¡Hola, muy buenas amantes de los videojuegos! Regresamos, una vez más, con un nuevo análisis. En esta ocasión os hablaremos de Sword Art Online: Alicization Lycoris, un ARPG basado —directamente— en la obra de Reki Kawahara. Para quienes no lo sepan, SAO es una muy popular franquicia de novelas ligeras con multitud de adaptaciones; series de animación, mangas, etc.
No obstante, y desde hace varios años, Bandai Namco propuso su adaptación a consolas. Varios años más tarde, y tras no pocos lanzamientos, nos encontramos con Alicization Lycoris, quien ostenta el honor de ser su proyecto más ambicioso hasta la fecha.Ha sido desarrollado por el estudio Aquria, nos traslada a un nuevo universo de fantasía de ciencia ficción en donde Kirito y compañía harán de las suyas.
El regreso de Kirito
Ahora bien, ¿quién es Kirito? Si no conoces la respuesta, es muy probable que este no sea juego para ti. No por nada, Sword Art Online: Alicization Lycoris es una secuela directa de una obra muy extensa. Así pues, si te llama la atención por su estética o su jugabilidad, te recomendaría —antes de nada— que te pusieses un poco al día con sus series de animación y/o juegos anteriores. Dicho esto, todos somos conscientes de la sempiterna realidad de SAO: se ha convertido en una de las series más queridas y más odiadas por parte del público. Empero, creo que esta segunda vertiente más a la vertiente populista (válgase la redundancia) de «odiar» lo popular.
Porque, siendo sinceros, Sword Art Online pegó muy fuerte en su momento. Para bien o para mal, se convirtió en una de las grandes referencias del anime y el manga. Siendo sincero, nunca entendí el motivo de semejante hate. Bueno, sí lo sé: la gente adora criticar lo mainstream sin darse el placer de conocerlo. En mi caso, la verdad, no soy un devoto amante de la franquicia, pero tampoco me desagrada hasta el extremo. Volviendo al tema que nos acontece, Sword Art Online: Alicization Lycoris se encuentra disponible en PlayStation 4, Xbox One y PC. ¿Y Nintendo Switch? No hay noticias sobre su lanzamiento. Dicho esto, comencemos.
Sword Art Online: Alicization Lycoris
Vayamos por partes. En primer lugar, la historia. Sword Art Online es una saga con un lore interno muy extenso. Así pues, la primera conclusión que obtuve al jugar es la siguiente: necesitas conocimiento previo. Aquria, en una decisión muy acertada, no resume los eventos del pasado. Espera, ¿eso es bueno? Sí. Son tantos que sería una tontería intentar hacer una síntesis de eventos pasados. De esta forma, Alicization te exige saber quién es Kirito y qué ha pasado con anterioridad. De otra forma, pierde fuerza. Si lo miramos con tranquilidad, es muy lógico; no por nada, el juego está dirigido a quienes se consideres seguidores de las novelas ligeras, el anime o el manga.
Dicho esto, ¿qué podemos esperar de su argumento? Para empezar, un guion mucho más fiel a la obra original. Si has jugado a cualquiera de los lanzamientos anteriores, sabrás que solían tomar el universo como referencia para una historia nueva. Por suerte, con Sword Art Online: Alicization Lycoris se ha optado por un rumbo muy distinto. No digo que los anteriores sean malos —al contrario, los hay muy buenos—. Lo que digo es que le ha sentado genial: la trama es más sólida, la narrativa tiene más cohesión y los personajes secundarios son mucho más interesantes. A grandes rasgos, Lycoris es mucho más compacto que sus predecesores. No sorprende tanto, claro está, pero hace bien las cosas.
Sin incurrir en la breva del spoiler, Kirito se verá transportando a un nuevo mundo de realidad virtual. Cómo no, estará atrapado, lo cual es un tanto repetitivo. Salvando las distancias con Aincrad, el espadachín negro se dispondrá a investigar que está sucediendo para así poder escapar. La idea principal es esa, aunque habrá más de una sorpresa. A grandes rasgos, no presenta grandes diferencias con la obra original, pero tiene un par de ases bajo la manga.
Rol de mundo abierto
En otro orden de cosas, su jugabilidad. Sobre el papel, Alicization Lycoris es un ARPG de mundo abierto. Como tal, podremos explorar cuasi cualquier porción de mapa sin la necesidad de seguir la historia principal. En la comparativa con otros juegos de la franquicia, es el más completo de todos. Los escenarios respiran vida y están cargados de contenido, desde cuevas y mazmorras hasta cascadas pasando por bosques, lagos, praderas, etcétera. La cuestión del mundo abierto no es nueva en SAO, pero sí a este nivel. La sensación de vacío que habría cabido esperar a tenor de los precedentes se ha desvanecido por completo. Otra cosa no, pero se ha trabajado mucho en crear un mundo variado y diverso.
