En Japón también existe el sexo. Reseña de Una historia de almas gemelas n.º 4

Cuando piensas que Anashin va a tomar una ruta, de repente te sorprende y va por una dirección completamente opuesta. Y funciona. No es que decida tomar un camino u otro porque quiera sorprender a los lectores con algo inesperado. Se nota que cada decisión que toma tiene su razón de ser. A fin de cuentas, a nivel narrativo funciona muy bien. La historia es coherente y tiene sentido. Funciona, así que esta dinámica es algo que valoro de forma positiva. Por supuesto, esto no es lo único que quiero destacar del manga durante mi reseña del manga Una historia de almas gemelas n.º 4.

Otro de los puntos que me gustaría resaltar es lo bien que resuelve determinadas subtramas para ir abriendo otras nuevas. En general, podemos decir que Anashin maneja la relación Entre Iori y Yuki de manera muy natural. Sin dejar a un lado el lado ficcional de toda buena historia de amor. De hecho, a medida que avanza la lectura, entiendes más que nunca por qué se engloba dentro del género de los slice of life.

En cierto modo, Una historia de almas gemelas es un relato de realidad con ciertas peculiaridades argumentales. Es decir, se maneja en el día a día de una pareja recién formada, aunque desde una perspectiva un tanto más histriónica. No tiende al exceso ni abusa de las singularidades tiípicas de un romance dramático, pero tampoco se deja llevar por el paroxismo habitual de los slice of life.

En cierto modo se encuentra un poco a caballo entre estos. Se acerca más a los slice of life, pero coge un poco de los dramas románticos a través de la presencia de terceros en discordia, discordias familiares, etc. En general, la construcción funciona, ya que acaba produciendo una lectura bastante interesante y entretenida. Es disfrutable de principio a fin, siendo esta una de sus grandes virtudes. ¿Queréis saber más? Os lo cuento tras hablaros de la edición.

Reseña del manga Una historia de almas gemelas n.º 4 | Portada, sinopsis y edición

Cuando Yûki se entera del rumor de que Iori siempre ha estado enamorado de una chica, corre a su lado para decirle que ella lo apoyará en cualquier decisión que tome, pero entonces descubre que todo ha sido un malentendido y… ¡¿Iori la atrae entre sus brazos?! Por si fuera poco, tras conocer el amor incondicional de Yûki por él, algo empieza a despertar también en Iori.

Como norma general, la edición es buena. La traducción es de calidad, la maquetación es de alto nivel y el material empleado responde a nuestras expectativas. Distrito Manga ha hecho un buen trabajo y este cuarto tomo nos ha dejado con buenas sensaciónes. Eso sí, tiene algunas zonas con un poco de moiré.

El amor también es sexo

Dicho esto, y continuando con la reseña en general, debo decir que Una historia de almas gemelas es un romance que sabe que en el amor también hay sexo. Lejos de las historias típicas en las que los personajes tardan 30 volúmenes en darse la mano, otros 30 en darse un beso y dedican otros 30 más a sonrojarse cada vez que se miran, aquí tratan el amor de manera mucho más real. No se andan con tantos rodeos y hasta abordan la cuestión de las relaciones sexuales.

Es algo que valoro de manera positiva por dos razones. Por un lado, porque se trata de manera muy natural. No es un tema tabú ni una cuestión prohibida. Es algo más dentro de una relación con muchos matices. Por el otro, me gusta en el sentido de que no lo esconden, mas no es explícito. Te deja caer algunas escenas con algo menos de ropa, pero no cae en el recurso fácil del ecchi.

Anashin lo maneja bien, aunque no es lo único. En general, Yuki e Iroi están viviendo una historia muy humana. Y no lo digo porque esté muy atento a los detalles o maneje bien temas sensibles, que también, sino porque podrías encontrarte algo así en la vida real en miles de parejas. Esto habla muy bien de la construcción de los personajes. Por suerte, no aplica únicamente a nuestra pareja principal, sino que es algo que también podemos extrapolar a otros.

Celos, inseguridades, felicidad, sobresaltos…

En estos momentos, diría que el hermano de Yuki, a quien ya vimos en el tercer volumen, es el que menos responde a este detalle. Su construcción es algo más errática. Seno también se siente así por momentos, siendo otro personaje que necesita algunos matices más antes de encajarnos del todo. Puede mejorar. Pese a ello, el resultado final es bastante bueno en términos generales.

Dicho esto, hay otra cosa que Una historia de almas gemelas maneja bastante bien: el lado oscuro de una relación y la forma de enfrentarse a los problemas. Iori tiene su pasado, mientras que Yuki no tiene mucha experiencia en relaciones. Sabiendo esto, no solo entendemos que a veces tenga dudas sobre cuestiones concretas y necesite consejo, sino que además es algo muy humano. También que no sepa cómo gestionarlas.

No obstante, en este tipo de situaciones, los dramas románticos suelen enredarlo todo de manera innecesaria. Una historia de almas gemelas no. Aborda el tema de manera mucho menos tóxica y exagerada, mas no por ello pierde interés. Sigue siendo una lectura entretenida sin la necesidad de liarlo todo en exceso para que nos acabemos preguntando cuando pondrán en común sus protagonistas todos sus problemas. No te vuelve loco con giros innecesarios, cosa que también se agradece.

• El dibujo es realmente bonito.
• La historia es entretenida.
• El triángulo amoroso que presenta tiene bastante potencial.
• El ritmo y la narrativa funcionan a buen nivel.

• Sigue abusando de ciertos tópicos del género que ya conocemos de sobra.