Pocas veces me había encontrado con un argumento tan peculiar, extraño y singular como este, pero… Bueno, si la curiosidad no mató al gato, ¿quién soy yo para rechazar el manga más español de la historia? Bromas aparte, aquesta mi primera reseña de Hiruneburu, el club de la siesta es una de las más particulares a las que jamás me he enfrentado.
De hecho, incluso antes de empezar no sabía bien qué esperarme. Y eso que, en realidad, el título es muy sincero para con su contenido. A grandes rasgos, Hiruneburu nos presenta las aventuras y desventuras de un joven que se pasa todo el día durmiendo, que termina «atrapado» en los tejemanejes de la presidenta del consejo de estudiantes de su instituto. ¿Y para qué?
Pues para fundar un club de la siesta que les permita demostrar los beneficios que hay detrás de estos descansos que tienen lugar entre el medio día y la primera hora de la tarde. Sí, has leído bien. En este manga reviviremos las peripecias de tres estudiantes cuyo principal objetivo es echarse una buena siesta.
Magnificando los problemas que puedan tener a la hora de dormir a esta hora, tratará el tema con mucho humor desarrollando situaciones y herramientas —sí, herramientas para dormir mejor— realmente disparatadas. Así pues, desde el principio nos expresa con mucha sinceridad que, ante todo, no debemos esperar nada demasiado serio. Asimismo, también debéis saber que la serie ha sido recopilada entera en este único volumen, por lo que no debéis esperar una segunda parte.
Reseña de Hiruneburu, el club de la siesta | Portada, sinopsis y edición
Desde pequeña, Sarasa siempre ha albergado un gran sueño: actuar en el papel de Oscar, protagonista de La rosa de Versalles, para la compañía de teatro Kôka, una agrupación de actrices de gran renombre. Sin embargo, para cumplir con su objetivo antes deberá asistir a la Escuela de Artes Escénicas y Teatro Musical. Debido a su personalidad tan despreocupada, no se corta un pelo en gritar a los cuatro vientos las ambiciones que persigue, algo que no acaba de gustar al resto de las compañeras y le hacen el vacío. Además, está Ai, una exidol sobre la que pesa un pasado oscuro y con la que, tras un par de malentendidos, al final Sarasa construye una bonita amistad. ¡Nada se interpondrá en su sueño por convertirse en la estrella de la escuela!
Colección | Hiruneburu, el club de la siesta vol. 1 de 1 |
Autoría | Sai Ihara y Akito Harunatsu en colaboración con Hiroshi Hatora |
Género | Comedia, escolar, slice of life |
Formato | Tapa blanda con sobrecubierta |
Páginas | 192 páginas en b/n |
Precio | 9,50 € |
Traducción | Agustín Delfino |
Preventa | 24/11/2023 |
Hiruneburu, el club de la siesta y MangaLine me han dejado con un sabor un tanto agridulce con su edición. Por un lado, me ha encantado (todavía quedan unas pocas en la web) que tengan una primera tirada/edición con extras de regalo. Más concretamente, viene con una postal con arte a doble cara y un marga páginas. Como es lógico, ambos son temáticos. Por el otro, hay unos cuantos bordes cortados por los límites físicos del tebeo. Esto provoca que algunos diálogos y bocadillos no encajen bien y aparezcan cortados, válgase la redundancia.
Pese a ello, debo decir que el resultado final es bueno y que, en general, deja con buenas sensaciones gracias a los regalos que incluye esta edición limitada hasta fin de existencias. Aparte, la traducción es de calidad y los materiales empleados son buenos. El tebeo es recio, lo cual nos deja con un buen sabor de boca. Por lo tanto, aunque hay aspectos mejorables, lo cierto es que es un producto que cumple con nuestros estándares.
El argumento más español de la historia
Dicho esto, ¿podemos decir que Hiruneburu, el club de la siesta es el manga más español de la historia? Bromas aparte, es cierto que me ha sorprendido ver algo tan típicamente nuestro en una obra nipona que no he podido evitar sentirme muy atraído por su premisa. Sin duda, es algo muy llamativo… y sincero. Es decir, que te vas a encontrar justo lo que su título promete. Ni más, ni menos. Hiruneburu es una comedia escolar que se construye en torno a la siesta.
