Tiempo ha, en 2018, Nintendo tuvo a bien de engendrar una nueva saga basada en una de sus franquicias más icónicas. No les fue nada mal, pues apenas un año después lanzaron un filme basado en ese mismo universo. Aunque con diferencias sustanciales, el protagonista era el mismo, aunque el matiz era mucho más adulto. Ahora, casi cuatro años después, hemos podido regresar. Precisamente es de eso de lo que os quiero hablar —entre otras cosas— en mi análisis de Depective Pikachu: Returns.
En ese sentido, lo primero que quiero deciros es que, de una forma u otra, ha sido un pequeño soplo de aire fresco. Aunque disfruté mucho durante mi experiencia con el primer DLC de Pokémon Escarlata y Púrpura, nunca está de más visitar el fantástico universo de Pokémon de formas diferentes. No obstante, es importante que tengáis en cuenta una cosa: Detective Pikachu no está pensado para el público adulto.
Aunque lo he disfrutado como el que más y he sido capaz de volver a sentirme como un niño, es fácil inferir que hablamos de un título esencialmente diseñado para los más peques de la casa. ¿Y cómo puedo saberlo? Lo cierto es que no puedo confirmarlo, mas es la impresión que me ha dado después de disfrutar de sus más de 10 horas de contenido. Y sí, aunque no soy precisamente un muchacho, me he divertido bastante con el juego.
Pese a ello, su reducida curva de dificultad, junto con un gameplay netamente guiado por su propia narrativa, me dicen que Nintendo ha querido pensar —una vez más— en los más peques. Es algo lógico si tenemos en cuenta que, en realidad, siempre ha sido así. Una cosa no quita la otra, puesto que son lanzamientos disfrutables por usuarios de todas las edades, pero es así.
Análisis de Detective Pikachu: Returns
Dicho esto, no debéis inferir mis palabras como una crítica negativa. Es más bien todo lo contrario. Me parece genial que sea de esta manera y que, al mismo tiempo, yo pueda coger cualquiera de sus juegos y pasármelo tan bien como cualquier otra persona. Es una virtud que no se le puede negar y que muy pocas compañías pueden emular. Pese a ello, debemos asumir que estas condiciones establecen características muy concretas.
Es decir, la dificultad y la guía. Siendo parco, Detective Pikachu: Returns es un juego bastante sencillo en donde la mayoría de misterios e investigaciones no nos exigirán demasiado. Está diseñado para que podamos explorar su universo y explorar sus cuestiones sin ningún tipo de problema. Es sencillo tanto para lo bueno como para lo malo. Sucede lo mismo con el sistema de guiado. En general, si sentimos que estamos muy perdidos (o no), tanto la propia narrativa como Pikachu nos echarán una mano. Siempre.
Y es que, en efecto, aquí no controlaremos a la que dice ser una de las mascotas más icónicas de la historia del anime y los videojuegos, sino a un humano llamado Tim Goodman. Es más, su propio nombre ya nos dice cómo va a ir la cosa. ¿Por qué? Pues porque su apellido es, literalmente, «buen hombre». Transmite feels muy positivos, siendo esta una dinámica que veremos a lo largo de toda la aventura. Sin más, Detective Pikachu: Returns es un juego muy optimista en donde se realzan las virtudes de la comunión social entre Pokémons y humanos.
Una novela visual de investigación en el mundo de Pokémon
Por supuesto, esto no siempre es así, porque muchos de los casos que tendremos que investigar nacen de la mentira de algún humano. Es decir, nuestra misión será resolver los engaños que han producido que un Pokémon inocente se enfrente a un cargo que no le corresponde. Para hacerlo tendremos que sumergirnos en una historia con caracteres de novela visual en donde la lectura será un punto muy importante.
Gran parte de la jugabilidad pasa por leer, aunque no será lo único que podamos hacer. Además de explorar ciertos escenarios en busca de pistas, podremos interactuar con diversos elementos del entorno y personas para obtener indicios de verdad. O lo que es lo mismo, tendremos que encontrar nosotros mismos los elementos que nos permitan alcanzar la conclusión acertada de cada caso. En el proceso, siendo esta una de sus mayores virtudes, podremos contar con Pikachu.
Nuestro amigo detective, que tiene una actitud y una personalidad un tanto abrasiva (sin pasarse en ningún momento), es un adicto a los cafés y al misterio. Además, puede comunicarse con nosotros y con los Pokémon. Es decir, será el nexo de unión entre ambos mundos al poder dialogar con estas criaturas mientras ejerce de traductor y compañero. Y es que, además de todo esto, en determinados momentos podremos realizar movimientos y tareas especiales con el apoyo de otros Pokémon como Growlithe o Darmanitan.
El regreso del detective más singular
El primero, por ejemplo, puede hacer acopio de sus habilidades como rastreador para encontrar pruebas, mientras que el segundo puede golpear y apartar objetos del camino. Son dos de los cinco personajes que nos ayudarán nuestra aventura y, ciertamente, le dan un punto extra a las investigaciones. Por desgracia, el estudio no lo termina de desarrollar tanto como podría. En general, Detective Pikachu: Returns es un buen juego que podría haber aspirado a mucho más.
Tiene un potencial tremendo y, si os soy sincero, tengo las expectativas muy altas para con su siguiente entrega. Tiene ideas interesantes y coge retazos de un juego dándole el toque único de la saga. En general, tanto esto como el apartado gráfico (aunque las animaciones son muy bonitas, sobre todo las de Pikachu) podían ser todavía mejores. Pese a ello, debo decir que estoy bastante contento con el resultado y que, en general, he disfrutado bastante de la experiencia.
Sobre todo porque la comunión entre Pokémon y humanos está muy conseguida. Detective Pikachu: Returns es una forma única de comprender cómo funciona la convivencia de ambos, lo cual nunca está de más. Aparte, cuenta con un doblaje excepcional, una traducción de muy alta calidad y un protagonista cargado de carisma. Este Pikachu es, sin duda, un auténtico acierto. Él solo es capaz de llenar la pantalla y tiene un gran impacto. Es muy divertido y de verdad que da gusto hablar con él.
- Pikachu es un personaje cargado de carisma.
- La comunión y representación de la sociedad humana-Pokémon.
- La idea detrás del juego como novela visual de misterio e investigación.
- Su carácter alegre y agradable y los diversos Pokémon que aparecen.
- El trabajo de doblaje y localización.
- Puede resultar demasiado fácil, aunque, más que un fallo, es una decisión de diseño.
- Por enfoque, decide simplificar ciertas mecánicas y detalles técnicos.