Ha pasado poco más de un mes desde que cerramos el trigesimocuarto volumen de My Hero Academia. Junto con él cerramos muy numerosos hilos, abrimos el preludio del arco final y nos preparamos para afrontar la despedida de Deku y compañía. Por supuesto, esto no significa que el presente tomo sea el último. Tampoco lo será el siguiente. Aún quedan poco menos de una decena, pero el último episodio ya nos está haciendo señales desde el horizonte. Esto lo llevamos comentado desde hace tiempo con su emisión semanal y lo hemos querido recordar en nuestra reseña de My Hero Academia n. 35.
Es algo que, por desgracia, tenemos que tener muy presente. Y decimos «por desgracia» porque una parte de nosotros no quiere despedirse de Kohei Horikoshi. Siendo sinceros, no es fácil decirle adiós a algo que lleva tanto tiempo entre nosotros. Es por esto mismo que ya nos estamos haciendo a la idea, aunque no hay mal que por bien no venga. Si bien es cierto que nos apena mucho despedirnos de MHA, también es verdad que todo lo bueno tiene un final.
En el mundo editorial nipón esto tiene un significado especial, puesto que han sido muchas las series que se han echado a perder por no saber despedirse a su debido momento. Con My Hero Academia no ha sucedido. Con sus más y sus menos, el manga ha sabido encontrar su camino. Gracias a esto, hoy día —aunque hasta que no termine no podremos dar una conclusión final— podemos decir que estamos encantados de haber seguido esta serie durante tanto tiempo.
Hoy arranca nuestra despedida, pero esta se alargará durante unos cuantos meses. ¿Cuántos? Teniendo en cuenta la periodicidad de Planeta Cómic, es muy posible que sea más de un año, pero la cuenta atrás ya ha comenzado. Con su emisión original muy presente, no podemos hacer otra cosa. Mientras tanto, por supuesto, os seguiremos contando que nos ha parecido el manga… empezando por la cuestión editorial del presente tomo.
Reseña de My Hero Academia n.º 35 | Portada, edición y sinopsis
Gracias a la intervención de Star and Stripe, que destruyó varios de los poderes propiedad de AFO, los héroes japoneses han obtenido un breve respiro e incluso esperan recuperar la ventaja.
Por su parte, Izuku descubre quién es el traidor de la Clase A y cuáles son las razones que los empujaron a actuar de esta manera.
| Colección | My Hero Academia vol. 35 |
| Autoría | Kohei Horikoshi |
| Género | Acción, comedia, fantasía, shōnen |
| Formato | Rústica sin solapas con s/cub |
| Tamaño y páginas | 11,1 x 17,7 cm con 192 páginas en b/n |
| Precio | 8,95 € |
| Maquetación | Planeta Cómic |
| Traducción | Ayako Koike |
| Fecha de lanzamiento | 24/05/2023 |
| Reseñas | Reseñas de volúmenes anteriores |
En lo que respecta a la edición, Planeta Cómic ha hecho un gran trabajo una vez más. Eso sí, nosotros hemos tenido algún que otro pequeño problemilla con nuestra copia, puesto que una de las páginas se desprendió ligeramente. Es la primera vez que nos pasa, así que entendemos que, más que un error del tomo, ha sido una singularidad concreta de una unidad determinada más que algo general.
Es por esto mismo que destacamos su bien hacer, ya que —hasta donde sabemos— somos los únicos que han tenido este ‘problema’. Esto es algo que puede pasar cuando se producen productos en masa, así que no consideramos que haya que alarmarse demasiado. Por lo demás, valoramos de manera muy positiva el trabajo realizado por la editorial tanto en materia de traducción como de maquetación.
Falla en los márgenes internos, aunque esto es algo que ya están incorporando en sus nuevas licencias, como InuYasha. Por lo demás, como ya hemos comentado, estamos muy contentos tanto con el presente tomo como con la colección en general.
El principio del fin
Con la crisis de la traición todavía muy presente, los héroes se enfrentan a una situación crítica. Llegados a este punto no tienen otra opción más que la de plantear un enfrentamiento definitivo y acabar de una vez por todas con la amenaza de Shigaraki. Así pues, los nombres más importantes del país del Sol Naciente se unen una vez más para diseñar un plan con el que darle fin al heredero de All for One.
