
Muy buenas, amantes de los videojuegos. Hoy os traemos un análisis de Ash of Gods Redemption, un juego de rol de fantasía desarrollado por Aurum Dust y distribuido en España por Koch Media. El título se lanzó al mercado español el pasado 31 de enero de 2020 para las plataformas PlayStation 4, Microsoft Xbox, Nintendo Switch y PC. Os dejamos, a continuación, con una breve sinopsis del videojuego:
Ash of Gods es la historia de tres protagonistas que se alzan contra una amenaza secular que se creía solo una leyenda. El capitán Thorn Brenin, el guarda Lo Pheng, el escriba Hopper Rouley y muchos otros todavía no saben que los Reapers han vuelto y pretenden ahogar al mundo en sangre para despertar a los dioses dormidos.
Análisis de Ash of Gods Redemption
El juego de Aurum Dust nos presenta, al empezar la partida, tres modos de juegos. Estos son el Modo Historia, el Modo Clásico y el Modo Hombre de Hierro, entre los que podemos elegir en función del tipo de jugador que seamos. En el primero nos centraremos únicamente en la historia dejando a un lado el gameplay. El Clásico vendría a ser un equivalente del modo «normal», mientras que el Hombre de Hierro, por último, sería el «difícil». Es el más apto para jugadores más experimentados.
A través de una narrativa rogue-like —es decir, de mazmorras—, Ash of Gods cuenta una historia a través de las decisiones de los personajes. En otras palabras, se trata de una especie de novela visual con elementos de rol y jugabilidad centrada en la estrategia, donde las acciones que vayamos tomando serán, en principio, fundamentales de cara al transcurso de eventos posteriores, ya sean inmediatos o futuros.
Un universo vasto y complejo
Basada en la novela Terminus, Ash of Gods Redemption nos traslada a un universo fantástico al estilo medieval con un guion escrito por el autor ruso Sergey Malitsky. Con obras tan populares como Juego de tronos o la actual serie The Witcher de Netflix, está claro que este tipo de relatos está en claro auge. En este caso, el videojuego nos pondrá en la piel de tres personajes; es decir, nos moveremos a través tres líneas temporales paralelas que se irán entrelazando durante el transcurso de la historia.
De buenas a primeras, Ash of Gods no da rodeos y nos mete de lleno en el universo que plantea. Esto, en sí mismo, no tiene nada de malo, pero resulta una estrategia que se va repitiendo en otros aspectos, con un resultado lejos de ser positivo: el caos. Tanto la historia como los personajes son presentados de forma pobre, sin muchas explicaciones; a través de los diálogos es por donde vamos recabando información, pero aquí surge un problema, quizás el más gordo del título.
Traducción deficiente

Un juego basado en el desarrollo de un mundo complejo, con personajes de moralidad ambigua precisa de una excelente traducción. Es fundamental que la escritura sea fluida, que se adapte a los personajes y que consiga captar la atención del jugador. En este caso, ocurre todo lo contrario. La traducción de Ash of Gods Redemption es nefasta, en todos los sentidos. No solo aparecen fallos ortográficos, también traducciones literales, palabras que se mantienen en inglés sin ningún motivo, en incluso partes donde encontramos en ruso. Inadmisible en cualquier caso, y mucho más sangrante tratándose de un videojuego de estas características.
Siendo sincero, es la primera vez que me enfrento a una traducción así. De hecho, en más de una ocasión pensé en cambiar el idioma a inglés, pero era imposible. Al final la sensación que produce es un desapego total por la acción, ya que entender los diálogos o las narraciones supone un esfuerzo extra que se une a un plantel bastante elevado de personajes y un mundo fantástico que conocemos a medias.
Música y estilo visual
No obstante, si algo es irreprochable es que el apartado sonoro cumple con creces. Salvo los sonidos —gruñidos, por ejemplo— de algunos personajes en sus diálogos, tanto la voz del narrador como la banda sonora son espectaculares. La música es obra de la colaboración de tres compositores: Adam Skorupa, Krzysztof Wierzynkiewicz y Michael Cielecki; este último es conocido por componer para proyectos como The Witcher o Call of Juarez. Ash of Gods Redemption viene acompañado de temas musicales orquestados muy acordes con la temática, con un estilo muy particular que deja huella en el oyente.
En cuanto al apartado visual, el juego es bastante simple, pero presenta una estética sorprendentemente cuidada. Algunas escenas quitan el hipo y las animaciones, aunque son pocas, funcionan a la perfección y recuerdan, salvando las distancias, a El señor de los anillos (1978), de Ralph Bakshi. En este apartado es fácil ver la comparación con The Banner Saga, franquicia en la que claramente se inspira, no solo en lo visual, sino también en su gameplay, del que hablaremos a continuación.
Gameplay
Podríamos resumir que el juego de Ash of Gods se divide durante el modo historia en dos partes fundamentales: la toma de decisiones en diálogos —y elección de rutas— y los combates. Los combates se libran en tableros donde podremos mover a nuestros avatares y realizar ataques o hechizos para ayudar a nuestros compañeros y derrotar a nuestros enemigos. El sistema es relativamente sencillo, pero tal y como mencionaba anteriormente, presenta muchos elementos y el juego no te los explica correctamente. Se echa en falta un tutorial —en condiciones— donde se explique bien cómo funciona todo.
En varios combates, sobre todo al principio, ni siquiera sabía qué tenía que hacer. Los controles se movían de un lado para otro y, una vez más, afloraba la sensación de caos absoluto. Es por eso que, finalmente, opté por la opción —el propio juego te lo proporciona— de que las batallas fueran automáticas. Una posibilidad que agradecí, pero que siendo críticos solo acucia la enorme falla que presenta el sistema de combate.
Por otro lado, si bien nos movemos un mundo bastante grande, la historia nos guía por pocos caminos, convirtiendo la aventura en una línea recta al estilo Final Fantasy XIII: un enorme pasillo a través de un mapa.
Conclusiones

Ash of Gods Redemption es un título con mucho potencial, con un mundo lleno de matices, con personajes variados y una banda sonora espectacular, pero lastrado por una traducción pésima y un gameplay repetitivo y sin gracia alguna. Una verdadera lástima.
- Corrección: Marcos Wagih
Análisis de Ash of Gods redemption. Edición física para PS4 cedida por Koch Media.