Ghost Recon Wildlands ofrece una historia sobre narcotráfico en un momento de gran éxito comercial sobre este tema
Tras unos días después de su lanzamiento, desde FreakEliteX os traemos el análisis exhaustivo del nuevo sandbox de Ubisoft: Tom Clancy’s Ghost Recon Wildlands.
Análisis de Ghost Recon Wildlands | De PC a N-Gage, hasta la generación actual
Ya hemos podido probar Ghost Recon Wildlands, el nuevo título de Ubisoft desarrollado por su filial Ubisoft Paris. Un shooter táctico en mundo abierto que nos ha dejado con muy buenas sensaciones tras las distintas partidas que hemos jugado.
La saga Ghost Recon nació en 2001 para PC. Basada en los libros de Tom Clancy (como el caso de Rainbow Six Siege, aunque éste con mayor acierto en la adaptación que Ghost Recon), ha cosechado grandes éxitos en todas las entregas que se han ido produciendo en los últimos 16 años en las distintas plataformas en las que se ha ido lanzando.
Ubisoft debió pensar: ¿Qué mejor momento para hablar de una historia sobre narcotraficantes que ahora? Con la moda de las series y películas sobre este tema, el estudio desarrollador ha debido pensar que era ahora la época más adecuada para poner sobre la mesa un argumento que, si bien sirve más como excusa para el gameplay que como argumento central de las misiones, funciona muy bien como hilo vertebrador para poder comprender qué hacemos y qué no aunque acaba diluido entre tantas misiones.
Analizamos pues, todos los aspectos que se pueden extraer de este nuevo título de la ya conocida saga de Tom Clancy y que, pese a sus defectos y virtudes, no se puede considerar una obra maestra pero sí un juego recomendable al que se le deben echar unas 30-40 horas para poder acabar su modo historia.
Santa Fe, la Unidad y Bolivia: el Paraíso Narco perfecto
El juego comienza con una extraordinaria intro cinemática mostrándonos al villano principal del juego: El Sueño, un señor que pone los pelos de punta con solo mirarlo. El narcotraficante más importante de toda Latinoamérica y que controla por completo Bolivia con su red de mercancías de droga a través del soborno de políticos y milicia local y de la extorsión, la amenaza y la intimidación.
El Sueño controla el cártel de Santa Blanca, que a su vez está operado por múltiples sublíderes que le deben lealtad y que conforman una auténtica red del narcotráfico en un paraíso de drogas y extorsión.
Por ello mismo, los pocos rebeldes que quedan en Bolivia están en contacto con una espía norteamericana, Karen Bowman, que lleva cinco años haciéndose pasar por una trabajadora humanitaria. Ella se pone en contacto con el escuadrón Ghost Recon, un grupo de cuatro veteranos y experimentados soldados especiales de Estados Unidos que son «invisibles» porque ayudan desde las sombras para acabar con ciertos asuntos. Nunca se llevan el mérito porque públicamente no existen, por lo que sus hazañas son consideradas hitos de terceros, en este caso, de los rebeldes. Nosotros somos uno de esos integrantes del escuadrón Ghost Recon.
La Unidad
Pero Santa Blanca, a pesar de su ya de por sí, extenso ejército, cuenta con la ayuda de la Unidad, un despliegue militar que debe velar por los intereses de los ciudadanos bolivianos pero que, contrariamente, ayudan al cártel porque están sobornados. La Unidad funciona a modo de «policía» en Grand Theft Auto. Si detectan nuestra presencia se activará el protocolo 1. Tiene un nivel máximo de 4, que todavía no hemos comprobado, pero que seguramente sea casi imposible de huir.
Así pues, el objetivo de los Ghost Recon es destruir desde las sombras el cártel mermando su fuerza y poder a través de los asesinatos de los altos cargos hasta alcanzar a El Sueño.
Nuestro personaje es, como en el caso de The Division (IP similar por el modo cooperativo pero diferente en su argumento), completamente personalizable (en un sistema de creación muy bueno y que da cantidad de posibilidades como el género, las facciones, tatuajes, ropa, accesorios, etc.), por lo que cada jugador posee un héroe diferente.
Mundo abierto, misiones de todo tipo y capitanes de regiones
El vasto mapa de Ghost Recon Wildlands se divide en múltiples regiones con menor o mayor dificultad, por lo que es recomendable ir in crescendo, es decir, primero completando las fáciles e ir subiendo de escalón hasta completar las 20 áreas que hay. Esas regiones son controladas por capitanes o líderes que forman parte de la red del cártel de Santa Blanca y que suponen todo un reto.
Análisis de Ghost Recon Wildlands tiene mucho que mostrar
Pero dentro de cada una de ellas se encuentran también otras misiones secundarias que detallamos a continuación y que nos sirven para mejorar nuestro propio arsenal y nuestro árbol de habilidades y las relaciones y apoyos que podamos recibir de los rebeldes que se van uniendo a la causa.
