Hace unos días se entregaron en la capital nipona los trigésimo séptimos premios de la Academia de Cine Japonesa, mejor conocidas como los Óscars japoneses. Así como su más famoso homólogo estadounidense, el premio estrella de la noche fue el premio de mejor película, pero como hablamos de Japón donde el fuerte es la animación, fue el premio a Mejor Película Animada.
La película merecedora de este tan deseado premio fue El niño y la bestia, película dirigida por el reconocido director japonés Mamoru Hosoda (La chica que saltaba a través del tiempo, Summer Wars) que ha hecho méritos con esta película para merecer este premio sin duda alguna. Dentro de esta categoría compitió contra grandes de la industria como The anthem of the Heart de Tatsuyuki Nagai, Miss Hokusai de Keiichi Hara, Dragon Ball Z: La resurrección de F de Tadatoshi Yamamuro y Love Live! The School Idol Movie de Takahiko Kyôgoku.
Asimismo la película más galadornada en esta entrega fue nada más y nada menos que la adaptación del manga Umimachi diary de Akimi Yoshida: Nuestra hermana pequeña de Hirokazu Kore-eda que aparte de ganar el mismo premio que El niño y la bestia, pero como película no animada, se llevó otros 5 de los doce a los que se encontraba nominada. Podéis encontrar más información acerca de las nominadas a esta categoría en una anterior entrada que hicimos en esta web a mediados de enero.
Si quieres saber un poco más acerca de El niño y la bestia no dudes en revisar otra entrada que tenemos acerca de ella haciendo clic aquí.
Kyuta es un niño solitario que vive en Tokio, y Kumatetsu es una criatura sobrenatural aislada en un mundo fantástico. Un día, el niño cruza la frontera al otro mundo y entabla amistad con Kumatetsu, que se convierte en su amigo y guía espiritual. Este encuentro les llevará a vivir multitud de aventuras.
