Ha pasado poco menos de medio año desde que empezamos con Ranger Reject y lo cierto es que el paso del tiempo le está sentando muy bien. Hoy, en nuestra reseña de Ranger Reject n.º 3, nos seguimos descubriendo ante el increíble cambio de narrativa de Negi Haruba, el también autor de Go-Tōbun no Hanayome (Las Quintillizas).
Y ahora que hemos ahondado más en la historia, podemos empezar a tratar temas más generales, puesto que partimos de una base más compleja. Así pues, podemos dejar a un lado las introducciones de personajes, tramas e ideas para hablar de, por ejemplo, la evolución de la narrativa, de ‘buenos y malos’ o del dibujo, por ejemplo.
Dicho esto, antes de comenzar con la review propiamente dicha, nos gustaría recordaros que Ranger Reject es una licencia de Distrito Manga. Asimismo, se presenta como un manga sentai que busca darle una vuelta de hoja al género, revolucionando los papeles clásicos de héroes y villanos y retorciendo la realidad hasta límites insospechables.
Reseña de Ranger Reject n.º 3 | Portada, sinopsis y edición
Tras perder uno de los artefactos divinos, los Dragon Keepers convocan una reunión urgente para tomar medidas contra los alienígenas. Mientras tanto, el soldado D, al que creíamos muerto, ¡aparece con vida! Y ahora cuenta con la ayuda de Hibiki, un defensor de la justicia que busca la paz y la armonía entre humanos y alienígenas. Sin embargo, de repente aparece un subalterno del Blue Keeper que les ha seguido la pista, y deberán enfrentarse en una batalla por la supervivencia. Al verse contra la espada y la pared, Hibiki urde un plan desesperado con el que ambos logran escapar con vida. Con sus poderes de transformación, el soldado D deberá hacerse pasar por él e infiltrarse en el nido de Bailong, el lugar donde residen los miembros de la patrulla.
| Autoría | Negi Haruba |
| Volúmenes | 5 (serie abierta) |
| Género | Shōnen, acción, sentai |
| N.º páginas | 184 |
| Precio | 8,95 € |
| Lanzamiento | 03/11/2022 |
| Reseña | Reseña de volúmenes anteriores |
Sabiendo esto, podemos hablar —una vez más— de la edición, aunque os advertimos de que vamos a repetir lo mismo de siempre. ¿A qué nos referimos? Pues a que Distrito Manga sigue realizando un gran trabajo tanto en la producción del material como en la adaptación idiomática de sus obras. Esto último no nos sorprende, la verdad, pues cuentan con la traducción de Daruma y Víctor Gomà.
Tampoco nos causa demasiado estupor comprobar que, de nuevo, la filial manga de Penguin Random House ha hecho un gran trabajo con la maquetación. Por el momento, Ranger Reject está siendo uno de sus productos más notables en ese sentido. En los tres primeros volúmenes (aunque es posible que se nos haya pasado algo) no hemos detectado prácticamente ningún error.
Los bordes están bien regulados, los diálogos han sido encuadrados de manera adecuada y la impresión goza de una gran calidad. Consecuentemente, y hasta la fecha, podemos decir que la impresión ha rozado la perfección en prácticamente todos sus volúmenes. Siempre se puede mejorar en algo, pero por nuestra parte no encontraréis mayor queja a este respecto.
El mundo se mueve en escalas de grises inciertos y rojos sangrientos
Esclarecidos los hechos, podemos hablar, ahora sí, de la historia. Ranger Reject n.º 3 nos sigue presentando la historia de D, el ‘villano’ que ha decidido acabar con la vida de los Dragon Keeper y sus aliados para encontrar su propia justicia. No obstante, ahora que se ha infiltrado en bla base enemiga de forma efectiva, empezamos a encontrar nuevos matices.
Antaño, era muy fácil empatizar con la causa de D y los suyos, pero es a partir de ahora que empezaremos a explorar las atrocidades que cometieron algunos de sus antiguos jefes, ahora todos (en teoría) muertos. La humanidad tiene motivos más que suficientes para querer venganza. De esta forma, Negi Haruba nos presenta una diatriba moral muy jodida (perdón por la expresión) en la que todo acaba teñido de rojo.
