Fandogamia es una de esas editoriales que no sabes bien de qué pie cojea. Cuando crees que le has pillado el punto, van y te sorprenden con algo totalmente diferente. De la reflexión de Kabi Nagata van a la ternura de La Brujita oficinista o la acción de Critical Role. Ahora, con Demon Quest y su reseña, me he encontrado con un tebeo de origen español que mezcla la parodia propia del humor contemporáneo con los gajes y oficios del rol más ochentero.
Vamos, que Enkaru, su autora, me ha destrozado —en el buen sentido— todos los esquemas con una historieta autoconclusiva muy entretenida que reformula los tópicos clásicos de los RPG de los noventa mediante un lavado de cara muy, muy curioso. Reviviendo algunos grandes mitos de la época Master System, reinventa las aventuras mediante una partida a la consola en la que un padre y su hija comparten un momento de intimidad entre comentarios de nostalgia y «eres demasiado viejo».
Y funciona. Funciona muy bien, porque Demon Quest es, ante todo, una lectura entretenida. Satisfará especialmente a quienes, al igual que yo, se dejen llevar por la morriña, pero creo fervientemente que también gustará a los más jóvenes. A fin de cuentas, sabe combinar muy bien el humor con la aventura, aunque es en este primer apartado donde saca casi toda su artillería.
Bien acompañado de un dibujo con mucha personalidad, recuerda a Zelda y Final Fantasy, a Dungeons and Dragons y a Dragon Quest. O eso he creído ver yo, puesto que son tantas las referencias que integra que hasta resulta complicado encontrarlas todas. ¿Lo mejor? Que casan muy bien con la historia. No es un batiburrillo de ideas, sino una orquesta de risas bajo el pertrecho de la parodia.
Reseña de Demon Quest | Portada, sinopsis y edición
El malvado Mago Velius ha secuestrado a la Princesa Shalendra, sumiendo al reino de Mystaria en la oscuridad. Cuatro valientes héroes una bárbara, una elfa sacerdotisa, un ladrón humano y un misterioso ma – se unen para rescatarla y cambiar el destino predeterminado.
Con esta premisa nos adentramos en el fascinante mundo de “Demon Quest”, un videojuego de principios de los años 90 que conquistó el corazón de Andrés cuando era niño y que ahora, con más de 40 tacos, anhela revivir junto a su hija Susana. Sin embargo, al volver a sumergirse en el juego, Andrés descubre con asombro que “Demon Quest” no es exactamente como lo recuerda: ¡los escenarios y personajes parecen haber cambiado misteriosamente!
| Título | Demon Quest |
| Autoría | Enkaru |
| Género | Aventura, videojuegos retro |
| Tamaño y páginas | Rústica con solapas con 128 páginas a color |
| Edición y revisión | Pedro F. Medina |
| Realización técnica | Rubén Solas |
| Fecha de lanzamiento | 09/10/2023 |
| Precio | 12 € |
En general, considero que la edición de este Demon Quest es de mucha calidad. Fandogamia, una vez más, ha sido capaz de producir un producto de mucho nivel a un precio realmente asequible. Sobre todo si tenemos en cuenta que tanto la impresión como la maquetación son muy notables. Sucede lo mismo con los materiales empleados. Sin más, que cueste solo 12 euros siendo un tebeo a todo color con esta calidad… De diez. Poco más qué decir a este respecto.
Fantasía y nostalgia contemporáneas
Lo mejor de todo esto es que este conjunto de bondades previamente citadas están perfectamente acompañadas de un dibujo que destila personalidad. Lo bueno es que, aunque no seas muy dado a la fantasía, puedes conectar con su arte, pues utiliza una paleta de colores realmente agradable. Entra por los ojos muy fácilmente, siendo esta una de sus principales virtudes. Por supuesto, no es la única, pero es una de las más llamativas. Demon Quest entra mucho por los ojos, aunque luego te conquista por otros motivos.
Para empezar, por su presentación. La portada y la premisa mediante la cual se construye la historia es realmente atractiva. No por nada, es una idea con la que resulta muy fácil empatizar: un padre y su hija encuentran una consola antigua, por lo que deciden matar el rato mientras él evita la eterna pregunta de «por qué no estás buscando trabajo». Dejando caer lo que podría ser un reminiscente de crítica social (no tengo ni idea de si será así, mas eso he creído ver yo) crea una introducción bastante fácil de sobrellevar.
O lo que es lo mismo, nos crea una excusa perfecta para empezar a leer, seamos más o menos avezados en las historias fantasía épica. Lo bueno es que continúa de esta manera en todo momento, por lo que podemos decir que es una lectura muy fácil de seguir. Sin duda, esta es otra gran virtud, puesto que facilita todavía más que conectemos tanto con su historia como con sus personajes.
Reinventando los clásicos
Si tuviese que ponerle una pega es que, como es un relato autoconclusivo y no es tan largo, te quedas con ganas de más. Hay secciones en las que sientes que se podría profundizar un poquito más en la historia o sus personajes. No obstante, es igual de cierto que, como es un cameo a los videojuegos clásicos, en realidad se ajusta muy bien a la idiosincrasia de estos. Pese a ello, desde una perspectiva egoísta, me habría gustado algo un poquito más denso.
Sea como fuere, este detalle no enturbia nuestras impresiones generales de la historia, puesto que funciona realmente bien en diferentes niveles. Bien cargada de carisma, induce a leer sin parar, siendo uno de esos tebeos que acabas devorando de una sola sentada. Así de bueno es. O será cosa mía, que me ha gustado mucho. En cualquier caso, creo que el constructo general es bueno.
Aparte, a medida que vas leyendo, te genera curiosidad. Te apetece descubrir con que nueva broma o easter egg te va a sorprender cuando pases de página. Lo «malo» es que esto le resta algo de epicidad, aunque queda muy claro desde el principio que este no es su objetivo. O al menos así lo he inferido yo. Me puedo equivocar, mas esa es mi impresión general. ¿Y le sienta bien? Pues la verdad es que mucho.
Reseña de Demon Quest | Conclusiones
A modo de conclusión, puedo decir que la fusión de Enkaru y Fandogamia es un combo breaker en toda regla que gustará muchísimo a casi cualquier tipo de lector. Lo bueno es que no es una apuesta arriesgada, puesto que la relación calidad-precio es realmente interesante. No es un tebeo especialmente caro, mucho menos si tenemos en cuenta lo entretenido que es y/o el hecho de que ha sido editado completamente a color.
Si me preguntáis a mí, os lo recomiendo encarecidamente. Y aunque está claro que en este tipo de reseñas resulta imposible ser objetivo, creo no equivocarme al afirmar que es una lectura realmente interesante que destaca tanto por el nivel de su narrativa como del dibujo. Es una obra muy dinámica y con mucho carisma que encaja muy bien en casi cualquier estantería.
- Es una lectura muy fácil de digerir, pero no por ello debemos subestimarla.
- La narrativa es realmente buena. Le sienta muy bien la acción directa que ofrece.
- El dibujo es agradable y llamativo. El arte es atractivo.
- La edición es de gran calidad.
- Los personajes tienen mucho carisma.
- Podría profundizar un poco más en su universo y desarrollar algo más a sus personajes si fuese más largo.