Las medallas de bonificación: nuestro personaje posee un árbol de habilidades que podemos mejorar conforme adquirimos experiencia y conseguimos puntos (algo similar a otras IP’s como Assassin’s Creed o The Dvision por nombrar de la misma casa). En ocasiones, podemos conseguir medallas que dan mayor bonificación por cada habilidad que compremos, de tal manera que esa misma habilidad mejorará si poseemos su medalla.
Arsenal de armas: este tipo de misión es la búsqueda de alijos de armamento que pueda tener el cártel y que nos proporciona mayor abanico de armas que equipar y mejoras de sus piezas (como miras, cargadores, cañón, etc.).
Puntos de habilidad: si queremos mejorar a nuestro personaje para que pueda enfrentarse mejor a los enemigos, necesitaremos puntos de habilidad que nos servirán para desbloquear nuevas mejoras. Si completamos estas misiones, podremos conseguirlos.
Misiones de apoyo: son aquellas que sirven para ayudar a los rebeldes. Pueden ser de robo de aviones, avionetas y medicinas, pasando por incautación de convoys, inutilizar torres de radio o robar suministros para los rebeldes entre otras cosas.
Búsqueda de información: estas misiones son, o bien para conseguir ubicaciones y desbloquear nuevas misiones principales, o bien para conseguir información sobre las misiones de apoyo, las de armas o las de medallas o puntos de habilidad. Puede funcionar tanto en interrogar al narco de turno como encontrar planos o dispositivos a piratear para conseguir dicha información.
En definitiva, aburrirte no te puedes aburrir, al menos, por la cantidad de misiones que se nos aparecen en el mapa. Quizá, en alguna ocasión se hacen un poco monótonas porque, al final, siempre estás haciendo lo mismo, pero proporcionan un aliciente cuando trabajamos en equipo con el online cooperativo, del que hablaremos más adelante.
Combate táctico: drones y armas
El combate es uno de los aspectos que más ha llamado mi atención. Así como cualquiera pensaría en un primer momento que, por ser un juego enfocado al shooter se debe ir la aventura, en esta entrega el sigilo y la estrategia es una parte muy importante de las mecánicas.
Tenemos en nuestro poder un dron que enviamos para inspeccionar el terreno hostil. Y éste podrá ser mejorado en nuestro árbol de habilidades que comprende mútliples aspectos: desde mejoras físicas, mejoras de objetos, de trabajo en equipo, etc.
En el caso de nuestro compañero robot, el alcance, la batería, la velocidad y el sigilo serán los aspectos que pueden ir mejorándose. Cuanto más lo mejoremos, más tiempo podrá permanecer en el aire, más lejos lo podremos enviar y menos alertará a los enemigos. Es una interesante implementación que ayuda muchísimo en los combates.
Observación
Aquí el estilo de juego va en función de la persona, pero en una dificultad alta y en una región con enemigos más fuertes, no es recomendable lanzarse al ruedo. Es mejor meditar, observar el entorno y probar a introducirse con sigilo.
Un aspecto que no hemos mencionado aún de Ghost Recon Wildlands es el disparo en conjunto, una habilidad que nos permite, según la mejoremos, poder disparar incluso los cuatro jugadores a la vez a distintos objetivos sin que nos vean. Muy útil si quieres quitarte a enemigos esparcidos en solitario por las áreas para no alertar a sus compañeros. Y esto es muy importante.
Si uno de los enemigos detecta que alguien ha sido asesinado puede meternos en un grave lío. En zonas o regiones con alto nivel de dificultad, los entornos hostiles cuentan con defensas como alarmas, paneles de luz cegadora, luces movibles, generadores de electricidad, y un largo etcétera.
Si averiguan que estamos por los alrededores no se andarán con chiquitas. Todo el despliegue vendrá y, además, llamarán a los refuerzos. En muchos casos aparecen coches con ametralladoras o helicópteros que nos harán la vida imposible en la intemperie. Hay que andarse con mucho ojo y saber en qué momento disparar y a quién para que su desaparición no sea un hecho que les alerte.
Aunque, a pesar del buen nivel de dificultad, nos encontramos con un error muy destacable en el modo solitario. Cuando estamos escondidos pero nuestros compañeros manejados por la IA están al descubierto, los enemigos no les hacen nada porque el juego no detecta que seamos nosotros. Eso, a pesar de ser una ayuda para el jugador no deja de ser poco realista y desmerece en el conjunto.
Muchas posibilidades, muchos entornos, jugabilidad regular
El mapa de Ghost Recon Wildlands nos ofrece tantas posibilidades que resulta abrumador. Es el mayor diseño de mundo abierto que han realizado en Ubisoft, según la propia compañía gala, y eso se nota. En ocasiones hay lugares que están desiertos y no ofrecen nada, pero en otros hay cientos de cosas que hacer y eso es de agradecer.
