Análisis de: Dishonored 2

Continúa la historia de nuestro protagonista Corvo, o por el contrario podremos elegir empezar la aventura de la joven emperatriz e hija del mismo, Emily.

A diferencia de la primera entrega, este segundo título no tiene tan buena historia, pero no obstante no nos dejará indiferentes. Se sitúa 15 años después del primer juego, con lo cual podremos ver un imperio reconstruido y recuperado de la plaga de la peste, con Emily en el trono y Corvo como su fiel protector y consejero.

Veremos cómo se nos vuelve a ser arrebatado el poder delante de nosotros, a manos de la bruja Delilah, la cual reclama el trono como legítima heredera y, que a medida que avanzamos en la historia, se nos irán revelando secretos acerca de ella, su pasado y su circulo de aliados, quienes son personas muy influyentes y poderosas los cuales tendremos que ir eliminando uno a uno si queremos recuperar lo que nos pertenece por derecho.

En esta historia, nos trasladamos a la isla de Karnaca, donde podremos ver como la pobreza y la explotación de los obreros es un problema que nadie quiere solucionar.

La historia no cambia (excepto en algunos diálogos) dependiendo del personaje que elijas. A mi en lo personal me decepcionó un poco, pero como ya mencioné, la saga no se caracteriza por su historia si no por su gran jugabilidad.

Pasamos al punto fuerte de esta saga y en concreto de este juego.

Como anteriormente en la 1ª entrega, también es en primera persona y dispondremos de varias modalidades de juego, podremos jugar de manera tanto letal y acabar con todos los enemigos, como no letal y tener piedad para dejar que la justicia se encargue. No solo eso, si no que también dispondremos de versátiles herramientas y poderes que nos ayudarán a completar nuestras misiones.

Debido a que tenemos dos personajes distintos, tenemos poderes distintos con cada uno, los cuales podremos mejorar uno a uno obteniendo las runas de hueso de ballena por todo el mapa.

A parte de los poderes que podemos realizar con el gasto de maná correspondiente, en este nuevo juego, se añade además la posibilidad de aprender habilidades pasivas que nos facilitarán el sigilo o las habilidades en combate.

Los poderes de cada personaje están mas enfocados a un modo de juego distinto, pero siempre podremos jugar de las maneras antes mencionadas (letal o no letal) .

El combate de esta entrega es igual a la anterior, donde tienes tu espada como arma principal y luego todo tipo de herramientas que te ayudarán a plantar cara tanto a los soldados como a los guardias mecánicos. Podrás bloquear golpes con tu espada, o incluso devolver balas (si tienes los poderes necesarios).

Mientras estás combatiendo, tienes las opciones de dejar inconscientes a tus enemigos o hacerles ejecuciones brutales.

Cabe destacar que disponemos de la opción «New game +» o, nuevo juego + en español, el cual nos permite jugar con todos los poderes de ambos personajes en uno solo (tú decides cual)

El estilo gráfico de este juego es bastante único, de modo que si tu ves un fragmento del juego puedes diferenciar solo por el estilo que pertenece al juego. Tiene texturas buenas, muy buena ambientación, y a mi parecer, para ser un juego el cual no se centra en el agua (por ejemplo cómo Sea of Thieves o cualquier juego donde el mar esté muy presente). Tiene muy buen mar, se ve muy real y bonito, con buenas animaciones tanto en movimiento como en calma.

Además, si a eso le sumamos el reciente DLC gratuito que nos permite jugar al juego en blanco y negro nos da un apartado gráfico bastante decente

Para que un juego te haga sentir parte de el, es muy importante la música y todo lo relacionado con ella.

En cuanto eso, Dishonored 2 lo logra y además muy bien, tiene muy buenos sonidos en todo momento, de modo que solo con escuchar puedes diferenciar una situación de otra (por ejemplo, se puede distinguir a los enemigos solo por el sonido y los diferentes tipos de alistamiento)

En este apartado hago una mención especial a los músicos callejeros que nos podemos encontrar en distintos puntos de la historia, ya que eso da gran vida al juego y te permite caminar por una calle y notar que es un mundo vivo.

Por no mencionar que las canciones que cantan reflejan la actualidad del juego, tanto social como políticamente, donde ha habido una usurpación del trono, los trabajadores no tienen derechos y la pobreza abunda por todas las calles, mientras los ricos abusan de sus privilegios.