Hace tiempo leí las primeras aventuras en las que participaban los Great Lakes Avengers, totalmente alejados de la figura convencional del héroe enmascarado y justiciero. Me interesé por ellos debido a que nunca había escuchado ese nombre antes, y porque en una de sus aventuras se daba a entender que aparecía el Doctor Doom, mi personaje favorito, ( cosa que tampoco me sorprendió demasiado, porque suele ser un villano bastante recurrente en la mayoría de historias), aunque luego me percaté de que no era así: aquel que afirmaba ser Víctor Von Doom era una persona que había querido entrar en el grupo pero que se vio rechazada por no tener poderes. «Leather Boy» era su nombre( el hombre tenía un fetiche con el cuero).
Me resultaron bastante simpáticos, qué queréis que os diga. Además que también pensé que era injusto que fueran considerados héroes de segunda categoría, cuando en los Great Lakes Avengers cuentan con individuos con poderes bastante curiosos: por ejemplo, mi favorito, Doorman, cuyo cuerpo es básicamente un portal por el que se puede viajar a cualquier parte. Las restantes personas que conforman los Great Lakes Avengers son Big Bertha, que puede alterar la altura y masa de su cuerpo por voluntad propia; Flatman, que es algo así como un Reed Richards menos poderoso e incapaz de adoptar una forma normal, en tres dimensiones; y Mr. Inmortal, el jefe del equipo que, como su nombre indica, es incapaz de morir. Sin olvidarnos de la Mujer Ardilla, que de vez en cuando ha colaborado con ellos.
Pues bien, los Great Lake Avengers han conseguido su propia colección de nuevo, y espero que los fans se decidan a comprarla, porque no tiene pérdida. Una combinación de humor y a la vez de reflexión sobre la crudeza de la vida y las personas en general. A la vez que se ven involucrados en situaciones inverosímiles, estos héroes tendrán que hacer frente a los tópicos de la sociedad, y demostrar que no son ninguna broma.
Esta serie nos llega de las manos del guionista Zac Gorman y del dibujante Will Robson.
