
Hoy os queremos traer el análisis de Besiege, es un juego que desafía tanto la lógica como la imaginación, donde la construcción y la física se entrelazan para ofrecer una experiencia única. Originalmente, se distribuyó en PC.
Estuvo 5 años en acceso anticipado, desde 2015 hasta 2020, y durante ese tiempo recogió el feedback de numerosos jugadores. Hoy día cuenta con un 95% de críticas positivas en Steam tras más de 44.000 valoraciones, aunque en esta ocasión nos vamos a centrar en su versión de consolas.
Más concretamente, en la de PlayStation, ya que ha sido la última en llegar junto a la de Switch. Disponibles desde el pasado 12 de diciembre, han terminado de expandir el juego a casi todas las grandes plataformas.
Dicho esto, a través de este análisis, exploraremos cómo este juego logra mezclar diversión, creatividad y estrategia de una manera sencilla pero profunda.
Análisis de Besiege: el encanto de crear sin límites

Lo que realmente distingue a Besiege de otros juegos es la sensación de libertad total a la hora de diseñar. No hay límites estrictos ni plantillas prediseñadas: todo lo que el jugador necesita son las piezas y herramientas disponibles en el juego. Desde ruedas hasta catapultas, pasando por complejos sistemas de poleas, los jugadores tienen a su disposición una amplia variedad de elementos para construir cualquier tipo de máquina.
Al principio, las opciones son sencillas, pero a medida que avanzas y descubres más herramientas, la creatividad se desborda. ¿Quién no se ha detenido a pensar en crear una máquina tan absurda como un robot con ruedas que lanza fuego o una torre móvil llena de trampas? Y lo mejor de todo es que no existe una única forma correcta de resolver un desafío. Cada jugador puede idear su propio enfoque para completar los niveles, lo que hace que cada experiencia sea única.
La física es el verdadero motor del juego. Cada elemento tiene un peso, una resistencia y una interacción con el mundo muy realista. Por ejemplo, si decides construir un gigante ariete para destruir una fortaleza, no bastará con colocar unos cuantos bloques y esperar que funcione. Tendrás que tener en cuenta el peso, la distribución y, por supuesto, la resistencia de los materiales. Las máquinas tienen que estar equilibradas para evitar que se caigan o se rompan al intentar realizar una tarea.
En Besiege, los errores no solo son una parte del aprendizaje, sino también una fuente constante de diversión. La frustración por ver que una máquina se desploma o no funciona como esperabas se convierte rápidamente en motivación para mejorarla y encontrar nuevas soluciones. Esto hace que el juego se sienta casi como un desafío de ingeniería, donde la experimentación y el ensayo-error son esenciales.
Retos, puzzles y destrucción en igual medida

El componente de desafío de Besiege no se encuentra en un guion narrativo, sino en los diversos niveles que el juego ofrece. Estos desafíos van desde destruir una torre hasta transportar una carga a través de un terreno accidentado, pasando por eliminar tropas enemigas. En cada uno de ellos, el jugador debe pensar en cómo aplicar las leyes de la física y las herramientas disponibles para crear la máquina perfecta.
Al principio, los niveles son sencillos y están diseñados para enseñar los conceptos básicos. Sin embargo, conforme avanzas, los retos se vuelven más complejos. No es raro tener que combinar varias tecnologías o partes de máquinas para crear una solución efectiva. Un ejemplo común es tener que diseñar un vehículo que no solo sea capaz de moverse, sino que también pueda disparar proyectiles o defenderse de ataques.
Estos retos mantienen un equilibrio entre la resolución de puzzles y la destrucción pura. Si bien los jugadores tienen que ser ingeniosos para completar los desafíos de manera eficiente, la destrucción de los entornos y la interacción con el mundo también resulta enormemente satisfactoria. Cada impacto, cada explosión, cada objeto que cae se siente real y gratificante.

A pesar de ser un juego que podría haber apostado por un diseño realista o excesivamente complejo, Besiege mantiene un estilo visual sencillo y efectivo. Los gráficos no son lo más avanzado del mercado, pero eso no importa, ya que el enfoque está en la jugabilidad y en la interacción con las máquinas. Los escenarios tienen un estilo medieval, con castillos, aldeas y tierras abiertas, que se mezclan perfectamente con la mecánica del juego.
El diseño visual tiene algo de lo que podría considerarse un encanto retro, sin sobrecargar al jugador con detalles innecesarios. De hecho, este enfoque minimalista hace que el jugador se centre más en lo que puede construir y probar, en lugar de distraerse por los detalles gráficos. Además, la interacción con el entorno es crucial, por lo que los efectos de física, como los objetos que se rompen o se desplazan, están bien logrados y añaden una capa extra de inmersión.
Comunidad y contenido adicional
Una de las grandes ventajas de Besiege es su comunidad. Los jugadores pueden compartir sus creaciones a través de la Steam Workshop, lo que abre un abanico infinito de posibilidades. Desde vehículos increíblemente complejos hasta diseños cómicos y absurdos, las creaciones de otros jugadores sirven de inspiración para quienes buscan nuevos retos o simplemente quieren ver cómo otros han resuelto los mismos problemas de formas creativas.

Además, los desarrolladores de Besiege han lanzado actualizaciones y contenido adicional, manteniendo el interés en el juego incluso después de haber completado todos los niveles. Estas actualizaciones suelen incluir nuevas piezas para construir, nuevas mecánicas y a veces incluso nuevos retos, lo que hace que el juego siga siendo relevante a lo largo del tiempo.
A pesar de que Besiege podría parecer complicado al principio, su curva de aprendizaje es suave y se adapta a los jugadores de diferentes niveles. Si bien las primeras horas del juego se centran en aprender los conceptos básicos, conforme se avanza, el jugador tiene la oportunidad de perfeccionar sus habilidades y crear máquinas más avanzadas.
Esto lo convierte en un juego accesible tanto para aquellos que buscan pasar el rato como para los que desean enfrentarse a desafíos más complejos. A su vez, las opciones de personalización y la creatividad que ofrece hacen que el juego sea altamente rejugable, algo que muchos jugadores valoran enormemente.
Análisis de Besiege: conclusiones

En resumen, Besiege es un juego que se aleja de las fórmulas tradicionales para ofrecer una experiencia única centrada en la creatividad, la física y la resolución de desafíos. A través de su diseño simple pero efectivo, permite a los jugadores explorar su ingenio y disfrutar de una jugabilidad que nunca se siente repetitiva.
Ya sea para resolver puzzles ingeniosos, destruir castillos o simplemente crear una máquina absurda, Besiege ofrece una experiencia entretenida y profunda, ideal para aquellos que disfrutan de los desafíos y la creatividad.


- La libertad para construir lo que quieras es infinita.
- Las máquinas reaccionan de forma creíble a tus diseños y acciones.
- El impacto de destruir estructuras o enemigos es muy satisfactorio.
- Cada nivel presenta nuevos retos que requieren soluciones ingeniosas.
- Puedes compartir y descargar creaciones de otros jugadores.
- Gráficos que no sobrecargan, permitiendo centrarse en la jugabilidad.

- Al principio puede ser difícil entender cómo funcionan algunas mecánicas.
- El juego no tiene un argumento o narrativa profunda.
- Algunos desafíos pueden volverse algo monótonos a medida que avanzas.