Análisis de Razer Huntsman Elite

¡Hola, muy buenas amantes de los videojuegos! Tras experimentar de primera mano el potencial de un teclado mecánico, cambié aquesta mi opinión. Todo comenzó con Razer Blackwidow Elite, periférico que hoy recuperaremos a la hora de trazar una pequeña comparativa con nuestro protagonista del día: Razer Huntsman Elite. Por tanto, os hablaré de mis sensaciones al respecto, aunque desde un punto de vista práctico, pues no es mi intención centrar mis experiencias en un anagrama de detalles técnicos. Cómo no, repasaré algunas de sus especificaciones, pero de manera ilustrativa.

Diseño

Una de las grandes premisas de Hunstman Elite es su grado de familiaridad con la serie BlackWidow u otros teclados de la marca. De hecho, Razer tiende a optar por líneas estéticas muy similares en sus diversos productos para así mantener un alto grado de cohesión entre sus diversos productos. Así pues, no encontraremos grandes distinciones entre uno u otro, pues el arquetipo es el mismo. No obstante, sí que existen una diferencias notables entre un teclado u otro. Centrémonos en eso.

Razer Huntsman Elite es un teclado bastante robusto. Encabeza su diseño una almohadilla para reposar las muñecas con LEDs propios. Se puede, o bien dejar a un lado, o bien conectar al teclado como tal mediante una serie de clavijas imantadas; son recias, por lo que no debemos tener miedo a que se rompan. Siguiendo la misma línea, esta almohadilla es, cuando menos, grande. Y cómoda, muy cómoda. Es, sin lugar a dudas, una mejora respecto a tiradas anteriores. Por el contrario, Huntsman no incluye USB y/o jack en su lateral izquierdo, detalle que he terminado echando de menos en su diseño.

Continúa la línea visual un complejo sistema de LEDs. El acabado es, una vez más, negro mate, pero con cierta sensación de metal pulido; el resultado es un teclado muy bonito sin necesidad de grandes alardes. La presentación es sobria. Asimismo, me ha parecido un poco más pesado y grande que otros teclados de la marca, pero de forma positiva. La distribución de las teclas, manteniendo la idea fija de cualquier otro teclado, es adecuada. Escribir y/o jugar es, válgase la redundancia, cómodo. Muy cómodo.

Razer Hunstman Elite, una nueva generación de teclados Elite

Otra de las novedades —es un aspecto presente en varios de sus teclados del cual, además, me declaro adepto— es la presencia de cuatro botones adicionales. Como cualquier teclado, Huntsman posee una sección alfanumérica, flechas de dirección y/o un apartado numérico más pequeño. Este último se localiza en el lado derecho. En ese mismo flanco, en la parte superior derecha, están esos cuatro botones. Con estos podremos alternar entre nuestro contenido multimedia. Los tres primeros botones nos permiten retroceder, pausar o avanzar en nuestra playlist de YouTube o de nuestro reproductor, por ejemplo. El cuarto botón nos permite subir o bajar el volumen mediante una rueda o usar la función de mute si pulsamos sobre esta. Un añadido muy interesante, sobre todo, para el streaming.

En otro orden de cosas, las luces LEDs. Todo el teclado viene equipado con su propia luz LED. La configuración inicial alterna entre una pequeña gama de colores en una especie de arcoíris cambiante. Podemos, o bien desactivarlo, o bien ajustarlo a nuestro gusto y antojo, pero para ello requeriremos de Razer Synapse, un programa externo desarrollado por la compañía. Mediante este podremos iluminar de una forma u otra cada tecla de forma individual o en conjuntos personalizados, o dejarlas apagadas. También se nos permitirá configurar que las luces se apaguen de forma automática cuando llevamos un tiempo determinado sin accionar ninguna tecla.

Cambiando una vez más de tema, el rendimiento. Como todo buen teclado mecánico de gama alta, Huntsman responde a las mil maravillas. Hunstman Elite, en concreto, es una verdadera delicia para cualquier tipo de redactor y/o jugador. La tasa de respuesta es increíble; el rendimiento aumenta de forma cuasi imperceptible, pero esta ahí. Es fácil adaptarse a él y, además, es eficiente a la par que satisfactorio. Incurriendo en una de sus especificaciones, podemos explicar esto mediante Razer Mechanical Switch y sus switches optomecánicas. Esto vendría a ser, en cristiano, que cuentan con un sensor dentro del cuerpo de cada tecla. Estos sensores emiten una señal con cada pulsación, lo cual mejora su tasa de reacción así como la vida útil del teclado en 100 millones de pulsaciones.

Análisis Razer Hunstman Elite, conclusiones

En lo que se refiere a la cota de calidad, Razer Huntsman Elite me ha sorprendido para bien. Ignorando cualquier factor relacionado directamente con el diseño, me he encontrado con un teclado efectista y en el que, al final, lo más importante de todo es la calidad de sus componentes y su comportamiento en líneas generales. Disculpad la redundancia y repetición respecto a mis palabras anteriores, pero es cómodo y de gran rendimiento. Es una gran opción para quienes busquen un teclado dedicado a la escritura. No solo eso, sino que es una fantástica herramienta para el gaming. En mi caso lo he testeado con todo un MOBA como League of Legends y otras variantes tales como el shooter single player (Terminator: Resistance). En todo caso, ya sea en Apex o Kingdom Come: Deliverance, ha cumplido con todas mis expectativas.

Razer Huntsman Elite es un periférico de alta calidad. Como suele suceder, su mayor problema es el precio: 209,99 euros. Sigue siendo una inversión bastante fuerte para un periférico, no nos vamos a engañar. Ahora bien, si llevas tiempo pensando en subir el nivel de tu setup con un teclado mecánico orientado al gaming, aseguro que Huntsman es una buena opción. Tal vez, y solo tal vez, sea más interesante si esperas a una rebaja, tal y como hice yo con BlackWidow, pero eso ya depende de ti y de tus necesidades. Como suelo decir, depende de cada uno valorar que tipo de herramientas necesita.