudios independientes que, incluso sin muchos recursos, son capaces de ofrecer auténticos juegazos, con una creatividad asombrosa a la hora de aprovechar las bondades del entorno virtual.
Sin embargo, al tratarse de una manera de jugar tan inmersiva y basada en sensaciones, es muy complicado atraer a usuarios que jamás han dado el salto y que a través de gameplays que se visualizan por Internet, únicamente pueden ver títulos desconocidos cuyo atractivo real no pueden percibir.
En estas circunstancias, Sony le ha dado la vuelta a la tortilla en poco más de diez minutos de evento y cinco títulos de Realidad Virtual, pero ha ofrecido justo lo que la VR necesitaba: estudios con talento, nombres conocidos y presupuesto para destacar. Es un buen sistema para atraer a los todavía escépticos de esta forma de jugar.
El mayor exponente de este cambio de paradigma es sin duda Horizon: Call of the Wild. Un título que, a diferencia de Resident Evil Village, no presenta una nueva manera de disfrutar de la misma aventura sino una historia completamente nueva dentro del universo del juego. Por tanto, todos aquellos fans de la franquicia que quieran conocer todo lo que ocurre en ella, deberán pasar por un visor PSVR 2 para no perderse nada.
¿Qué futuro le aguarda a la realidad virtual?
No soy adivino, pero tengo claro que una IP tan importante en una consola llamada al éxito de masas como PlayStation 5 con una puesta en escena tan llamativa, va a conseguir que más de uno se adentre en la Realidad Virtual. Esto, sumado al arrollador éxito de Resident Evil 4 en la plataforma de Meta Quest, puede derivar en que, por fin, más compañías importantes se animen a adaptar sus franquicias más famosas a la VR, ya sea con ports o entregas nuevas.
Cuando ese momento llegue, y llegará, muchos se animarán al menos a probar la Realidad Virtual, descubriendo que no marea tanto o nada como pensaban, que se puede disfrutar de videojuegos completos y complejos y que las sensaciones que trasmite solo son entendibles al ponerte el visor y dejarte llevar.
Evidentemente, la VR nunca será para todo el mundo, tampoco lo es ningún videojuego o género concreto, pero Sony parece dispuesta a cambiar el rumbo y la percepción de esta con PSVR 2. Y es que puede que Meta sea el punto del que todo nace, quien marque el camino y lo facilite para todos los que estén dispuestos a emprenderlo tras ellos.
Sin embargo, si hay una compañía y una marca que puedan conseguir que ese camino se llene de millones de peregrinos, son Sony y sus consolas PlayStation. Como fanático de la VR, sólo puedo decir a Sony : gracias y a por ello.