
¡Hola, muy buenas amantes de los videojuegos! Regresamos con un nuevo análisis, aunque en esta ocasión os hablaremos de un título que, a día de hoy, se encuentra en early access. Por consiguiente, podríamos afirmar sin miedo a equivocarnos que, más que una review al uso, serían unas primeras impresiones cimentadas en el contenido disponible en estos momento. Volviendo al tema que nos acontece, hoy os hablaremos de Deck of Ashes, un videojuego de aventuras, rol y estrategia de cartas que bebe, directamente, de la fuente de la inspiración de Slay the Spire, el gran precursor del género. El desarrollo corre a cargo del estudio independiente AY Games y ha sido publicado por Buka Entertainment y WhisterGames.
Deck of Ashes
Deck of Ashes es un juego de aventuras con combate táctico de cartas y un estilo artístico que tiende al oscurantismo. Formaremos parte de un grupo de renegados, ya que seremos parias de una sociedad incapaz de aceptar los pormenores de la magia. Nos perseguirán con no otro objetivo que el de darnos muerte, pero nosotros somos más inteligentes… O eso creemos. Así pues, nos sumergiremos en un mundo asolado por la destrucción en donde el caos es el pan de cada día; monstruos, aldeanos furiosos, criaturas procedentes del mismo infierno y todo tipo de males nos acecharán desde las sombras. Y todo porque, un día, sin más, un talismán prohibido cayó presa de la destrucción liberando la llamada Maldición de las Cenizas.
La premisa, aunque sencilla, funciona a la perfección. A falta de adentrarnos más profundamente en su historia, Deck of Ashes apuesta por un argumento maduro y peligroso en donde haremos las veces de antihéroe; no existe el bien o el mal, solo el deseo de sobrevivir. Y la venganza, claro está. La venganza será nuestro motor, aunque también la redención. Viviremos una historia de ambivalencias morales en donde el blanco y el negro no existen, solo un gris taciturno carcomido por manchas de rojo sangre.
Aunque el juego promete continuar con el guion, a día de hoy resulta complicado expresar si la historia es buena o no, pues carecemos del contexto necesario. De esta forma, podemos concluir que tiene potencial y es interesante, mas habrá que ver cómo evoluciona. Sobre todo porque —en esta versión de early access que hemos testado— solo podemos controlar a una hechicera de fuego que, con su magia, busca deshacer lo que ella misma ha causado. Busca la redención, pero en esta no hay perdón para el prójimo. Hay otros personajes con sus propias historias, pero esta me ha parecido la más interesante de todas.
Pasto de las llamas

Dicho esto, ¿qué podemos comentar al respecto de su jugabilidad? Deck of Ashes es un juego de construcción de mazos y estrategia. A diferencia de otros títulos del género, nos encontraremos con un mapa abierto en donde podremos ir y volver a cualquier localización de la manera que deseemos. Lo curioso es que tenemos un tiempo límite, pues en cada mapa hay una suerte de jefe final que buscará acabar con nuestra vida. De esta forma, nuestro objetivo será conseguir el mazo más fuerte posible para enfrentarnos a nuestro enemigo.
Para ello, tendremos que ir visitando los distintos puntos de interés del mapa partiendo desde nuestro campamento base. Este último será nuestro fuerte, ya que será donde mejoremos nuestras cartas, desbloqueemos nuevas recetas o compremos objetos de salud. Habrá que ser inteligentes en nuestros movimientos, pues lo ideal es maximizar la obtención de recursos ya sea en forma de llaves para cofres, nuevas cartas o material de crafteo. La idea es, como poco, atrevida, pero muy original dentro de lo que cabe. Es una variante atractiva y con bastante potencial si son capaces de pulir su jugabilidad.
Por su parte, los combates son bastante simples: tendremos un mazo de carta en donde cada naipe tendrá cierto efecto, desde dañar al enemigo hasta provocar un estado alterado pasando por curar nuestra salud o renovar la mano. El número de cartas máximo para usar por turno estará limitado por el maná, el cual puede variar según la situación. La idea es buscar la mejor combinación posible. Lo curioso es que las cartas que usamos no se pierden, sino que van a una especie de cementerio al cual podemos recurrir sacrificando vida, por ejemplo. Por ende, no existen pila de descartes como tal.
Pasto de las cenizas

Es una idea sugerente, ya que recurre al lore para justificar esta decisión: las cartas no se destruyen, sino que se convierten en ceniza. No hay mucho más que decir sobre el combate salvo las posibles recompensan, que van desde materiales hasta oro. También puntos de descanso con los cuales no solo podremos recuperar vida, sino recuperar cartas de las cenizas. En caso contrario, en el próximo combate no dispondremos de estas cartas hasta que sacrifiquemos vida. Interesante y original.
Los principales problemas de Deck of Ashes a día de hoy son, debido a su estado de early access, los errores de programación y la falta de contenido. Respecto a los primeros, hemos querido destacar la traducción. Siendo sinceros, se agradece que esté en español, pero peca de falta de acentos, trozos de texto sin traducir y erratas varias. Por otro lado, no hay casi animaciones de combate; luchar puede ser algo tedioso tras varias de juego ante la falta de una variedad de secuencias más amplia. Se podría decir que el gameplay se vuelve algo tosco ante la falta de impacto visual.
Por último, solo tendremos tres personajes y cierta variedad de cartas, las cuales se sienten muy repetitivas llegados a cierto punto. Hay más errores, como bajadas de frames o imágenes que se atascan. No obstante, romperé una lanza a favor de Deck of Ashes, ya que todo esto es bastante normal si tenemos en cuenta, una vez más, que estamos ante un acceso anticipado. Desde el estudio están tomando muchos apuntes por parte de los analistas y jugadores que han probado su juego y están trabajando en solventar todos estos al tiempo en que siguen engendrando nuevo contenido.
Conclusiones

Teniendo en cuenta su precio, unos trece euritos, creo que Deck of Ashes merece la pena por su potencial latente. Tal vez no sea la mejor opción de juego a día de hoy, pero se las promete todas consigo. Para bien, su propuesta de juego y su peculiar sentido de la estética. En contra, la falta de contenido y la total ausencia de animaciones de combate o movimiento. Como jugador, me ha gustado mucho la propuesta. Empero, desde mi labor de analista os recomendaría que esperaseis un poquito más a que el título esté más entero, aunque también debo decir que su precio actual lo convierte en una oferta más que jugosa tomando como referencia su potencial futuro.
- Corrección: Guillermo Ruiz
Primeras impresiones Deck of Ashes. Clave para PC cedida por AY Games a través de terminals.io.