Allá por 2017 Realmforge Studios nos quiso sorprender con la tercera entrega de la serie Dungeons. O lo que es lo mismo, Dungeons 3, un videojuego de construcción de mazmorras y acción en tiempo real. La cosa iba de crear nuestro propio calabozo y defender nuestros dominios del asedio de los héroes que ansiaban gloria y reconocimiento. Su paso por PC, PlayStation 4 y Xbox One trajo muy buenos recuerdos para los más nostálgicos, pues —sin alcanzar las cifras de los colosos del mercado— logró cosechar buenos resultados.
Tal fue así que, con el paso de los meses y los años, el estudio no cejó en su empeño y siguió creando contenido en forma de material adicional. Y así fue como, junto a las actualizaciones de contenido gratuito, engendró hasta siete expansiones: Once Upon a Time, Evil of the Caribbean, Lord of the Kings, Clash of Gods, An Unexpected DLC, Famous Last Words y A Multitude of Maps. A cada cual mejor que la anterior, terminó por construir un pequeño imperio de nicho en donde sus jugadores pudieron disfrutar durante mucho tiempo.
Y ahora diréis: ¿A qué viene todo esto? ¿Por qué rescatar un lanzamiento con tres años de antigüedad? Sencillo: porque ha regresado, pero no en forma de chapa, sino de edición completa. En efecto, Dungeons 3 Complete Collection ya está disponible para PlayStation 4, Xbox One y PC. En esta, los jugadores podrán disfrutar de todo el contenido gratuito y sus siete expansiones. También se ha incluido el modo cooperativo, el cual permite que hasta dos jugadores formen equipo para enfrentarse a diferentes desafíos.
Pero, ¿qué es Dungeons 3?
Te hago un resumen, no te preocupes. Dungeons 3 es una rareza. Una reminiscencia de un tiempo pasado en donde existieron géneros que ni te imaginas. La cosa, en cierto modo, es simple: eres un señor de la oscuridad que desea ampliar sus dominios. Tus tierras son bastas y extensas, pero quieres más, así que decides lavarle el cerebro a un nuevo heraldo. Te expandes y llegas a un nuevo continente y para hacerte fuerte necesitas una base. Un núcleo. Y es ahí donde nace tu primera mazmorra. O lo que es lo mismo, el típico calabozo de cualquier juego de rol en donde te enfrentas a monstruos y consigues tesoros.
Sin embargo, aquí la cosa cambia, ya que tu objetivo es defender el dungeon, no destruirlo. Así pues, diseñarás trampas, crearás caminos sin salida y contratarás monstruos para evitar que la justicia de los héroes acabe con tus pretensiones expansionistas. Al igual que en cualquier RTS, la idea pasaba por controlar a tus unidades y manejarlas a través de un tablero dispuesto en casillas para así evitar caer derrotado. Funcionó bastante bien, la verdad, aunque hubo quien no encontró en su desenfadado sentido gráfico un acierto. Se podría decir que era bastante limitado, y la verdad es que no era del todo mentida.
Sea como fuere, su estética era parte del encanto de un título que jugaba con el meta-humor y la cuarta pared; las referencias a grandes obras de la ciencia ficción, los chistes malos y otras argucias de cómico acabado eran uno de sus mejores rasgos. La cosa es que somos una suerte de Dios que controla a Thalya, la elfa a la que manejas para expandir tus tierras. Antaño era buena, pero se ha pasado al lado oscuro. ¿Y sabéis que es lo que más mola? Que nos responderá a nosotros, los jugadores, al ser quien la controla desde la distancia.
Dungeons 3 Complete Collection
Como habréis podido comprobar, no hemos querido detenernos demasiado en su jugabilidad, su banda sonora o su narrativa. Es más, no era nuestro objetivo desgranar todas y cada una de sus características. La idea era ofreceros nuestras impresiones sobre Complete Collection, y eso es lo que vamos a hacer. Seamos claros: nos ha encantado. Las ediciones que recogen todo el material emitido hasta la fecha siempre nos han parecido un acierto, ya que permiten un acercamiento mucho más completo a sagas o franquicias más desconocidas. En este caso en concreto, la cantidad de contenido que nos han ofrecido es digna de muchos elogios, pues está cargada de cositas. Que sirva como conclusión.
Y que también conste en acta que siempre es interesante darle la vuelta a la situación y encarnar al villano de turno. Si bien es cierto que adolece de la falta de un mayor presupuesto y luce como un juego más antiguo, su desenfadado y alocado sentido del humor suplen con creces las que dicen ser sus carencias. Al mismo tiempo, su excelente trabajo de doblaje y su buena traducción de textos al castellano permiten que no se pierda ni un ápice de gracia. Nos ha faltado comentar su banda sonora, la cual encaja a la perfección en todo momento. Siendo breves, muy recomendable; la edición completa merece mucho la pena. De igual forma, os dejamos un pequeño tráiler del gameplay para que os hagáis una mejor idea de lo que os espera.
