
Tras el estreno el pasado 15 de diciembre del octavo episodio de Star Wars bajo el título Los Últimos Jedi, Mark Hamill lamentó comunicar que no estaba de acuerdo con las decisiones tomadas por Rian Johnson, el director de la película.
Le dije a Rian; ‘los Jedi no se rinden’. Incluso si tuviera un problema, le podría tomar un año para poder reagruparse, pero si cometiera un error intentaría arreglarlo. Ahí es donde tuvimos una diferencia, pero ya no me incumbe. Rian necesitaba que todo fuera así para poder construir el final.
Es hora de que los Jedi se acaben
Decía Mark en Star Wars Episodio VIII. Aquí es donde Hamill se encuentra en completo desacuerdo con la decisión tomada por parte de guionistas y dirección, ya que Luke jamás diría eso:
Luke nunca diría eso, lo siento, en esta versión sí, pero yo estoy hablando de la de George Lucas. Esta es la nueva generación, tengo que ser otro personaje, tal vez ahora sea Jake Skywalker y no Luke Skywalker. Aun así, tuve que hacer lo que me dijeron (Rian Johnson) para que la historia funcionara, todavía no lo he aceptado, pero bueno, ¡es solo una película! […] Llegué a creer realmente que Rian era el hombre adecuado para este trabajo.
I regret voicing my doubts & insecurities in public.Creative differences are a common element of any project but usually remain private. All I wanted was to make good movie. I got more than that- @rianjohnson made an all-time GREAT one! #HumbledHamill https://t.co/8ujJfBuEdV
— Mark Hamill (@MarkHamill) December 26, 2017
Es aquí donde se arrepiente
Me arrepiento de haber expresado mis dudas e inseguridades al público. Las diferencias creativas son elemento común en cualquier proyecto pero por lo general permanecen en privado. Todo lo que quería era hacer una buena película. Y he conseguido más que eso, ¡Rian Johnson hizo una que resistirá el paso del tiempo!
Expresaba el actor en el comunicado de Twitter.