¿Cuáles fueron las consecuencias de la abducción global de Kamisama para con aquellos que no fueron capaces de asumir tales eventos? ¿De verdad todos los niños de Dios son un grupo de locos capaces de encontrar la diversión y/o el sentido de la vida en una remesa de juegos mortales? Mientras leía el volumen n.º 4 de As the Gods Will: la secuela y preparaba esta reseña, me formulé varias preguntas a este respecto. Y es que, de una manera u otra, parece que todos los supervivientes a los que les gusta tener su dosis de protagonismo en primera plana tienen algo extraño.
En el manga original, nuestros dos personajes principales fueron capaces de hasta divertirse mientras ponían su vida en el filo. En esta secuela, protagonizada por otros caracteres, se repite la fórmula, pero, ¿de verdad es todo el mundo así? Pues lo cierto es que no, aunque nosotros no lo sabíamos… Hasta ahora. Por supuesto, lo inferíamos, pero es gasta este cuarto tomo que vemos a alguien pasándolo realmente mal fuera de los juegos.
Esto se produce tras acabar la primera parte de las pruebas. Tal y como sucedió en As the Gods Will, los participantes tienen algo así como un breve descanso para volver a sus casas, aunque todo forma parte del juego. No obstante, durante este tiempo podemos ver a otro superviviente de los juegos, y obtenemos algunos datos adicionales del mundo fuera de los mismos. Es ahí cuando entendemos que Shun, Akashi, Amaya y Ushimitsu son una excepción incluso dentro del extraño abanico de nombres que aparecen en el manga. ¿Queréis saber más? Os lo cuento tras hablar de la edición.
Reseña del manga As the Gods Will: la secuela n.º 4 | Portada, sinopsis y edición
Tras pelearse con el mejor amigo de su infancia, Yasuto Akashi decide saltarse las clases. Sin embargo, lo que no se imagina es que justo ese día en el instituto comienzan lo que parecen unos juegos la mar de inocentes… Por otra parte, han reunido a todos aquellos que han faltado a clase para concederles una segunda oportunidad y que completen una serie de juegos mientras sus compañeros intentan salir con vida de la siguiente ronda. Desconcertados por la situación, los estudiantes arriesgarán sus vidas para sobrevivir, aunque eso implique dejar de lado su humanidad.
Colección | As the Gods Will parte II vol. 4 de 10 |
Autoría | Muneyuki Kaneshiro y Akeji Fujimura |
Género | Shônen, acción, drama, horror, sobrenatural |
Formato | Tapa blanda con sobrecubierta |
Tamaño y páginas | 13,2 x 17,9 cm con 376 páginas en b/n |
Precio | 15,95 € |
Traducción | Natalia Mintegui (Daruma) |
Fecha de lanzamiento | 05/09/2024 |
Reseñas | Reseñas anteriores |
Como viene siendo costumbre, Distrito Manga ha hecho un gran trabajo en materia de traducción, impresión y maquetación. Sin embargo, a diferencia de la precuela, la secuela se ha lanzado en formato kazenban. Es decir, con volúmenes que ocupan el tamaño de dos de los originales. Es algo así como un 2×1. Esto hace que, aunque encajen igualmente bien, se vean bastante diferentes en la estantería. Del mismo modo, aunque son muy pocos, hay algunos cortes en los límites físicos del manga que rozan algunos diálogos. Por lo demás, el tercer volumen de As the Gods Will: la secuela dispone de una gran adaptación idiomática y, en general, es un producto de calidad.
Empiezan los juegos de verdad
Habiendo dicho esto, podríamos decir que los tres primeros tomos han sido algo así como una introducción para los juegos reales. A fin de cuentas, asistimos a la realización de la ‘última’ prueba… y a la más injusta de todos. Es aquí donde Sein Kami demuestra que de verdad ve al resto de seres humanos como auténtica basura, pues se ríe de todas sus victorias con un juego que es prácticamente un insulto a su memoria.
En el proceso nos deja, como no podía ser de otra manera, algunas de las muertes más inclementes de lo que llevamos de serie. Lo curioso es que se define a sí mismo como el primer escollo, por lo que se infiere que, de alguna manera, tendrán que enfrentarse a él, mas todavía no sabemos como. Lo único de lo que somos conscientes de verdad es que la primera parte del manga ha terminado, puesto que todos tienen que volver a casa y prepararse para la segunda.
No podemos decir que sea una división exacta, pero así se siente, ya que la nueva prueba —solo vemos los primeros compases de la misma— se aleja de todo lo que hemos visto hasta ahora y se presenta en un nuevo emplazamiento. Probablemente, sea el preludio a los juegos finales. Recordemos, pues, que todo esto es poco más que un proceso de selección para todos aquellos que faltaron a clase. O lo que es lo mismo, quienes sobrevivan, pasarán a las pruebas finales. Sí, me refiero a aquellas que empezaron en la precuela del manga y que marcaron ¿el final? de Shun y Amaya.
A muerte contra Dios
Esta situación, todo sea dicho, es la que muestra de manera más evidente que nadie está a salvo. Aunque un personaje haya destacado mucho durante las primeras pruebas, puede morir sin problema alguno. Y no será necesariamente. As the Gods Will es un manga cruel que reduce el valor de la vida humana al mínimo. En comparación con Dios, los participantes son hormigas. Insectos. No, peor: «son basura», y así lo indica de manera más o menos constante. ¿Qué significa esto? Que muchas muertes son anticlimáticas, pero le sienta bien.
Es posible que ese personaje que tanto te gustaba muera porque toma una decisión errada y no tenga tiempo ni de decir «au». Es instantáneo, mortal y cruel. Así son los juegos reales. Ni sacrificios ni historias: solo hay muerte y soledad. Y no hablo del olvido en todos los casos porque los supervivientes los suelen tener presentes, pero a veces ni eso. Cuando tu vida está en juego, el resto de cosas dejan de tener importancia.
En ese sentido, debo decir que As the Gods Will maneja muy bien los tiempos. Si bien es cierto que sigue disfrutando demasiado del poder del guionazo, en general te suele dejar con un buen sabor de boca. Apuesta por algo menos habitual y es capaz de sorprenderte, ya sea con la elección de los juegos o la resolución de determinadas pruebas. Te deja con ganas de más y se disfruta mucho de la lectura. De momento me está gustando bastante y tengo ganas de más.
- Sigue siendo tan refrescante como la obra original. Recoge muy bien el testigo.
- Cambia muy hábilmente la perspectiva para darnos un nuevo punto de vista.
- La trama es atractiva y llamativa. Engancha desde el principio.
- Juega y explora la psicología humana como pocos mangas.
- El dibujo sigue siendo tan expresivo y visceral como siempre.
- Es llamativo y único si te gustan el gore y el drama.
- Los primeros personajes se parecen a los protagonistas del manga original.
- Si no has leído el manga original, pierde muchísimo. Es obligatorio leer antes As the Gods Will a secas.