Más concretamente, alrededor de un estudiante (ojito al plot twist del final, pues me ha dejado loquísimo) que siempre estás durmiendo en clase. Tal es su capacidad para quedarse dormido todo el tiempo que hasta es «famoso» en su escuela. Esto mismo provoca que llame la atención de la presidenta del consejo estudiantil. ¿Por qué? Pues porque quiere demostrar que la siesta reporta beneficios en la salud y la capacidad de los estudiantes.
O lo que es lo mismo, que tomarse un pequeño descanso puede reactivar nuestra capacidad, lo cual nos permite seguir siendo más productos. Por supuesto, no tiene pruebas que lo demuestren, y es de ahí de donde nace la alocada idea de fundar un club de la siesta mediante el cual obtener pruebas para demostrar que su teoría es cierta. Por supuesto, hay algo más detrás de su decisión, pero eso dejaré que lo descubráis vosotros mismos.
De siesta en siesta y tiro porque me toca
Lo bueno es que, gracias a esta idea, podemso creernos el desarrollo de la trama hasta cierto punto e, inclusive, disfrutarlo. Arrancándonos alguna que otra sonrisa divertida en el proceso, junto con alguna que otra mueca no muy afín a ciertos dejes del humor nipón, cumple con su cometido: entretiene. Para mi sorpresa, Hiruneburu, el club de la siesta es un manga bastante entretenido. Personalmente, me lo he leído de una sola sentada.
Todo sea dicho, creo que esto es gracias a que solo es un volumen, pues una serie más larga habría terminado siendo aburrida. Su argumento es simple y el desarrollo es parco, pero esto es justo lo que necesita. Como no se anda por las ramas y no intenta ser demasiado revolucionario, logra encajar bastante bien como lectura rápida y complementaria. Todo sea dicho, te deja un poco frío en algunos momentos, pues tampoco termina de aportar nada demasiado novedoso.
Está bien para reírse un rato y relajarse, pero poco más. Eso sí, el dibujo está bastante bien y, en general, la lectura es bastante fácil de seguir. El trazo es limpio, la estructura es sólida y la narrativa funciona relativamente bien. Como no se anda por las ramas, es ágil y dinámico, y esto es lo que necesita. Sobre todo cuando tenemos en cuenta que, ante todo, no sorprende. Más allá de ese girito que he mencionado, pero no relevado, es bastante plano.
Reseña de Hiruneburu, el club de la siesta | Conclusiones
Si prestamos atención al título, pues no sorprende que sea de esta manera. Es por esto mismo que he dicho que es una obra bastante sincera con lo que ofrece. Así pues, no esperéis un desarrollo de personajes demasiado complejo ni una trama que sorprenda, pues no es ese tipo de manga. Aquí la cosa va de disfrutar de una premisa ciertamente alocada en un contexto de realismo, pero con cierto deje de fantasía por lo inverosímil que resulta todo.
Y es que cuando la presidenta aparece con una herramienta para dormir, o una de sus integrantes revela que tiene un despertar terrible, sí que logra hacerte sonreír. Es divertido, y eso es algo que debemos reconocerle y concederle. El resumen de todo esto es que Hiruneburu, el club de la siesta no es ni será un manga que rompa esquemas. No logrará marcar un antes y un después. Tampoco sentará cátedra.
Es, sin más, un manga muy normalito que, pese a todo, es capaz de ofrecernos un rato de distensión y entretenimiento sin complicación alguna. En ese sentido, cumple bien con su cometido. No es demasiado ambicioso, pero hace varias cosas bien. Es por esto mismo que, sabiendo que ofrece justo lo que promete, considero que tiene algo que aportarle a no pocos lectores.
- No solo es sincero con lo que ofrece, sino que además es entretenido.
- Los extras de la edición son de agradecer.
- La lectura es ágil y dinámica.
- Curiosamente, no funciona mal a nivel narrativo.
- Es un manga bastante simple y no termina de sorprender.
- Algunos cortes físicos en los diálogos.