Si hay algo que me ha quedado claro durante mi reseña del volumen n.º 4 de Correspondencia desde el fin del universo —y con las anteriores también, en realidad— es que estoy ante un manga, cuando menos, bastante raro. Sin duda, es una de las historias más particulares que he visto en mucho tiempo, pues no parece conocer límites. tanto para lo bueno como para lo malo, se atreve casi con cualquier idea que pueda justificar (medianamente) mediante los preceptos básicos de la ciencia ficción.
O al menos así debería ser, puesto que en ciertas ocasiones es capaz de ir más allá a través de una figura bastante misteriosa: la del ser supremo. Este ser del que ya he hablado en otras ocasiones vendría a ser la encarnación de los conceptos de Dios, Buda o Alá, por poner algunos ejemplos. O lo que es lo mismo, es la deidad creadora que dio forma a la especie humana y a otras muchas razas alienígenas en los albores del tiempo.
Ahora «disfruta» de su cruento retiro, observando como sus «hijos» continúan con su legado mientras se digna a destruir aquello que no le gusta. Véase, por ejemplo, arrasar un planeta con un meteorito simple y llanamente porque sus habitantes ya no le divierten. O la de crear criaturas capaces de crear el caos más absoluto alrededor de toda la galaxia en favor de su disfrute.
Omnipotente y omnipresente, es quien nos ofrece uno de los giros argumentales más bestias de Correspondencia desde el fin del universo. Tanto es así que, si os soy sincero, no tengo ni idea de cómo acabará la historia, aunque el próximo tomo vaya a ser el último. Me ha dejado completamente descuadrado, pero en el buen sentido. Es decir, que tengo mucha, mucha curiosidad.
Reseña de Correspondencia desde el fin del universo n.º 4 | Portada, sinopsis y edición
Marco, un estudiante universitario ruso, fue obligado a distanciarse de su amada durante diez años. Tras mucho esfuerzo, por fin, recupera su corazón raptado por los piratas espaciales. Para ello deberá enfrentarse al mismísimo dios del universo y sacrificar algo muy importante para él.
| Colección | Correspondencia desde el fin del universo vol. 4 de 5 |
| Autoría | Menota |
| Género | Ciencia ficción, comedia, romance, slife of life |
| Formato | Rústica con solapas y sobrecubierta 13 x 18 cm |
| Precio | 9,95 € |
| Páginas | 206 páginas en blanco y negro |
| Maquetación | Futurbox Project |
| Traducción | Makoto Morinaga |
| Fecha de lanzamiento | 27/11/2023 |
| Reseñas | Volúmenes anteriores |
No obstante, antes de continuar me gustaría hablaros de otras cuestiones como, por ejemplo, la edición. En líneas generales, creo que Kitsune Manga ha sido capaz de encontrar el equilibrio tras unos comienzos algo complicados. Desde sus inicios, la editorial ha mejorado bastante muy diversos aspectos, por lo que hoy día podemos decir que emite productos con buena calidad. Aunque sigue teniendo algunos problemas con el moiré, la calidad de la maquetación y la impresión ha subido. En materia de traducción, siempre ha tenido buen nivel. Correspondencia desde el fin del universo n.º 4 es un buen ejemplo de todo esto, por lo que estoy bastante satisfecho con el resultado final.
Explorando el cosmos
Y hablando de «finales», lo cierto es que estamos bastante cerca de este. O lo que es lo mismo, solo queda un volumen para que todo acabe. Debo decir que me da un poco de pena, pero considero que —en este caso— es el momento adecuado. Aunque Correspondencia desde el fin del universo me está gustando, opino que es una de esas series a las que no les sentaría demasiado bien extenderse durante demasiado tiempo. Sí, seguiría siendo interesante al descubrirnos las locas de su autor, pero no sería lo mismo.
Durante todo este tiempo he disfrutado mucho de su ingenio y de su particular manera de entender el cosmos e, inclusive, de ciertos elementos de la religión. Pese a ello, sigo pensando que cinco tomos es un número bastante redondo para dejarnos con un buen sabor de boca. Sobre todo cuando está apretando el acelerador. Tal y como habréis podido inferir, esta cuarta entrega ha revitalizado la presencia del ser supremo.
O lo que es lo mismo, «Dios» ha hecho acto de presencia para cerrar dos de las subtramas principales de la historia, abrir otra saga corta bastante interesante y, finalmente, dar rienda suelta a los últimos esquejes de la historia. Curiosamente, ha sido capaz de crear una nueva línea muy coherente con la que cerrarlo casi todo, por lo que creo que —aunque ha metido un giro de guion bastante intenso— todo está saliendo bastante bien.
Una historia reconfortante, pero con momentos bastante duros
Por supuesto, sigue siendo muy pronto para hablar, pues no tengo ni idea de qué es lo que ocurrirá a continuación. Aunque Menota nos ha ofrecido mucho, también ha escondido bastante. Gracias a esto ha logrado dejarnos con una sensación bastante reconfortable en donde curiosidad y satisfacción se dan de la mano. Y como entiendo que esto último puede ser un poco complejo, me explico.
Aunque lo normal sería tener casi todas las respuestas en la palma de nuestra mano a estas alturas de la película, nos ha enseñado un nuevo caramelo que sabemos que durará muy poco. En otras circunstancias, esto podría resultar molesto, pero en este en concreto no ha sido de esta manera. Algo muy meritorio, todo sea dicho, puesto que podría hasta habernos enfadado.
Pese a ello, el carácter desenfadado de casi todas sus historias (aunque algunas sean esencialmente dramáticas, crueles o tensas) nos ha permitido disfrutar bastante de este cambio de rumbo sin sentirnos engañados en el proceso. O lo que es lo mismo, se siente como un elemento más dentro de su diseño general. Es lógico y coherente, dentro de lo que cabe, por lo que no se define como el recurso fácil de romperlo todo al final para sorprender.
Reseña de Correspondencia desde el fin del universo n.º 4 | Conclusiones
Ahora bien, esto no quita que siga teniendo sus defectos. Algunos diálogos tanto de este como de otros tomos son un tanto flojos, el dibujo sigue sin ser nada del otro mundo y hay algunas tramas que no se sostienen tan bien. Aceptamos ciertas resoluciones porque entendemos que son conveniencias del guion, pero se ejecutan tan rápido que a veces no da tiempo ni a apreciarlas.
De hecho, diría que uno de los principales problemas de este tomo es que a veces se siente demasiado apresurado. Infiero que a Menota le habría gustado extenderlo todo durante uno o dos tomos más, pero no lo sé. Es algo que presupongo tras ver cómo ha ido evolucionando la historia. Sin más, parece que ha subido el ritmo algo más de lo normal.
Pese a ello, no termina de desentonar, por lo que, o bien se supo adaptar muy bien, o bien estoy patinando muy fuerte. Sea como fuere, la conclusión es la misma: no me arrepiento de haber agregado Correspondencia desde el fin del universo a mi biblioteca. A falta del último volumen, puedo decir que las aventuras de Marco me han dejado con un buen sabor de boca. Es una lectura disfrutable con sus más y sus menos, pero esencialmente entretenida. Tiene su punto y eso es con lo que me quedo.
- La premisa es original y la narrativa es entretenida.
- Es una historia con gancho y bastante original.
- La edición ha cumplido con nuestras expectativas.
- Los diseños de los personajes, tanto en lo físico como lo mental, son muy interesantes.
- Evoluciona mucho respecto al tomo anterior.
- El dibujo no es demasiado detallado.
- El ritmo es algo más errático comparado con las dos primeras entregas.
