¡Hola, muy buenas amantes de los videojuegos! Regresamos con un nuevo análisis. En esta ocasión hablaremos de alguien vive en una piña debajo del mar. En efecto, nuestro protagonista del día será Bob Esponja con su Spongebob Squarepants Battle For Bikini Bottom Rehydrated. Desarrollado por Purple Lamp Studios y editado por THQ Nordic, supone el regreso de un título nacido en los albores de 2003. Sí, mis queridos lectores: es un remake de un proyecto multiplataforma con toques de acción, aventura y plataformeo.
Spongebob Squarepants Battle For Bikini Bottom Rehydrated
Armado con un nombre que haría temblar hasta a los más versados estudiosos de la lengua de Shakespeare, Spongebob Squarepants Battle For Bikini Bottom Rehydrated nos transporta al mundo de Bob Esponja y sus amigos. Fondo de Bikini, sempiterna fuente de incongruencias lógicas y narrativas, ha regresado. No obstante, lo hará azotada por un nuevo y peligroso enemigo: los malvados robots de Plancton, el villano de siempre. Una infastuosa horda de enemigos mecánicos se pasea por el lugar como quien no quiere la cosa. Por desgracia, Bob piensa que es culpa suya, así que será fácilmente engañado por el ¿científico? loco del lugar.
La realidad es que Plancton ha creado una extraña máquina llamada Duplicatotron 3000. Como ya habréis podido imaginar, suya es la responsabilidad, pues tiene la capacidad de crear nuevos robots sin parar. ¿El problema? Que tiene activada la función —como recurso narrativo es paupérrimo— de no obedecer a su creador. Así pues, y en cuestión de un solo día, la ciudad y sus alrededores son destrozados por el ejercito de Duplicatotron. Si bien es cierto que no cabría esperar otra cosa de un juego de Bob Esponja, el guion no está bien hilado. Esperábamos una historia infantil (no jugué al original), claro está, pero… La serie tenía sus cosas, pero era mucho más sólida.
Y eso ya es decir. Bueno, volviendo al tema que nos acontece, Bob y sus amigos se lanzarán a la aventura para detener a Duplicatotron 3000. En el proceso visitarán algunos de los lugares más emblemáticos de la franquicia, se encontrarán con viejos amigos y lucharán contra algunos «enemigos» clásicos de la serie. Al final, es una especie de viaje por los recuerdos para los más nostálgicos y/o una aventura junto a nuestros personajes favoritos para los amantes de la serie y los más pequeños de la casa. Con su toque de humor, y una trama algo forzada, debemos ser conscientes de a que público está dirigido. No es, por si había alguna duda, un juego cuyo target sean avezados pro players sedientos de desafío, historias y gráficos.
De regreso a Fondo de Bikini
Inevitablemente, aunque con una calidad muy inferior, Spongebob Squarepants Battle For Bikini Bottom Rehydrated nos ha recordado a Super Mario 64. Inclusive, su preferís una comparativa más reciente, a Super Mario Odyssey. Al caso: la idea es sencilla. Un mundo compuesto por diversas zonas a las cuales solo podremos acceder reunión una cantidad determinada de espátulas de oro. Para ello no solo tendremos que cumplir con nuestra buena dosis de plataformeo, sino que tendremos que derrotar a ciertos enemigos, ayudar a nuestros amigos y cumplimentar otras tantas tareas. No es obligatorio hacerlo todo, pero los completistas tendrán cierta variedad con la cual alimentar su ego.
Al final, empero, el juego presenta una dinámica bastante sencilla. Las espátulas sirven para desbloquear puertas cerradas o llamar a un taxi que nos lleve a una nueva zona. No será, eso sí, el único «coleccionable». Para empezar, podremos recopilar una serie de ¿cosas? —no sé como explicarlo— con varios colores. Cada una tiene un valor diferente, pero en el computo global todas son lo mismo. La idea es que funcionen como una suerte de monedas con las que desbloquear caminos cerrados dentro de una zona, comprar espátulas, etc. Otro de los coleccionables de los cuales dispondremos serán los calcetines sudados de Patricio. Aunque parezca asqueroso, casa muy bien con la idea de Bob Esponja como franquicia.
Si reunimos la cantidad suficiente, Patricio nos dará una espátula, lo cual es un poco tontería cuando el mismo nos está acompañando. De estas hay varias: incoherencias narrativas que se justifican por el simple hecho de que quieren que juguemos con personajes que antes no estaban. Así es, me he informado: en el juego original, al parecer, solo podíamos controlar a Bob. Ahora no. Ahora hay más personajes y funciones, por lo que el gameplay debería ser más completo, complejo y divertido que antaño.
Plataformeo básico
En lo que se refiere a su jugabilidad, pues es un juego —perdón por repetirme tanto en este término— simple. Como en cualquier juego del estilo, dispondremos de un ataque básico y un salto doble. La nota curiosa es que, en función del personaje, tendremos un tipo de habilidad u otra. Bob, por ejemplo, puede saltar entre paredes o realizar un ataque en ascenso o caída. Ah, también puede convertirse en pelota… o algo así. Es raro. Patricio, por su parte, tiene la capacidad de coger sandías o cajas (hay cajas que podemos destrozar para conseguir «monedas», lo cual nos ha recordado a Crash Bandicoot por las mecánicas de algunas de ellas) y lanzarlas contra diversos objetivos.
El juego posee cierta variabilidad para buscar que sea algo más entretenido, pero en mi caso me he aburrido bastante. Siendo sincero, me ha costado seguir jugando tras poco más de una hora con mi PlayStation encendida. Es duro, pero me repito: no somos su público objetivo. O al menos eso creo. Recuperando el hilo de mis palabras anteriores, dispone de un gameplay bastante lineal, pero con ciertos dejes de exploración. No es, ni mucho menos, un sandbox, mas nos otorga cierto grado de libertad a la hora de explorar los escenarios. No está mal, la verdad. Además, el juego —aunque no goce de una gráfica impresionante— es bastante colorido. A su modo, inclusive, es bonito.
El problema es que tiende a ser demasiado repetitivo. La música, por su parte, es casi siempre la misma; termina poniéndote nervioso. Sucede lo mismo con los enemigos. Los hay de distinto tipo, pero al final termina siendo lo mismo una y otra vez. Los jefes finales, o de fase, siguen la misma tónica. No tienen mecánicas especialmente complejas y, aunque puedan ponerte en algún que otro apuro, terminan siendo bastante sencillos. Como consecuencia, nos encontramos ante un título sin demasiadas pretensiones no exento, eso sí, de puntos fuertes.
Análisis de Spongebob Squarepants Battle For Bikini Bottom Rehydrated, conclusiones
Spongebob Squarepants Battle For Bikini Bottom Rehydrated tiene un guion bastante flojito, un gameplay sencillo y una banda sonora un tanto molesta. Su diseño es agradable, muy colorido, que gana enteros gracias a su relativa capacidad de exploración. De humor burdo, no puedes esperar algo diferente a la serie original, aunque peor. Hay que ser conscientes de que su target es un público infantil. Eso, o eres un fan muy acérrimo de la saga. Con todo, puede ser entretenido, pero depende. Yo me he aburrido, no os voy a mentir, pero también es verdad que nunca he disfrutado mucho de la serie. Para gustos, colores.
Análisis Spongebob Squarepants Battle For Bikini Bottom Rehydrated. Clave de juego para PS4 por Dead Good Media.
