Japón abraza a Europa en este manga de misterio, y te lo cuento en mi reseña de Lost Lad London n.º 1

Desde tiempos inmemoriales, las historias en la que un hombre inocente acaba involucrado en un crimen con el cual resulta tener más relación de la que él mismo creía son relativamente habituales. No obstante, no es tan frecuente que disfrutemos de este tipo de narrativas mediante una trama engendrada en el país del Sol Naciente. Menos todavía cuando a la ecuación le agregas la ciudad de Londres como escenario y un dibujo con carácter occidental. ¿Os llama la atención? A mí me pasó, y es por esto mismo que hoy os he querido traer mi reseña de Lost Lad London.

Licenciada por Distrito Manga, de buenas a primeras parece un thriller más. Hasta cierto punto, lo es, ya que la base no es novedosa al uso. La historia se construye en torno a un chico asiático que fue adoptada por una familia cualesquiera. Por desgracia, sus verdaderos padres ocultaban más de un secreto, y ahora su pasado le persigue a través de un asesinato que no cometió. Incriminado, se podría enfrentar a un cargo de asesinato, aunque no todo está perdido.

Tras echar un vistazo a las noticias, se entera de que el alcalde de la ciudad fue asesinado a la misma hora y día que él cogía el metro. Para su sorpresa, en su abrigo aparece un cuchillo lleno de sangre. ¿Casualidad? No, no lo es. Justo en ese momento un policía llega a su casa, pues decide hablar con todos los que estuvieron en el transporte público a esa hora. Asustado, el joven le cuenta lo ocurrido… Y así comienza la historia de Al Adley, un universitario normal y corriente, y Ellis, un investigador lleno de arrepentimientos.

Reseña del manga Lost Lad London n.º 1 | Portada, sinopsis y edición

Al, un estudiante londinense de origen asiático, siente que no encaja con su familia adoptiva, por lo que prefiere vivir en un piso compartido, lejos de sus padres. Su ambición es licenciarse y pasar desapercibido… Aun así, su vida da un vuelco cuando, al subir al metro, aparece asesinado el alcalde de la ciudad. Ellis, un detective aparentemente rudo pero muy competente, es puesto al frente del caso pese a tener un brazo y una pierna escayolados. Acosado por el recuerdo de una investigación que salió mal, está decidido a no volver a incriminar al hombre equivocado. Sin embargo, Al descubre un cuchillo ensangrentado en el bolsillo de su abrigo, entonces el inspector Ellis llama al timbre… ¿Se ha convertido el joven, sin saberlo, en el principal sospechoso?

Para sorpresa de nadie, Distrito Manga ha vuelto a realizar un gran trabajo en términos de impresión, traducción y maquetación. En líneas generales, Lost Lad London es un tebeo de gran calidad cuando hablamos de sus características físicas. Además, dispone de una buena traducción, por lo que no podemos ponerle realmente ninguna pega.

Las raíces de un crimen con forma de escándalo

Dicho esto, ¿qué podemos esperar de Lost Lad London? De buenas a primeras parece una historia de misterio sin demasiado trasfondo. Un día como cualquier otro, el alcalde de la ciudad aparece muerto en el metro de la ciudad. Nadie sabe quién ha podido cometer un acto así, y la policía se encuentra entre la espada y la pared: no resolver este caso podría dañar muchísimo su reputación. Y aunque no se dice de manera tan directa, se deja caer: muchos agentes están deseando echarle el guante a cualquier sospechoso por su propio bien.

En ese sentido, Al Adley es la víctima perfecta. Viajó en tren ese día y, al volver a casa, en su abrigo aparece un cuchillo repleto de sangre. No obstante, él es inocente, y lo sabemos. ¿Le creerán? Mientras intenta pensar en lo ocurrido, alguien llama a casa: es el detective Ellis. Herido y en muleta, le hace unas cuantas preguntas, aunque no sospecha de él. Es algo casi rutinario. Incluso se podría decir que es instinto. En cualquier caso, Al —sin presión ninguna por parte del policía— decide enseñarle el cuchillo y contarle lo ocurrido.