En ese mismo sentido, además de una serie de misiones principales, tendremos cadenas secundarias y/o minijuegos. Además de puntos de guardado y postes de viaje rápido, el juego recoge las principales características del género y las hace suyas, pero desde una perspectiva más personal. Para empezar, contaremos con un par de ataques básicos, un movimiento de esquiva, etc. Lo básico, vamos. Esto combinará con tres tipos de habilidades, por así decirlo. En primer lugar, nuestra habilidad con el arma en cuestión. Como en cualquier RPG, podremos modificar nuestro equipamiento; habrá distintos tipos de armadura, accesorios o armas.
Todas y cada una de estas tendrá sus propias estadísticas e, inclusive, habilidades pasivas especiales. En consecuencia, nuestro equipamiento influye directamente en nuestro estilo y rendimiento. Al mismo tiempo, tendremos maestría. Es decir, cuanto más usemos un arma, más experiencia con ella tendremos. A más nivel, mejores efectos tendrá. La progresión es una constante. Esto lo podremos combinar con cuatro habilidades activas, las cuales podremos ir cambiando, y hasta cinco habilidades pasivas, ligadas al personaje como tal. Es interesante, ya que habrá una variedad relativamente amplia.
Una nueva realidad virtual
Como curiosidad, no siempre tendremos que manejar a Kirito; podremos cambiar de personaje en mitad del combate si así lo queremos. Esto le otorga cierta profundidad al gameplay, aunque tampoco es nada del otro mundo. Más interesantes son sus opciones de multijugador online. Por desgracia, no funcionan de la forma que deberían: el imput lag es algo que no hemos podido ignorar, pues es bastante notable. Volviendo al tema que nos acontece, las habilidades. Estas se desbloquean mediante puntos de habilidad que ganaremos al ir cumpliendo misiones. De esta misma forma obtendremos artes sagradas, las cuales se componen de elementos tales como el fuego, el agua o el viento.
No serán nada del otro mundo, pero ahí están. El combate se completa con un sistema de peligro que aumenta al atacar. Si lo conseguimos llenar, el enemigo se queda paralizado. Por otro lado, el riesgo. Si llenamos esta segunda, aumentaremos el daño. Es algo que, salvando las distancias, ya hemos podido ver en títulos recientes tales como Final Fantasy VII Remake. ¡Ah! Que no se me olvide. Tendremos una barra de vida y una barra de «magia». Esta segunda se compone de PE. Estos se agotan al usar habilidades especiales y se recuperan usando ataques normales.
Sobre el papel, Sword Art Online: Alicization Lycoris podría ser el mejor juego de la franquicia. Y más si tenemos en cuenta su bonito apartado gráfico. Los escenarios, sin abandonar la animación nipona como fuente de inspiración, y en comparación a juegos anteriores de la franquicia, son más hermosos que nunca. No solo están cargados de detalles, sino que son muy agradables a la vista. Inclusive, en una decisión que podría ser controvertida, crean un fuerte efecto de contraste con los personajes, pues estos segundos se acercan todavía a esa idea de anime. Habrá a quien no le guste, es cierto, pero una vez te acostumbras, asombra. Así pues, me repito en mis palabras: sobre el papel, Sword Art Online: Alicization Lycoris podría ser el mejor juego de la franquicia, pero…
Un proyecto demasiado ambicioso
El gran damnificado en todo esto no es otro más que el rendimiento: Alicization Lycoris no está bien optimizado. Nosotros lo hemos jugado en PC, así que partimos con algo de ventaja respecto a las versiones de consola, pero… Sin olvidarnos del imput lag del online, encontramos otra serie de problemas importantes. Para empezar, no tiene la fluidez que requiere un juego de acción; hay caídas de frames, tiempos de carga demasiado largos y texturas que aparecen de golpe y porrazo. Sea por la razón que fuere, el juego no está del todo pulido. Además, falta precisión en los controles… Se siente lento.
Esto se da en la exploración, aunque también en algunos combates. Es una pena, pues de otra forma podríamos hablar de un sobresaliente. Pero no lo consigue. A cambio de un mejor acabado gráfico y de un mundo riquísimo en detalles se ha sacrificado rendimiento. Esta situación se da, principalmente, en consola. Por el lado contrario, cuando lo he jugado en ordenador, el sentimiento ha sido muy distinto. Aunque he seguido detectando algunos de estos errores, el rendimiento era notablemente superior. El imput lag es cuasi inexistente, es mucho más estable, es más fluido y hay pocas caídas de frames. Así pues, la principal pega de este título, a nivel de rendimiento, es en el plano de las consolas.
Conclusiones
Un juego para fans. Esa la primera conclusión. La segunda es sencilla: un juego recomendable, sí, pero que se queda a medio camino por sus problemas de rendimiento. Es una pena, pues el juego sería estupendo de otra forma. No podemos olvidarnos, eso sí, de sus bondades: un mundo abierto muy rico en escenografía y enemigos, un sistema de equipamiento interesante y una narrativa entretenida. Es un buen juego. ¿Lo recomendaría? Solo si eres seguidor de la franquicia. De verdad que me parece una pena que la jugabilidad se resienta tanto por los problemas de rendimiento. Si aún así te sigue llamando la atención, te recomiendo que optes por la variante de PC, pues el rendimiento es mejor.