Lejos de lo que podíamos haber intuido de buenas a primeras por la personalidad de los Dragon Keeper, aquí nadie está a salvo de la culpa. Todos han cometido actos que merecen ser castigados en mayor o menor medida, engendrando una espiral de violencia sin fin. Por consiguiente, la historia adquiere todavía más matices, manchándolo todo de gris, puesto que no hay punto medio.
Aquí no hay buenos ni malos. Al igual que en la guerra, el resultado final de esta venganza mutua solo acabará con vencidos, pero nunca con vencedores. Esto lo aprendemos por las malas cuando, de repente, aquellos personajes que ‘tan mal nos caían’ acaban demostrando que hay un porqué tras sus acciones.
Personajes con sentido y proyección
El ego, la rabia y la impotencia toman forma y cobran vida propia a través de los cada vez más carismáticos segundarios. Es aquí donde Ranger Reject está empezando a despuntar. Aunque todavía tiene mucho camino por delante, los preconceptos y diseños del reparto es cada vez más potente. Así pues, el peso de la historia no recae solo en los protagonistas, siendo algo que nos encanta.
De hecho, aunque D es el foco principal de la narrativa, pronto nos damos cuenta de que es solo un peón dentro del ajedrez de Negi. El mangaka, con una sapiencia descomunal, ha empezado a colocar cada vez más piezas. Y si bien es cierto que es fácil que todo se ‘descuajeringue’ y termine de mala manera, por el momento tiene muy buena pinta.
Al menos esta es la sensación que nos está dejando a nosotros de momento. Siendo sinceros, las expectativas son cada vez más altas. El guion, que pese a todo sigue teniendo algunas inconsistencias propias de quien no está acostumbrado al género, sigue mejorando. Citando el antiguo dogma de no pocos colegios, «progresa adecuadamente».
Como también progresa, por supuesto, el dibujo, aunque aquí es donde menos evolución estamos viendo. No nos malentendáis: Haruba es bueno. Muy bueno. El dibujo no ha dado un salto cualitativo tan exagerado porque ya era bueno de base, así que tampoco hay mucho donde rasgar. Tal vez, y solo tal vez, esperamos algo más de fortuna con ciertos encuadres cuando progrese la acción y adquiera más experiencia con el sentai.
Reseña de Ranger Reject n.º 3 | Conclusiones
No queremos enrollarnos mucho más, así que vamos a ir cerrando nuestro escrito por aquí, no sin antes ofreceros algunas pinceladas finales. En primer lugar, no podemos marcharos sin deciros que Ranger Reject es uno de esos mangas que te sorprende volumen tras volumen. Gracias a su particular premisa, es capaz de pillarte completamente descolocado. Y aunque nos estamos acostumbrando, sigue resultando refrescante.
Seguidamente, que no debemos quedarnos en el nombre de su autor. Aunque se encasilló mucho a Negi Haruba en el género de la comedia romántica por su trabajo con Go-Tōbun no Hanayome, ha demostrado que tiene mucho talento para todo tipo de historias. Hoy por hoy, es uno de los mangakas que más nos han sorprendido. Al menos en lo que va de 2022.
Para terminar, que es una obra que recomendamos muy fuertemente a casi cualquier tipo de lector, pero no queremos olvidarnos de algunos de sus defectos. ¿Cómo cuáles? Pues, por ejemplo, a que debe seguir trabajando los diálogos. Por lo demás, Ranger Reject nos está encantando. Sigue necesitando evolucionar, pero los primeros compases han sido muy, muy buenos.
- Un sentai muy rompedor que sorprende por su premisa.
- Gran dibujo, buena narrativa y ritmo más que adecuado.
- Interesante y divertido. Con buena edición.
- Te deja con ganas de más. Es inesperado.
- Es necesario que el autor siga trabajando en los diálogos.