Contra todo pronóstico, Ellis le cree, pues ve sinceridad en sus palabras. Además, su pasado le atormenta: ¿Encarceló a un joven inocente en el pasado y eso le sigue persiguiendo años después? Así parece ser, puesto que decide ayudar a Adley. De base están en una posición muy mala, pues cualquier otro agente de la ley habría procedido a arrestarle; la sola pertenencia del arma homicida es prueba más que suficiente para considerarle el sospechoso principal.

Una incriminación con más trasfondo del que parece

Pronto las cosas comienzan a torcerse. ¿Su compañero de piso, y uno de sus mejores amigos, podría haberle usado como chivo expiatorio? ¿Estaba relacionado con el alcalde de alguna manera? En apenas un tomo la trama se complica muchísimo, pero no de manera enrevesada. Con gran acierto, el autor va agregando nuevas especias para así darle más sabor a su creación. Y si bien es cierto que al principio es un manga un poco lento, no tarda en coger ritmo. Le cuesta, pero cuando pone sobre la mesa, gana varios puntos.

Todo sea dicho, tampoco es que se complique en exceso, cosa que tiene bastante sentido si tenemos en cuenta que hablamos de un manga de solo tres volúmenes. Y aunque es pronto para hablar, creo que le sentará bien, pues esta es una de las principales razones por las que su narrativa funciona desde el primer momento. Por supuesto, luego el guion puede ser mejor o peor. Pese a ello, la apertura es buena, y te deja con ganas de más. Genera curiosidad, siendo esto algo indispensable en cualquier manga de misterio que se precie.

Para hacerlo utiliza tropos que ya hemos visto anteriormente. Tenemos posibles líos de faltas y relaciones interpersonales desconocidas, pequeñas traiciones… Shima Shinya recoge elementos tópicos del manga de misterio y los adereza de tal manera que se sientan únicos. Lo consigue hasta cierto punto gracias a dos elementos. Por un lado, es adoptado y no conoce a sus padres, por lo que es fácil justificar cualquier falta de información por su parte. Por el otro, gracias al dibujo. La verdadera razón por la que Lost Lad London se siente diferente es su dibujo.

Reseña del manga Lost Lad London n.º 1: conclusiones

Tal y como ya habréis podido comprobar en las distintas imágenes del manga que hemos usado, Lost Lad London tiene un arte que se aleja de lo que solemos ver en el país del Sol Naciente. Se acerca muchísimo al tebeo independiente europeo y americano. Sin saberlo, me atrevería a decir que se inspira en estos, puesto que tanto la dirección narrativa como el arte me hacen pensar en algunas de las obras más importantes de Occidente.

No obstante, aunque dice acercarse a estas, lo hace desde una perspectiva diferente. La forma en la que maneja los trazos y las sombras tiene reminiscencias del país en el que ha nacido, creando así un estilo bastante único que combina ambos mundos. Obtuso de buenas a primeras, puede costar pillarle el punto, pero encaja bastante bien con la historia. En general, diría que funciona, mas te tiene que llamar la atención desde el primer momento.

Dicho esto, considero que Lost Lad London es una lectura interesante y una buena apuesta para quienes busquen una nueva historia de misterio. Al ser cortita no supone un gran desembolso, y tiene buena pinta. El primer tomo asienta bien sus bases, dispone de un buen ritmo genera curiosidad. Le auguro un buen futuro, aunque solo el tiempo dirá si esto es cierto o no.

• Tiene un estilo artístico bastante único.
• El ritmo es bueno y la narrativa funciona.
• Genera curiosidad.
• Maneja bien el cruce de sospechas y los giros de guion.

• Le cuesta un poquito arrancar.
• El dibujo es bastante particular, tanto para lo bueno como para lo malo.