Siendo sincero, cuando me dispuse a leer el volumen 10 de Ranger Reject para contaros qué me había parecido mediante mi reseña, no me esperaba encontrarme con uno de los volúmenes más diferenciales de la serie hasta la fecha. Tras jugar al gato y al ratón durante meses, Negi Haruba ha dado un golpe sobre la mesa con varios giros argumentales de esos que dejan huella. Lo mejor de todo es que no solo tienen mucho sentido, sino que hasta aportan orden y lógica a la trama. ¿Lo malo?
Que resulta bastante complicado contaros que me ha parecido esta nueva entrega sin contaros el porqué. Como no quiero (y no los haré) marcarme ningún spoiler, me veo en la imposibilidad de concretar mis impresiones hablando de eventos determinados. Eso hace que sea algo más complejo de expresar por qué pienso que el manga ha dado un paso hacia adelante después de marearnos (en el buen sentido) durante meses.
Cuando creíamos que el juego de luces y sombras era total y que la dicotomía entre el bien y el mal había perdido todo su sentido, el autor nos ha puesto los puntos sobre las íes para complicarlo todo incluso más. Y lo digo, una vez más, en el buen sentido, porque cuando se hacen bien las cosas, no importa que haya muchos cambios, pues hasta los agradeces. Eso es —precisamente— lo que nos ha traído el décimo tomo de Ranger Reject. ¿Queréis saber más? Os lo cuento a continuación… tras hablaros de su edición.
Reseña de Ranger Reject n.º 10 | Portada, sinopsis y edición
¡¿Es posible que D haya conseguido matar a Red?! Pero, si es así, ¿por qué la batalla dominical vuelve a celebrarse como si no hubiera pasado nada? Mientras D, incapaz de saborear el fruto de su triunfo, trata de sobrellevar la frustración, unos extraños y elusivos monstruos tienen a la Patrulla desconcertada. La desconfianza de los ciudadanos hacia esta va en aumento al mismo tiempo que la Asociación Protectora de los Alienígenas no deja de ganar nuevos adeptos, una tendencia que termina por dividir la sociedad en dos bandos opuestos…
| Colección | Ranger Reject vol. 10 |
| Autoría | Negi Haruba |
| Género | Shōnen, acción, sentai |
| Formato | Tapa blanda con sobrecubierta |
| Tamaño y páginas | 13,1 x 18,2 cm con 192 páginas en b/n |
| Precio | 9,95 € |
| Maquetación | Guillermo Bonnin (Drac Studio) |
| Traducción | Victor Gomà (Daruma) |
| Fecha de lanzamiento | 07/03/2024 |
| Reseñas | Reseña de volúmenes anteriores |
Dicho esto, y antes de continuar, me gustaría destacar una vez más la labor de Distrito Manga para con esta y el resto de sus licencias. En líneas generales, podemos decir que la editorial está realizando un gran trabajo en casi todas las áreas. Así pues, este nuevo tomo es otro ejemplo de cómo publicar un producto que cumpla con todos nuestros estándares, desde la traducción hasta la maquetación, pasando por la propia impresión.
Un sentai que no deja de crecer
Habiendo aclarado este tema, me encuentro con la difícil tarea de cómo explicaros por qué Ranger Reject es un manga cada vez mejor sin destriparos la historia. Por suerte, hay formas de hacerlo. Por ejemplo, os puedo contar que el desarrollo de sus personajes —principales y secundarios— es de lo mejorcito que nos ha dado el género sentai en muchísimo tiempo. Tanto es así que incluso en los momentos en los que el Soldado D se desdibuja y aparece menos, el manga se siente igualmente sólido.
O lo que es lo mismo, no necesitamos que el protagonista aparezca para sentir emoción, miedo o tristeza. Lo mejor de todo es que, cuando hace acto de presencia, lo hace por todo lo grande. Es más, el final del décimo tomo es de los que te dejan al borde de la silla mientras sueltas improperios y piensas «¿pero cómo puedes cortar justo aquí?». Y es que no solo te deja con ganas de más, sino que te provoca tanta curiosidad que hasta te acabas mordiendo las uñas.
Así pues, incluso sin deciros cómo la historia ha conseguido dar un paso hacia adelante potenciando la dicotomía del bien contra el mal, os puedo asegurar que las cosas van por muy buen camino. Además, el autor te deja muy claro que todos miran por su propio interés y que, dentro de la oscuridad de sus corazones, los hay menos perversos. Pese a ello, todos tienen algún pecado que ocultar, sean héroes o villanos. Algo que se potencia todavía más gracias a la introducción del grupo que dice defender los derechos de los invasores.
Un mundo repleto de secretos
De esta manera, lo que al principio parecía un mero recurso para darle algo más de contexto al mundo y traer una dinámica bastante propia del mundo real se ha terminado convirtiendo en algo más. Y vaya si ha funcionado, porque ha encajado a las mil maravillas. Gracias a este nuevo grupo, la historia se ha desarrollado de forma mucho más orgánica al tiempo en que presentaba nuevas subtramas verdaderamente interesantes. Todo ello sin dejar de ahondar en las dudas de sus personajes, destacando el Soldado D en todo ese proceso.
Por supuesto, no es oro todo lo que reluce, pues determinados segmentos avanzan demasiado rápido y es fácil perderse si te despistas. Hay temas en concreto que pasan de 0 a 100 en unas pocas páginas, por lo que el ritmo puede ser un poco errático, mas no es una constante. De hecho, solo se da en ciertas situaciones, por lo que te acaba dejando con una sensación más bien positiva. En general, pues, la trama, el argumento, el guion y los diálogos rozan o superan el notable en casi todo momento.
El caso es que te hace hasta pensar en que el final podría estar cerca, puesto que se precipitan varios eventos muy importantes, mas sé que no es así. Al menos no de momento, puesto que la serie dispone de 13 tomos en Japón y su autor aún está trabajando en ella. O lo que es lo mismo, que parece que tendremos Ranger Reject para rato. Como poco, 2024 no será el año que sirva como despedida. Al menos no en España.
Reseña de Ranger Reject n.º 10 | Conclusiones
Queriendo hablar también de otros temas, debo decir que Negi Haruba es un mangaka que sabe dibujar muy bien. Aunque incrusta escenas de acción o paneles bastante cargados, demuestra tomo tras tomo que domina muy bien el trazado. O lo que es lo mismo, sus dibujos son bastante claros a la par que atractivos. Destaca especialmente la expresividad de sus personajes, sobre todo las miradas y las sonrisas. En el resto de puntos suele cumplir con buena nota, pero es aquí donde suele dar un salto de calidad.
Aparte, es donde más se deja de ver toda su personalidad como autor y dibujante. O lo que es lo mismo, es donde Ranger Reject es más Ranger Reject que nunca. Al menos cuando hablamos solo del arte. Sea como fuere, ir por ir cerrando ya la presente reseña, debo confesar que estoy cada vez más enganchado a este manga y que estoy deseando ver cómo continúa. Como historia, sabe aportarme mucho más que acción, siendo un sentai que funciona muy bien en diversos niveles.
- Un sentai muy rompedor que sorprende por su premisa.
- Gran dibujo, buena narrativa y ritmo más que adecuado.
- Interesante y divertido. Con buena edición.
- Los personajes no dejan de evolucionar y los dilemas morales son cada vez más potentes.
- Te deja con ganas de más. Es inesperado.
- Hay segmentos que sí son algo confusos en los que no te enteras bien de qué está pasando de buenas a primeras.
