¡Os hemos traído nuestra reseña de la novela ligera de Swort Art Online Progressive 1! En una suerte de reboot, SAO ha regresado bajo el título de Progressive. Hoy venimos a hablar del primer tomo (de seis) del recuento de la historia original del Arco de Aincrad. Así pues, nos centraremos en los dos primeros pisos del mundo del mundo de Kayaba Akihiko. Lejos de lo que cabría esperar, sabemos que va a pasar, pero no cómo va a pasar. No del todo.
Como hemos dicho, Progressive es un recuento que, lejos de lo que cabría esperar, incluye cambios muy importantes dentro de la línea temporal de la franquicia. El más grande de todos ellos tiene que ver con Kirito y Asuna, quienes comienzan a construir su relación en los primeros niveles. Lejos del acelerado ritmo de las primeras novelas ligeras, Reki se toma su tiempo para desarrollar todos y cada uno de los eventos que considera importantes. Así pues, deja la trama en un segundo plano —el destino está decidido— y se centra en desarrollar los eventos del mundo de cada piso así como la aportación de cada personaje.
Antes de continuar, os recordamos que ha sido licenciada por Planeta Cómic. Ha sido traducida por Daruma, incluye arte interno. Son 521 páginas de novela.
Sinopsis
Ha pasado un mes desde que Akihiko Kayaba dio el pistoletazo de salida de su juego mortal y ya son dos mil las víctimas que se ha cobrado este despiadado VRMMO.
De camino a la reunión en la que se va a discutir la incursión contra el boss del primer piso, Kirito, un espadachín solitario que lucha por y para sí mismo, se encuentra con una de las escasas jugadoras femeninas que hay en el juego. Armada con un estoque, esta, veloz como una estrella fugaz en un cielo despejado, lucha contra un poderoso monstruo.
Este volumen recoge los episodios Aria en un cielo sin estrellas, donde se cuentan los orígenes de la leyenda del espadachín negro, y Rondó de la espada efímera, la triste historia de un joven herrero que tiene como trasfondo la batalla contra el boss del segundo piso.
Sword Art Online Progressive #1
Parafraseándole, el autor nos lo cuenta en las páginas finales de la novela: quería volver a contar todo, pero con más tranquilidad. Las circunstancias de la publicación del Arco de Aincrad le «obligaron» a iniciar y terminar la saga en un único volumen. En consecuencia, se dejó muchas cosas en el tintero. Por ejemplo, no desarrolló tanto como habría querido el sistema de raideo, los combates, las tareas realizadas antes de subir de piso, cómo o qué hizo quién en cada momento, etc. Aquí sí lo hace, y vaya sí se lo toma con pausa.
Personalmente, he disfrutado mucho de esta nueva relectura, pues me ha permitido profundizar en un universo que, en realidad, siempre me ha gustado mucho. Las novelas ligeras siempre tuvieron un encanto que el anime no supo reflejar, y aquí se ve todavía más. No obstante, hay cambios importantes que pueden disgustar al lector. Por ejemplo, Kirito y Asuna se conocen y relacionan mucho antes. Esto altera ciertos eventos, pero creo que Reki ha sabido mantener —hasta cierto punto— bastante bien el hilo conductor. Hay cosas que son diferentes, indudablemente, y más cosas van a cambiar, pero es un soplo de aire fresco.
La construcción de los personajes es mucho más pausada y se entiende mejor la relación entre los dos protagonistas. Lejos de parecer tan acelerada como antes, se siente mucho más natural y orgánica. Claro está, todo esto tiene que ver con el conocimiento que tenemos de eventos posteriores; habrá que ver como evolucionan dentro de esta nueva línea temporal. Sea como fuere, y volviendo al tema que nos acontece, Kawahara hace un gran esfuerzo adicional para explicar las mecánicas del juego y elementos MMO de Aincrad.
Un MMORPG de verdad
De esta forma, emplea la primera mitad de la novela para explicar las tácticas que se emplean a la hora de afrontar, por ejemplo, el combate contra el primer boss. Se enfatizan y explican los cambios de grupo, los estados alterados, las estadísticas, etc. Es una novela mucho más técnica y pausada que, en detrimento de un ritmo más vertiginoso, se recrea en los detalles. Al mismo tiempo, analiza y da una larga explicación del sistema de evolución y actualización del equipamiento. O lo que es lo mismo, quienes quieran saber más sobre Aincrad y su funcionamiento lo van a disfrutar.
Eso para bien. Hay facetas que no me han gustado tanto. Por poneros otro ejemplo, da mucha importancia a detalles que parecen nimios e insulsos. Diría, incluso, aburridos. Aun con todo, ofrecen interpretaciones interesantes, ya que distribuir las porciones de comida puede parecer una tontería, pero refleja la extraña sensación de hambre de los personajes. Como se suele decir, una de cal y otra de arena. Lo que sí me ha sorprendido de forma muy positiva ha sido el desarrollo de los personajes. Y no hablo solo de Kirito y Asuna, sino de otros tantos que —ya sea por nombre, fama o relevancia— terminan apareciendo en la serie y de los que no sabemos realmente nada.
Nos permite ver el otro lado de los jugadores: ¿Por qué hacen esto o aquello? ¿Tiene un objetivo secundario? El desarrollo es más profundo, lo cual permite descifrar y desenmascarar la realidad de los prisioneros de Aincrad. La gran perdedora de esta ecuación es Asuna, quien pierde gran parte de su autonomía en favor de Kirito. Y es que otra cosa no, pero a Kawahara le encanta la idea del chico poderoso que hace las veces de soporte de la joven heroína de turno. Su tratamiento de las mujeres y de su papel en sus obras sigue siendo nefasto. Es, como poco, insultante.
Un recuento de lo vivido
No le descubro Sword Art Online a nadie si digo que Kirito es un Gary Stu. Citando a nuestra siempre querida Wikipedia, un Gary Stu es «un apodo dado a un personaje ficticio tan perfecto o competente que parece inverosímil, incluso en el contexto de un argumento ficticio. Frecuentemente, Mary Sue se identifica con una versión altamente idealizada del alter-ego del autor o del lector». De hecho, este ha sido —desde siempre— el mayor defecto de una obra con un universo rico e impresionante, pero con unos personajes demasiado «meh».
Conclusiones
Sword Art Online: Progressive es una opción muy recomendable para los amantes de la franquicia. A pesar de reestructurar eventos de manera que puedan chocar con el lore original, merece la pena. El desarrollo de Aincrad es total y, ahora sí, podremos entender cómo funciona todo. Por desgracia, el complejo de Gary Stu sigue siendo muy fuerte en Kawahara, quien vuelve a supeditar la figura de Asuna a la del héroe negro.
Si la serie te ha llamado la atención en algún momento de tu vida, es una muy buena forma de iniciarte. Si por el lado contrario, ya eras fan de antes, me parece un imprescindible si quieres seguir profundizando y (re)descubriendo en ella.