
Tiempo atrás os conté que Salamandra estaba publicando una nueva edición de Harry Potter con ilustraciones de Xavier Bonet. En efecto, la editorial quiso regresar al mundo mágico de J.K. Rowling junto a un ilustrador español y el resultado final fue muy bueno. Solo fueron las dos primeras, pero no se han detenido ahí, ya que de otra manera no os podría seguir hablando de esta en mi reseña de la novela ilustrada de Harry Potter y el Prisionero de Azkaban.


Los dos primeros volúmenes llegaron en junio de 2024, mientras que la tercera entrega hizo lo propio en octubre de ese mismo año. De momento, la cuarta entrega sigue en espera, pero esperamos que llegue más pronto que tarde. Entretanto, podemos regresar a Hogwarts con la que podría ser una de las ediciones más bonitas hasta la fecha.
Al menos desde mi perspectiva personal. Y eso que en realidad es muy sencilla, pero ahí radica parte de su encanto. Lo primero que destacaría de esta nueva edición es la portada. En los tres libros es simplemente preciosa, y es que el estilo de Bonet encaja muy bien con el universo de HP.
Tiene un aire desenfadado que encaja realmente bien con el estilo de las primeras novelas. Tanto la portada como la contraportada y el lomo destacan por su buena presentación. Por supuesto, no es lo único que trae consigo esta edición, aunque sí que diría que es de lo más llamativo.
Novela ilustrada: reseña de Harry Potter y el Prisionero de Azkaban


Cuando abrimos el libro, podemos percatarnos de que la edición es buena. Los materiales empleados son de calidad y la maquetación es sobria. Teniendo en cuenta la dilatada carrera de Salamandra, tampoco es que nos sorprenda. No obstante, hay que destacarlo.
La traducción, por supuesto, sigue siendo uno de los puntos fuertes del libro, y es que la adaptación idiomática es sobresaliente. Dicho esto, cuando avanzamos por el libro, vamos encontrando algunas ilustraciones.
Tal y como me pasó con las dos primeras novelas, me quedó con ganas de algo más. Hay menos de una decena, y es por esto que pienso que unas cuantas más le habrían sentado bien.

Todo sea dicho, cada capítulo viene encabezado por el retrato de algún personaje y en los límites de las páginas hay pequeños esbozos de arte que le dan bastante personalidad. Son líneas interiores que le dan un acabado un poco diferente al habitual, pues no son páginas sin más.
Tienen un ligero toque decorativo bastante encantador que le otorga bastante personalidad, cosa que considero un plus. Es una manera de agregarle algo más de magia a una saga con la que muchos de nosotros hemos crecido.
Además, es un poquito más barato que los primeros libros debido a que la tercera entrega es algo más corta. En lugar de establecer un precio fijo, Salamandra lo adapta a la extensión. Así pues, el tercero cuesta 20,95 euros por sus 288 páginas, el segundo son 21,95 a cambio de 320 páginas y el primero cuesta 24,95 por 384 páginas.
Conclusiones

En general, la relación calidad-precio (teniendo en cuenta que es en formato tapa dura) está bastante bien ajustada, por lo que no tengo demasiada pega en ese sentido. En resumidas cuentas, he terminado bastante satisfecho con este libro como producto.
Como lector, ya sabía que me gustaría, pues lo disfruté allá en su momento y ahora lo he vuelto a hacer, aunque desde una perspectiva diferente. Si te gusta Harry Potter y estás buscando una nueva edición, esta es una de las más recomendables en estos momentos junto a la interactiva.


- Las ilustraciones son preciosas.
- La edición es realmente buena.
- La relación calidad-precio está bien ajustada.
- Tiene portadas y contraportadas realmente bonitas.

- De momento solo están disponibles las dos primeras.