
¿Qué tendría que pasar para que acabaras matando a otra persona? Verme en la tesitura de dibujar a asesinos en serie me ha hecho plantearme qué haría yo… La respuesta está en esta historia. Así de contundente empieza el manga que protagoniza nuestra reseña de hoy: el volumen n.º 1 de Adabana, la nueva licencia de Distrito Manga. Seguramente, la mayoría de nosotros, o bien no sabríamos que responder, o bien diríamos que solo seríamos capaces de matar a alguien por nuestra madre, por poner un ejemplo. Tal vez podríamos traspasar esa línea si con eso le salvásemos la vida a alguien, pero, ¿hasta qué punto estaría justificado? ¿De verdad seríamos capaces?
Mizuki Aikawa, la protagonista de la historia, sí que lo fue. O al menos eso es lo que parece, puesto que desde un primer momento, NON, mangaka responsable de la misma, juega con el misterio. Así pues, nos encontramos con un thriller que pretende desvelar los secretos tras la muerte de una joven llamada Mako Iharashi. Todo empieza una mañana cualesquiera en la que, sin previo aviso, Mizuki se presenta en la comisaria de su pueblo para confesar el crimen que cometió.
La policía acepta de buen grado de su confesión y dan el caso por cerrado, pero la cosa empieza a complicarse cuando se descubre que todo podría haber comenzado producto de un intento de asalto sexual. Poco a poco, van apareciendo nombres y sospechosos, pero Mizuki sostiene que ha sido ella. No obstante, hay algo que no cuadra. Se comporta de manera extraña, sus expresiones son desconcertantes y los dos abogados responsables de su caso huelen a chamusquina. ¿Queréis saber más? Os lo cuento tras hablaros de la edición.
Reseña de Adabana n.º 1 | Portada, sinopsis y edición

La sosegada tranquilidad de una pequeña aldea japonesa se ve perturbada cuando hallan cerca de un lago el cuerpo cercenado de una joven estudiante, Mako Igarashi. La gente está inquieta y se siente insegura sabiendo que todavía anda un asesino a sus anchas, pero Mizuki Aikawa, una compañera de clase, ¡se declara culpable del asesinato! Sin embargo, a medida que relata los hechos, la policía se percata de que aún hay cabos sin atar y es posible que Mizuki esté encubriendo a alguien más… Pero, ¿qué motivo tendría para hacerlo?
Colección | Adabana vol. 1 de 3 (serie cerrada) |
Autoría | NON |
Género | Drama, misterio |
Formato | Tapa blanda con sobrecubierta |
Tamaño y páginas | 13,1 x 18 cm con 188 páginas en b/n |
Precio | 9,95 € |
Maquetación | Drac Studio (Daruma) |
Traducción | Marc Bernabé (Daruma) |
Fecha de lanzamiento | 04/07/2024 |
Diría que Distrito Manga ha logrado realizar un trabajo bastante notable, pues apenas he visto error alguno en el manga. La maquetación es de buen nivel, la traducción es de calidad y, en general, es un buen producto. Y aunque es cierto que siempre se me puede escapar algún detalle, diría que aquí no hay motivo de queja alguna, por lo que podemos felicitar a la editorial por el resultado obtenido. Dicho esto, empezamos con nuestra reseña de Adabana n.º 1.
¿Quién es el verdadero asesino?

Ahora sí, volviendo al manga como tal, debo decir que Adabana me ha sorprendido muy gratamente con su primer tomo. Tras comprobarlo, he podido ratificar que sea una serie corta, ya que el montante final será de únicamente tres entregas. Y tiene sentido, puesto que este tipo de dramas de misterio suelen funcionar mejor cuando su duración es reducida. Pese a ello, pese a que acabo de empezar con ella, ya me da pena que termine, pues narrativa y artísticamente me ha parecido una auténtica barbaridad. NON tiene un estilo muy único. Se nota que su arte es suyo y de nadie más. Dispone de una personalidad tremenda y transmite mucho.
Además, no descuida demasiados elementos. Las expresiones faciales transmiten muchísimo y cada mirada, cada sonrisa o cada gesto te dicen algo. Los escenarios están trabajados, las transiciones entre escenas funcionan bien y, en general, el constructo general del manga destaca de muy buena manera. Sucede lo mismo con la narrativa. Aunque se maneja a un tempo inferior a lo normal, goza de un gran ritmo. Engancha desde el primer momento y te deja con ganas de más. Vaya, que funciona realmente bien en casi todos sus ámbitos. Tanto es así que, en realidad, no sabría encontrarle demasiados defectos.
Su protagonista, Mizuki, se maneja muy bien en primera plana, y es el motor de la historia. Sus motivaciones, su manera de narrar los acontecimientos, etc. te dejan sin aliento. Quieres. No, perdón. Necesitas saber por qué ha hecho lo que ha hecho o si de verdad ella es la autora de los asesinatos que se desvelan durante este primer volumen. ¿De verdad hizo todo aquello? Por un lado, crees que sí, pues sus facciones y reacciones te hacen pensar de esa manera. No obstante, otros gestos provocan que intuyas justo lo contrario. Lo mejor de todo es que todos son orgánicos y no sientes que NON esté jugando al despiste.
Un misterio que genera genuina curiosidad

Sabes que a Mizuki le ocurre algo y que, si ha asesinado a alguien o está encubriendo a otra persona, tendrá su razón de ser. Desde el primer momento sabes que algo nada mal con ella y/o su familia. En el instituto parece que la acosan, su madre la presiona a un nivel excesivo para que entre a la universidad, no tiene la libertad que una muchacha de su edad necesita… Hay muchos factores que intervienen en su manera de ser y en el hecho de que sea imposible descifrar quién o cómo es de verdad. Así pues, el manga plantea varios misterios.
El primero es quién el asesino de verdad. Aunque Mizuki ha confesado sus crímenes, no se ha resuelto. Eso por un lado. Por el otro, por qué actúa cómo actúa y qué la motiva a seguir ese camino. Seguidamente, su relación con su familia y con Mako. En teoría, era su mejor amiga y su faro de luz. No obstante, cuando habla de su muerte, no parece dolida. ¿De verdad es así? Parece que tiene la realidad alterada y de que tiene algún tipo de dolencia mental que le impide discernir que está bien o qué está mal, pero tampoco lo sabes. Podría ser una enfermedad real o una actuación.
Y es por todo esto que Adabana me ha gustado tanto. Como misterio, aunque maneja algo típico dentro de este tipo de historias, sabe conducir muy bien su trama. Teje hilos muy finos alrededor del argumento principal, dejándote entrever que hay algo más que no podrás descifrar hasta el mismo final de la historia. Personalmente, me ha encantado, y tengo ganas de más. De mucho más. Estoy deseando que salgan el segundo y el tercer volumen, y creo que no puedo ofreceros una mejor conclusión que esa.


- La narrativa es simplemente genial. El ritmo y la trama enganchan.
- El dibujo tiene un impacto tremendo. Transmite muchísimo.
- La historia genera curiosidad desde el primer momento. Es un buen misterio.
- Sus personajes están bien construidos.
- La edición está a la altura.

- No es apto para gente de estómago sensible.
- Maneja temas muy delicados que pueden dejarte con mal cuerpo.