The New York Post anunciaba hace unos días la posible adaptación teatral de True Blood, la exitosa serie de HBO.
Los rumores indican que detrás del plan está Allan Ball, creador de la serie. La obra sería dirigida por Pam McKinnon, ganadora de un Tony en 2013 por ¿Quién teme a Virginia Wolf? El guion vendría de la autora Elizabeth Scott y la música de Nathan Barr, que ya compuso para la serie. Los papeles protagonistas para el musical podrían tener ya nombres y apellidos: Ellen Foley, Ann Harada y Claybourne Elder.
Al igual que en la televisión, el musical de True Blood se centraría en Bon Tempos, un pueblo de Louisiana donde vampiros y demás criaturas sobrenaturales como brujas, hadas o lobos, han de convivir abiertamente con los humanos. Muy característico de la ficción es la tendencia de estos seres a disfrutar de la vida plenamente y, sobre todo, del sexo. No sabemos cómo tratarán el musical, pero sí corren rumores de lo divertido que resulta.
Por otro lado, un pro y, a su vez, un contra, lo tienen en la cantidad de efectos especiales necesarios. ¿Podrán alcanzar el nivel exigido en la actualidad por el público? ¿Conseguirán lucirse o, por el contrario, se convertirá en un espectáculo grotesco y ridículo?
Si nos enfocamos en los antecedentes de vampiros en Broadway, observamos claramente como resultaron una decepción. Vimos Lestat, el musical basado en Entrevista con el vampiro de Anne Rice con música de Elton John. Éste se estrelló y sólo tuvo 39 representaciones en 2006. También vimos Dance of the vampires, el cual llegó a generar pérdidas de 10 millones.
Lo que está claro es que la True Blood de televisión fue todo un éxito. Podemos hablar prácticamente del pilar de la HBO antes de la llegada de Juego de Tronos. Seguramente si esta noticia llega a hacerse oficial muchos estarán entusiasmados y otros muchos, como poco, curiosos.
En mi caso, aunque me declaro fan de la serie, estoy más en el segundo punto que en el primero. No termino de ver el sexo y la violencia envuelto en cancioncitas pero, quién sabe, quizás me sorprenda.