Las cosas están empezando a cambiar. Los niños de Dios ya no buscan simplemente sobrevivir. Ahora tienen un objetivo todavía mayor: asesinar a Kami-sama. Por supuesto, su misión no será nada fácil, ya que para lograrlo tendrán que superar pruebas incluso más complicadas que las anteriores. En esta reseña de As the Gods Will la secuela n.º 5 os hablaré parcialmente sobre ellas, aunque en realidad no son lo más importante. Estas se han convertido en poco más que un medio para alcanzar la meta.
Hablo, por supuesto, a nivel de narración. Hasta ahora, buena parte de la historia giraba en torno a cuál sería la siguiente prueba y quiénes sobrevivirían. No obstante, durante el transcurso de esta quinta entrega se refuerzan los objetivos de algunos de nuestros protagonistas… y de unos tantos viejos conocidos. Siguiendo la dinámica habitual, pero con una mentalidad más centrada, el manga da un nuevo paso hacia adelante y refuerza su posición.
Hasta cierto punto, era algo necesario, ya que mantener la misma dinámica de siempre podría haber resultado en algo un tanto tedioso. Por supuesto, esto no significa que las pruebas hayan desaparecido, pues el sistema de supervivencia es el mismo. A grandes rasgos, la narrativa es la misma de siempre, pero se ha agregado un componente extra que permite que disfrutemos incluso más de la lectura.
O lo que es lo mismo, As the Gods Will ha reforzado las motivaciones de sus protagonistas para que sintamos que hay algo más en juego. La elección del nuevo Dios del mundo sigue siendo uno de las grandes premisas de la trama, por supuesto, pero ahora hay incluso más cosas en juego. En consecuencia, la pregunta de quién será finalmente el ganador genera incluso más curiosidad.
Reseña del manga As the Gods Will: la secuela n.º 5 | Portada, sinopsis y edición
Tras pelearse con el mejor amigo de su infancia, Yasuto Akashi decide saltarse las clases. Sin embargo, lo que no se imagina es que justo ese día en el instituto comienzan lo que parecen unos juegos la mar de inocentes… Por otra parte, han reunido a todos aquellos que han faltado a clase para concederles una segunda oportunidad y que completen una serie de juegos mientras sus compañeros intentan salir con vida de la siguiente ronda. Desconcertados por la situación, los estudiantes arriesgarán sus vidas para sobrevivir, aunque eso implique dejar de lado su humanidad.
| Colección | As the Gods Will parte II vol. 5 de 10 |
| Autoría | Muneyuki Kaneshiro y Akeji Fujimura |
| Género | Shônen, acción, drama, horror, sobrenatural |
| Formato | Tapa blanda con sobrecubierta |
| Tamaño y páginas | 13,2 x 17,9 cm con 376 páginas en b/n |
| Precio | 15,95 € |
| Traducción | Natalia Mintegui y Marta Molla Guillen (Daruma) |
| Fecha de lanzamiento | 05/09/2024 |
| Reseñas | Reseñas anteriores |
Como viene siendo costumbre, Distrito Manga ha hecho un gran trabajo en materia de traducción, impresión y maquetación. Sin embargo, a diferencia de la precuela, la secuela se ha lanzado en formato kazenban. Es decir, con volúmenes que ocupan el tamaño de dos de los originales. Es algo así como un 2×1. Esto hace que, aunque encajen igualmente bien, se vean bastante diferentes en la estantería. Del mismo modo, aunque son muy pocos, hay algunos cortes en los límites físicos del manga que rozan algunos diálogos. Por lo demás, el tercer volumen de As the Gods Will: la secuela dispone de una gran adaptación idiomática y, en general, es un producto de calidad.
Objetivo: asesinar a Dios
Dicho esto, y volviendo al tema que nos acontece, ¿de verdad se notan tanto esos cambios en la personalidad de nuestros protagonistas a través de sus ahora reforzados objetivos? Lo cierto es que en realidad no. Akashi —por ejemplo— sigue siendo el mismo de siempre. Sin embargo, tras asumir cuál es su verdadero objetivo y quién es su enemigo real, refuerza su determinación. ¿Y era necesario asumir ese reto? Sí y no.
Que algunos de nuestros protagonistas digan abiertamente que quieran asesinar a Dios no solo establece una conexión incluso más directa con la primera puerta, sino que nos recuerda que uno de sus principales rasgos es la humanidad. Aunque deban asumir que tienen que acabar con la vida de otras personas para avanzar y pueden llegar a ser crueles, dentro del contexto en el que se encuentran siguen demostrando que tienen un buen corazón. A diferencia de otros personajes muchos más fríos, e incluso maniáticos, mantienen su humanidad bien protegida dentro de una caja fuerte.
Sea como fuere, es cierto que el manga palidece en lo mismo de siempre, y es que el propio Akashi se sigue sintiendo como una suerte de sustituto de Shun. Lo bueno es que —al menos de manera parcial— esta sensación se difumina parcial, mas no os diré cómo ni por qué, puesto que de otra forma os estaría estropeando una de las grandes sorpresas de los últimos episodios. El caso es que, de una manera u otra, Muneyuki-sensei ha logrado que el argumento gane fuerza y la lectura se sienta incluso mejor que antes gracias a todo esto.
Solo puede quedar uno
No obstante, nada de esto importa en lo que vienen siendo los juegos mortales. La premisa sigue siendo la misma: solo puede quedar uno. Asesinar y/o convertirse en el nuevo Dios de la humanidad pasa por sobrevivir a todos y cada uno de los juegos mortales que Kami-sama diseña, ya sea a través de sus súbditos o a través de su propio ‘ingenio’. Por lo tanto, la muerte sigue siendo una crucial del manga. La crueldad, la visceralidad y la violencia son una parte clave del argumento y será así hasta el final de la misma historia.
Como ya he comentado en otras ocasiones, su fuerza recae tanto en el guion como en el arte de Fujimura-sensei. Este último tiene gran parte de la culpa de que As the Gods Will funcione, puesto que tiene un talento descomunal. Es más, se nota que ha mejorado desde el primer episodio hasta este quinto volumen, pues ahora maneja las expresiones faciales con más soltura que antes. Además, su sinergia con el escritor es incluso mejor, produciendo que el manga crezca poco a poco.
Cuando pones todo esto sobre la mesa, y mantienes las referencias de los tomos anteriores (así como sus respectivas reseñas) la conclusión se mantiene, pero gana incluso más puntos. ¿Y cuál es esta? Que As the Gods Will es una lectura muy recomendable. Ese potencial del que tantas veces os hablé ya no existe, puesto que se ha convertido en una lectura terriblemente interesante y en uno de esos mangas capaces de mantener enganchado sin descanso gracias a su particular premisa.
- Sigue siendo tan refrescante como la obra original. Recoge muy bien el testigo.
- Cambia muy hábilmente la perspectiva para darnos un nuevo punto de vista.
- La trama es atractiva y llamativa. Engancha desde el principio.
- Juega y explora la psicología humana como pocos mangas.
- El dibujo sigue siendo tan expresivo y visceral como siempre.
- Es llamativo y único si te gustan el gore y el drama.
- Los primeros personajes se parecen a los protagonistas del manga original.
- Si no has leído el manga original, pierde muchísimo. Es obligatorio leer antes As the Gods Will a secas.