No es admisible que, por hacer el mapa más grande, no haya contenido que ofrecer dentro de él. Pero algo a destacar es la cantidad de entornos que muestran. Un equipo de Ubisoft se desplazó hasta Bolivia para poder localizar y fotografiar muchos de los lugares y poder recrearlos en el juego para ofrecer un mapa con microecosistemas repletos de naturaleza dispar. Nos podemos topar con zonas desérticas, montañas nevadas, valles repletos de vegetación, zonas semi-pobladas, ciudades y áreas rurales, entre otras.
La jugabilidad tiene su aquel
El movimiento dentro del mapa se puede realizar en cualquier vehículo que quieras. En modo terrestre tienes a tu disposición coches, camiones, camionetas, furgonetas, todoterrenos, artillerías, motos, etc. En el aéreo cuentas con helicópteros, aviones, avionetas y helicópteros militares. Y en el acuático también puedes utilizar lanchas y motos de agua.
No obstante, y a pesar de esta diversidad, el manejo de los vehículos resulta en ocasiones un poco robótico y duro. Los helicópteros son complicados de manejar y hay ciertos coches que derrapan demasiado o frenan tarde y los giros que se producen son extremadamente abiertos haciéndonos salir de la carretera o no pudiendo esquivar otros coches con mucho acierto. Es algo que destacamos como negativo porque resulta molesto en alguna ocasión.
Gráficos y entornos visuales
Si hay algo que resulte bonito son los paisajes. Es una de las cosas que más nos ha gustado del título. Los entornos están perfectamente recreados y las vistas son preciosas. El motor gráfico es potente pero no lo suficiente como para ofrecer modelados hiperrealistas en los personajes. Algunas texturas de estos resultan demasiado «plasticas» y sus animaciones no son las más humanas, dando a veces la sensación de que quedan robóticas.
A pesar de esos defectos, estamos ante un juego muy bueno con unos gráficos impresionantes en términos paisajisticos. Los efectos de sol, lluvia y los ciclos de día y noche son verdaderamente realistas y, muchas veces, juegan un papel destacado en la jugabilidad.
Por ejemplo, cuando conduces en un día lluvioso o tras una potente lluvia, las ruedas que dan al asfalto salpican agua y los frenazos son más pronunciados que si el suelo está seco.
Como bien hemos destacado anteriormente, hay que recalcar la cantidad de entornos y microclimas con los que cuenta el juego y su realismo. Nos encontramos con lugares nevados, desérticos o con zonas pobladas que contienen infinidad de detalles y que hacen que el juego gane en calidad. Son las pequeñas cosas las que hacen que un producto se diferencie.
Cooperar para avanzar
El mayor punto interesante de Ghost Recon Wildlands lo presenta el multijugador cooperativo. Ningún juego lo implementa de un modo tan interesante y adictivo (al menos para mí) como éste. Apenas hemos tenido problemas de lag y su fluidez es muy buena. Puedes unirte en cualquier momento a un equipo de hasta cuatro jugadores (incluyéndote a tí) y en ese momento puedes ir por libre o trabajar en equipo. Eso ya depende de cómo te guste jugar o de si la gente que juega contigo es más o menos dada a cooperar.
Y esa es la gracia. Que para poder avanzar en la historia se puede cooperar. No es un modo alterno de juego, es la propia historia principal y sus infinitas misiones secundarias la que juegas o en modo solitario o cooperativo. Puedes escoger una misión y que el resto se enganchen a ella o bien que dos vayan por libre y los otros dos por libre y trabajar en otras misiones al mismo tiempo.
La oportunidad del modo cooperativo ofrece mucha libertad, pudiendo formar parte o no de una misión que quizá no quieras hacer o sí.
El modo cooperativo es, para nosotros, casi como debería jugarse en su totalidad. Más aún sí lo compartes con otros tres jugadores que conoces. Puede dar mucho más juego y diversión a la hora de enfrentarse a los narcos bolivianos.
Conclusiones
En definitiva, podemos hacer un balance de Ghost Recon Wildlands como un título con muchas opciones interesantes en el combate táctico que, en ocasiones puede resultar monótono cuando realizamos misiones secundarias por su repetitividad, pero que en compañía con el modo cooperativo se convierte en toda una delicia para pasar un rato verdaderamente divertido.
Entornos visuales muy bonitos con algún bug inesperado pero que no desmerecen un título que, si bien no reinventa el género de los «sandbox», es muy recomendable.
Lo mejor: Mundo abierto muy explorable, amplias posibilidades y combate táctico estratégico muy interesante. En cooperativo todo mejora considerablemente.
Lo peor: Misiones a veces repetitivas, IA enemiga un poco deficiente, manejo de vehículos tosco y modelado de los personajes «plástico».
Nosotros estamos muy satisfechos con el juego, pero nos interesa aún más lo que penséis vosotros. ¿Os gusta? ¿Estáis disfrutándolo?
Si aún os habéis quedado con más ganas de Ghost Recon Wildlands os recordamos que ya está disponible su pase de temporada para ampliar la experiencia jugable y que ha sido el mejor lanzamiento en lo que llevamos de año.