«Batman es el peor superhéroe que hay porque cualquier otro superhéroe puede ganarle muy fácilmente , porque no tiene superpoderes». Os suena, ¿verdad? Todos lo hemos escuchado alguna vez de algún tío que quería hacerse el entendido en una charla sobre cómics . Pues bien ,para la próxima vez que lo oigáis ,tenéis en «JLA – Torre de Babel» el cómic perfecto para darle en los morros a los entendidos.
El cómic parte de hecho con esa premisa : si la Liga de la Justicia se vuelve contra Batman , él (de igual a igual) no podría hacer nada contra Superman , Flash, Green Lantern , Aquaman … Pero ¿qué pasaría si Bruce tuviera en secreto guardados métodos con los que combatir a cada integrante de la Liga en base a sus debilidades?… Ahora la cosa cambia.
Efectivamente, Bruce los tiene y por desgracia la cosa se tuerce y el ecoterrorista Ra’s al Ghul roba los planes de emergencia de Batman para eliminar a la Liga de la Justicia , y así poder llevar a cabo, sin que nadie le haga frente , su plan de exterminar a la humanidad y librar así a la Tierra de la pesada carga de la humanidad que la contamina y agota sus recursos de forma indiscriminada.
La Liga va cayendo poco a poco , Batman sabe que alguien ha robado sus planes y que sea quien sea hay que pararlo rápido . Mientras la Liga va cayendo miembro a miembro, Bruce se plantea si contarlo o no a los demás integrantes de la Liga , que desconocen que existan tales planes de contingencia .
Lo que hace de esta una obra inteligente y bien planteada es en parte la forma que Batman tiene para acabar con los miembros de la Liga : Mark Waid investiga de forma brillante las debilidades de la Liga y las combina con elementos propios del murciélago para crear la forma de acabar con la posible amenaza.Un ejemplo es la forma de contención para Aquaman: Aquaman se vuelve acuafóbico debido a una forma alterada de la toxina del miedo de El Espantapájaros . Sin agua, moriría en cuestión de horas.
O la más espectacular de todas , la de Superman, consistente en que su piel se vuelve transparente después de la exposición a la kryptonita roja, una creación artificial de Batman hecha mediante la exposición de una muestra de kryptonita verde a la radiación, desarrollada para parar a Superman por un tiempo en lugar de realmente matarlo. Como Superman es alimentado por la energía solar, la transparencia de su piel provoca una sobrecarga sensorial por la exposición directa de sus órganos internos a la luz solar sin su piel como un filtro solar apropiado, hasta el punto de que puede oír las conversaciones en la Tierra mientras se encuentra en la Luna. Fórmulas de contención que solo sería capaces de idear el detective murciélago (y parece que Mark Waid también).
Cabe destacar también que esta obra tiene su propia película animada llamada «Justice League: Doom» y que ,por lo poco que he visto, parece que solo coge del cómic la premisa y el resto se lo pasa bastante por el forro. Habrá que echarle un ojo.
Para mí es la obra culmen tanto de la Liga de Justicia como de Batman ,que estaba en un momento de esplendor en la época en la que fue escrito el cómic, y que Waid supo utilizar de una manera magistral , creando un clásico moderno. Un 10 de cómic .
Pablo Sierra.
