
As the moon, so beautiful
Aunque quizás un poco tardías, hoy os traigo las primeras impresiones de una de mis series más esperadas de la temporada: Tsuki ga kirei. Si bien las serie románticas de instituto han sido muy explotadas durante estos años, había algo en este proyecto que realmente llamaba mi atención. No sé si su particular paleta de colores o el tono «Shinkai» —poético— de su tráiler, pero había algo. Con tanta secuela, reboot y remakes, una historia original de amor llamaba, ciertamente, mi atención. Y a por ella me lancé.
Tsuki ga kirei nos narra la historia de dos estudiantes de instituto. Ambos parecen gustarse, pero ninguno se decide a dar el paso.la serie nos narra una etapa de la vida un poco confusa en la que existe una presión social por crecer y elegir un camino. Se trata de la apuesta del estudio feel. de esta primavera.
Primeras impresiones
El estudio feel. es, sin duda, experto en romances de instituto —véase Oregairu 2 o Mayo Chiki!—. Sin embargo, mientras en muchos de sus trabajos tiran por el lado más cómico y ecchi, en Tsuki ga kirei toman un rumbo bastante diferente. El anime, desde el principio, deja muy claro que su tono va a ser totalmente cotidiano y tranquilo. Nada de bromas sexuales, dramatismos —en principio— exagerados ni fantasía metida con calzador.
Animación y coloreado
La animación de este serie supone una de sus bazas más destacables. El motivo es simple: combina de forma muy acertada el uso de animación por ordenador y de animación tradicional. Esta última está reservada a primeras planos y personajes importantes, mientras que la computarizada se emplea en figurantes. Los fondos de la serie combinan a la perfección con los personajes y ayudan a la inmersión del espectador en ese «universo» realista sobre la adolescencia japonesa.
La paleta de colores, por su parte, es muy rica y variada. Generalmente, la serie viene acompañada de tonos fríos, muy en la tónica de la serie. Además, el coloreado es sumamente personal: los personajes presentan una ligeras líneas blancas en los bordes, dándoles a estos un toque «artesanal» y especial que dota a la serie de una personalidad estilística muy poco común en la mayor parte de series anime.
Personajes
En la composición de la serie, el retrato de los personajes resulta, en general, adecuado y coherente. Nuestro protagonista masculino, Kotarou, es un joven aspirante a escritor muy soñador. La protagonista femenina, Akane, es una joven deportista algo confusa sobre su futuro. Entre ellos se forja una relación muy especial y afectiva que, en cierto modo, les hará avanzar y madurar. Quizás ambos carezcan de carisma o de un rasgo muy particular, pero a medida que los vamos conociendo, reconocemos en ellos una gran humanidad y peculiaridades sutiles. Por ejemplo, hay ciertos momentos en los que ambos conversan a través de una aplicación de móvil y temen constantemente no ser pesados y molestar al otro. ¿A nadie le suena eso?
Personajes secundarios
Pero no nos olvidemos del resto del elenco. Tsuki ga kirei cuenta con un amplio, variado y muy divertido abanico de secundarios. Las amigas de Akane, sin ir más lejos. Todas ellas, de un modo u otro, aportan una visión diferente y femenina de la realidad. No porque sean pretendidamente diferentes entre sí, sino porque cada una vive una situación distinta. En el caso de los personajes masculinos, las intervenciones son más bien escasas, pero sirven para dotar al ambiente de movimiento —los amigos de Kotarou— o despertar al protagonista curiosidad intelectual —el librero—.
Mención especial merecen los cortos que pueden verse al final de los capítulos. Estos, de apenas 20-30 segundos, son protagonizados por los personajes secundarios. En ellos se construyen gags con un humor simple, pero muy efectivo. Resultan un aire de lo más fresco que equilibra la serie con su poética dramática. Por eso, si veis la serie, quedaos hasta el final, porque no os arrepentiréis.
P. D. Mis favoritos, sin lugar a dudas, son los cortos de Miu e Inaba. Hacía tiempo que una serie de este tipo no me sacaba una sonrisa cómplice e ingenua.
En definitiva…
¿Recomiendo Tsuki ga kirei? Después de todo lo dicho, evidentemente, sí. Creo que es una serie muy humana, amena y divertida. Toca temas como la madurez, el amor —amistoso, no correspondido, de pareja— o la falta de aspiraciones. Se trata de un anime fresco más cercano a los filmes de Makoto Shinkai que del shōjo estándar. Además, la serie tiene guion original —lo cual es bastante raro actualmente— y su número de episodios final no está decidido, de modo parece que la serie contará con cierta «libertad creativa». Un dato, en mi opinión, bastante positivo y que puede favorecer la calidad del producto.
Podéis ver la serie gratuitamente a través de la plataforma Crunchyroll. Así que… ¡no hay excusas! Esperamos que os hayan gustado estas impresiones y que os anime a darle una oportunidad a esta serie.
Tráiler
Sinopsis
Kotarou Azumi y Akane Mizuno se vuelven estudiantes de tercer año de instituto y son compañeros de clase por primera vez. Con la llegada de su último año en el instituto, el grupo debe madurar y afrontar los cambios que están por venir.