Es aquí donde Aoyama adquiere un papel especialmente relevante, dando todavía más sentido a los últimos eventos que él mismo protagonizó. Atenazado por el miedo y el arrepentimiento, con la ayuda de sus compañeros y del profesor Aizawa decide dar un paso adelante en busca de la redención. De esta manera, el autor recupera una idea que siempre ha estado muy presente en el manga, pero que se nos había olvidado: las segundas oportunidades existen.
Y aunque está claro que el sentimiento de culpa sigue muy presente y que la desconfianza es un mal que puede asolar las filas de los héroes, las palabras de All Might y el tesón de Aizawa permiten que todo avance por el camino correcto. De esta manera, los héroes trazan un plan muy simple, pero al mismo tiempo complicado: separar a sus enemigos. Aunque son muy poderosos, son perfectamente conscientes de que las amenazas de Dabi y Shigaraki —entre otros— es demasiado destructiva.
Los protagonistas se preparan
Con eso en mente buscan la manera de llevar a cada uno de ellos a una zona diferente para poder debilitar sus fuerzas. Por supuesto, aunque la teoría es ‘sencilla’, la ejecución es tremendamente compleja. Tanto es así que logran llevar a cabo su plan, pero con varios «peros» en el proceso. No diremos cuáles, por supuesto, pero estaba claro que no todo podía salir bien.
Con ese trasfondo tienen lugar los primeros ‘embates’ de la batalla final, aunque en esta entrega no nos metemos de lleno en ella. Lo que sí sabemos es que ya no hay marcha atrás y que, pase lo que pase, este será el duelo final. Por supuesto, este no podía comenzar sin explorar un poquito más el pasado de otros grandes personajes como Himiko Toga, una de las principales antagonistas de la serie.
Aunque la transformista está del lado de los villanos, es uno de los personajes preferidos del público y, como tal, tendrá su momento de protagonismo antes de que empiece la batalla final. Por desgracia, demostrará una vez más que ha perdido el juicio por completo y que su manera de entender el mundo, el amor o la amistad se ha tergiversado hasta convertirse en una vorágine de caos y destrucción.
No sabremos si habrá redención para ella, pues parece haber cruzado una línea roja, pero nunca se sabe. Con el recuerdo de Twice (y sus poderes) todavía muy presentes, será una de las primeras villanas en hacer acto de presencia de manera protagónica junto con Dabi. Ambos se perfilan como los grandes contendientes de la primera parte del arco final, pero somos perfectamente conscientes de que todos tendrán su momento.
Reseña de My Hero Academia n.º 35 | Conclusiones
La obra está llegando a su final y es el momento para dar el todo por el todo. Por supuesto, el enemigo principal sigue siendo Shigaraki. Si él cae, sus aliados también lo harán. Algo que parece más viable que nunca después de que Gigantomachia cayese derrotado, perdiendo —así— a uno de sus aliados más poderosos. Por supuesto, esto no ha acabado, ya que el propio Shigaraki ha alcanzado un nivel superior al del AFO original.
Es por eso mismo que Deku acabará adoptando un papel clave en el combate. Él y el resto de alumnos de la U.A. (no solo de la clase 1-A, sino también de otras tantas) formarán parte del plan final. Aunque son niños, siendo este uno de los males que más fuerte golpea en la mente de los héroes, su presencia es necesaria. Sin ellos la victoria es inviable, por lo que será necesario contar con ellos una vez más.
Con todo esto, My Hero Academia ha alcanzado el primer punto del clímax final. Ya no podemos esperar otra cosa más que un duelo en donde el caos y la destrucción lo consuman todo. Mientras tanto, nosotros seguimos disfrutando del que sin duda está siendo uno de los mejores shonen de los últimos años. Dicho esto, podemos despedirnos de este vol. 35 con una última oración que resume a la perfección su contenido: bienvenidos al comienzo del final.
- El arco final tiene una pinta tremenda.
- Kohei ha alcanzado el momento cumbre de su obra en un gran estado de forma.
- El dibujo se ha convertido en uno de sus principales baluartes.
- No se podía pedir más emoción en un momento tan clave.
- Algunos personajes se han quedado casi sin desarrollo.
