Artículo escrito en colaboración con 10Geeks.
Si hay algo que une a toda la comunidad gamer del mundo, más allá del lanzamiento del nuevo survival o del próximo juego RPG revolucionario, es algo que todos sentimos cuando llevamos horas y horas jugando: las molestias, dolores de espalda y cabeza. Algo que si no cuidamos y tratamos a tiempo, puede acabar convirtiéndose en una gran fuente de problemas.
A casi todos y todas nos ha pasado que después de una gran sesión de juego hemos tenido estos síntomas, incluidos problemas de vista —incluso a veces pueden llegar a aparecer mareos—. Lo bueno es que estas dolencias, que en ocasiones parece que tienen una difícil solución, con un par de buenas prácticas de prevención serán fácilmente combatidas.
Así que si quieres seguir disfrutando de tu gran pasión sin problemas, sigue leyendo; te ayudaremos para que solo tengas que preocuparte de jugar sin parar.
¿Cómo y dónde te sientas?
O lo que es lo mismo, ¿qué silla estás utilizando? En los últimos tiempos, han salido al mercado un montón de sillas gamer específicamente pensadas para este propósito. ¿En qué se basan? Lo principal es que focalizan y resuelven los problemas más comunes para ponerle soluciones:
- Problemas de espalda y cadera. Tienes que asegurarte de que tus pies llegan bien al suelo; y, asimismo, de que puedes apoyarlos totalmente y no quedan «sueltos» en el aire. Además, la espalda debe estar totalmente recogida, sin puntos de la misma que se queden al aire; así se repartirá mejor todo el peso y no habrá puntos focalizados de dolor.
- Las rodillas deben quedar en una posición de 90° frente a las caderas y al suelo. Esto asegura que la espalda está bien alineada y evita tensiones innecesarias.
- El respaldo de la silla sin embargo no debe mantenerse en 90° —es decir, totalmente perpendicular al suelo—. Mejor si puedes tener una pequeña inclinación hacia atrás con un ángulo de unos 100/110° sería lo ideal. Si tienes algún hueco en la espalda, utiliza un cojín o almohada que te haga estar más a gusto.
- Por último y de los que apenas se habla siendo los grandes olvidados: los hombros. Intenta por todos los medios que la silla tenga reposabrazos, de esta forma podrás hacer pequeños descansos durante el juego con el que reposar y descansar.
Más allá del propio asiento
Además de la silla, que es lo más importante en lo que fijarse, hay otras cuestiones a las que prestar especial atención:
- Teclado: Lo más importante es que nos permita no hacer esfuerzo a la hora de usarlo. Para esto, como lo normal es que usemos una parte más que otra —suele pasar en los juegos tipo shooter—, hay que tener esa parte del teclado lo más centrada a nosotros posible para que las muñecas y brazos no tengan que desplazarse en demasía.
- Monitor: Al igual que con el teclado, debe estar alineado con el teclado justo enfrente de nosotros para evitar ángulos de giro en el cuello. Simplemente con esto, ya evitaremos muchas lesiones y tirones. Además, debe estar a la altura de los ojos —un truco para saber cómo hacerlo es que la parte superior de la pantalla quede a unos 10 cm por encima de la mirada horizontal—. También, la pantalla debe estar a unos 50 cm de distancia para evitar dolores de cabeza. Otro truco: Siéntate delante del ordenador y extiende un brazo totalmente: Esa distancia es perfecta. ¡Nunca menos!
- A muchos jugones nos gusta ver toda la potencia gráfica del ordenador a pleno rendimiento para que se vea lo mejor posible. Sin embargo, no hay que confundir esto con que se vea con mucho brillo. Regula el brillo de la pantalla para no forzar a los ojos; además, cada 10/15 minutos deberías alejar la vista de la pantalla y fijarla durante un par de minutos en algún punto lejano.
Estas son las medidas más sencillas pero imprescindibles —y como podéis ver, muy fáciles de tomar— que todo gamer debe tomar para cuidarse y no perder sesiones de juegos. Si a estas medidas de «higiene postural» le añades beber agua moderadamente, pero de forma continua y hacer pausas de vez en cuando, te asegurarás poder disfrutar de tus videojuegos favoritos sin mayores problemas.