¡Muy buenas! La programación del 31 Fancine, como ya os contamos el mes pasado en una noticia, contó con una película muy esperada para cualquier fan del anime. Hablamos de BELLE, la nueva película del director Mamoru Hosoda, que compite en la sección oficial del citado festival. ¡Y además es la primera animada en hacerlo! Ya que hemos tenido la oportunidad de verla, os dejamos con esta humilde reseña —¡sin spoilers!— de la película anime BELLE.
Sinopsis
Suzu es una joven de 17 años que, tras perder a su madre, se traslada a vivir con su padre a las afueras de la prefectura de Kōchi. Con el corazón roto y distanciada del mundo, descubre «U», un espacio virtual en el que asume el rol de «Belle».
El escapismo de las redes sociales
Hosoda, como ya hizo en Summer Wars, centra gran parte de su argumento en el mundo virtual. En un futuro cercano existe una aplicación que te permite acceder a un espacio conocido como U. En él las personas adoptan un rol que —y esto es muy interesante— analiza los rasgos del usuario y potencia sus habilidades. Así, la protagonista de BELLE, Suzu, entra en U y se convierte en una BELLA —lo siento, tenía que decirlo— cantante. Esto último es muy importante para su desarrollo como personaje, ya que arrastra un trauma infantil que le impide, casi literalmente, alzar la voz.
Volviendo al tema redes sociales, Hosoda hace un trabajo más que notable en el mensaje que trata transmitir. El director nos plantea un mundo virtual un poco caótico y egoísta, pero también como una plataforma para conectar con los demás y superar nuestros miedos. Lejos del típico mensaje alarmista sobre Internet y la tecnología, BELLE centra el problema en los seres humanos. El mal no es la plataforma, sino quienes forman parte de ella. Este concepto aparece perfectamente representado —quizás de forma un tanto evidente— en la figura del villano: una suerte de superhéroe defensor de la justicia, pero que está completamente cegado por su egocentrismo.
La conexión de los personajes
Una buena propuesta de historia como BELLE no podría llegar a buen puerto si no viniese acompañada de personajes a la altura, y en este caso el apartado cumple. Quizás no sea un reparto especialmente complejo ni profundo, pero tienen personalidades bien marcadas, un desarrollo coherente y unas interacciones creíbles y cercanas. Suzu, para empezar, tiene varias facetas que va mostrando tanto en su versión «real» como en la «digital». Es insegura, pero también valiente cuando tiene que ayudar a los demás. También es sincera, pero le cuesta muchísimo abrir sus sentimientos al resto. Son estas dualidades las que la convierten en una protagonista bastante humanizada y cuya progresión funciona y da más fuerza al peso dramático de la historia.
Con respecto al resto de personajes, hay altos y bajos. La mejor amiga de Suzu es un alivio cómico divertido, al igual que el piragüista —quizás el más tronchante de todos—. El interés romántico de Suzu… sin más. Cumple su función, pero resulta algo cliché. «Bestia» es un caso aparte. Su identidad resulta una incógnita interesante, y que una vez revelada tiene sentido, pero da la sensación de que podría haber dado un poco más de sí. Para no destripar nada, mejor lo dejamos aquí. Por último, cabe realizar una mención especial a las mujeres del coro de Suzu: un grupo de señoras, con todas las letras, con intervenciones que aportan frescura y gracia al conjunto.
Homenaje a Disney
Como muchas personas habrán visto o deducido, BELLE es una reinterpretación tremendamente personal del clásico La bella y la bestia; concretamente, a la versión de 1991 de Disney. La cinta cuenta con numerosos guiños, no solo en los nombres de los personajes, sino también en el propio imaginario de la película: un castillo, un bestia recluida, un baile entre Bella y Bestia… Se trata en un homenaje con total libertad y sello propio que resonará en los seguidores del clásico, pero también en todo aquel con sensibilidad para ver escenarios preciosos y personajes que intentan ayudarse y comprenderse.
Asimismo, el homenaje no acaba aquí, sino que lo podemos encontrar en el diseño de Belle. Este fue obra de Jin Kim, diseñador que ha colaborado en muchos proyectos recientes de Disney como Enredados, Frozen o Big Hero 6. La similitud de Belle con personajes como Elsa, Rapunzel u otras princesas Disney actuales es indudable; por no hablar de que Belle es conocida en la red por su voz… uno de los buques insignia de estos personajes. Podríamos decir que Hosoda ha adaptado este arquetipo de heroína a su manera, manteniendo la esencia —belleza, fuerza, valentía— en un entorno diferente y que, seguramente, no podríamos haber visto en una producción de Disney.
El poder sanador de la música
Anteriormente hemos mencionado que la música juega un papel importante en la trama de BELLE. La protagonista tiene problemas para cantar a raíz de un evento de su pasado, y es a través de su versión digital que, poco a poco, consigue superar su miedo. En la película hacen gala escenas preciosas y encantadoras apoyadas fundamentalmente en el uso de la música y las canciones. En este sentido, es un triunfo total.
La banda sonora es, sin duda, uno de los puntos fuertes del largometraje. Esta cuenta con la colaboración de varios artistas que componen una notable obra musical. Entre ellos, destacan Taisei Iwasaki —el íntimo tema Memories of a Sound es una delicia—, Ludvig Forssell (Death Stranding) y Yuta Bandoh. En la composición de las canciones con letra encontramos a la voz de Suzu/Belle, Kaho Nakamura, y al propio Mamoru Hosoda. De hecho, su implicación explica por qué la interpretación de la voz de Kaho y la dirección de las escenas son tan impactantes. Por poner un ejemplo, el momento de A Million Miles Away es una experiencia exquisita que seguramente quede en las retinas de todo aquel que disfrute de dicho espectáculo. Por muy típico que suene, el arte hecho desde el corazón cala en las personas, y BELLE es un buen ejemplo de ello.
En conclusión
BELLE es un ejercicio de belleza sonora y visual que confirma el talento y sensibilidad de su director, Mamoru Hosoda. Hosoda retoma un tema bastante presente en su filmografía (la familia, las relaciones sociales, Internet), pero con un toque diferente, fresco y personal. Tras un mensaje conciliador y lleno de esperanza, BELLE explora la dualidad del ser humano y la gestión de las emociones en una sociedad donde, digamos, la socialización es complicada.
En conclusión, a nueva película de Mamoru Hosoda es un triunfo a muchos niveles. Una obra irregular y lejos de ser perfecta, pero hecho con mucha pasión y corazón.
BELLE se estrenará en cines españoles el 4 de febrero de 2022 gracias a A Contracorriente Films.
