El E3 de 2015 de Sony fue uno para recordar. Pese a que hubo humo, y mucho de lo anunciado ha tardado y a algún título todavía no ha salido, la empresa nipona consiguió emocionar a todos los jugadores con diversos anuncios. Uno que sobresalió fuertemente por su repercusión y el estar en boca de todos no fue otro que Shenmue 3. Yu Suzuki se ponía manos a la obra más de una década después, con un kickstarter que pedía dos millones y acabó superando los seis. Shenmue 3, tras algunos retrasos y cierta polémica entre los jugadores, ha llegado, y aquí estamos para ver el resultado.
La legendaria historia continúa
Justo después de Shenmue 2. El título se sitúa justo donde se dejaron en Dreamcast. Ryo ya ha tenido al fin a su encuentro con Shenhua y llega a su pueblo, donde una serie de hechos hará que vuelva a viajar en busca de Lan Di, el asesino de su padre.
Lamentablemente, aquí ya encontramos alguna pega. La trama avanza bastante menos que en los dos títulos anteriores, y no sabemos si tendremos la oportunidad de ver una cuarta entrega. Sin embargo, esto se complementa con una historia muy Shenmue. La esencia se mantiene por completo, desde los diálogos artificiales pero entrañables a sus fases de investigación y preguntar a todo el mundo para recopilar información. Las mecánicas siguen ahí, y el título sabe utilizarlas igual que a principios de siglo.
Esto no gustará a nuevos jugadores que quieran adentrarse en la saga, y es que aunque tenga un vídeo-resumen de la historia en la pantalla de título, Shenmue 3 es un videojuego totalmente hecho para gente que jugó a los originales que quiere seguir su historia de una manera bastante conservadora. Tanto, que se extrapola a todo lo demás que compone el videojuego.
La jugabilidad, intacta
Y es que las mecánicas, como comentaba antes, siguen siendo prácticamente las mismas. El kung-fu, la utilización de objetos, las conversaciones, los minijuegos… todo está ahí, y todo se juega como en los 2000. Se siente antiguo, tosco, incluso poco estético. Los menús se controlan algo mal, la información no está del todo bien estructurada incluso. Pero es Shenmue y, pese a sus fallos y sus carencias, mantiene lo mínimo que un jugador de la saga puede pedir.
Lástima que no hayan aspirado a más y el título se vea reducido tanto en localizaciones como en trama. Por otro lado, el kung-fu se ha visto bastante mejorado, con más movimientos y personalización, pero no deja de ser escaso contenido comparándolo con otros juegos de semejantes características. Los minijuegos también han perdido algo de gracia, siendo alguno demasiado anticuados, otros tediosos. Además, los gashapon ya no tienen las licencias de Sega, por lo que no brillan como antes.
Bonito, pero con altibajos
Algo que no podemos negar es que gráficamente Shenmue 3 no está nada mal. En los primeros tráileres se notaba bastante el poco pulido tanto en animación como en estética, pero gracias al kickstarter y los años de desarrollo, se nota la mejoría en este aspecto. El videojuego se ve sólido pese a tener alguna animación, sobre todo facial, que podría estar mejor resuelta. Algún combate luce resultón y en general es agradable a la vista.
Lo que no son agradable a la vista son los menús. Nada más iniciar el videojuego vemos en la pantalla de título un diseño gráfico lamentable para un título de estas características, con una fuente muy poco profesional. Lo mismo in game, que como ya comentábamos tiene menús mal estructurados, pero es que además no tienen buen diseño gráfico. Es algo que esperamos que en futuras actualizaciones del juego mejoren.
La música no ha perdido nada. Las composiciones siguen siendo igual de buenas, y la cultura asiática se ve reflejada por toda el instrumental. Es digna del épico viaje de Ryo y no hay nada que achacarle.
Conclusiones
Inevitablemente, Shenmue 3 es un videojuego que no es para todo el mundo, y para nuevos interesados es muy poco accesible. Es por y para fans de la saga. Es al fin continuar una historia que su comunidad pedía a gritos que continuara. ¿Ha sido lo esperado? En muchos apartados, no. Es un título que no rebosa la calidad que debería, y que no ha estado a la altura de las expectativas. Pero no es algo que pase todos los días, y pese a sus fallos, si eres fan de la saga merece la pena, no lo dejes escapar. Ryo sigue su camino, y esperemos que podamos verlo en un futuro no muy lejano.
Análisis Shenmue 3. Edición física para PS4 cedida por Koch Media.
