Casi cuatro años después del lanzamiento del remake, nos llega la demo Final Fantasy VII Rebirth, y nosotros ya tenemos lista nuestras impresiones. Y es que aunque solo está disponible una parte de la misma, tenemos motivos de sobra para sopesar lo que se nos viene encima.
Una historia cargada de matices y preguntas, un sistema de combate evolucionado y muchas sorpresas son sola algunas de las pistas que nos hacen pensar que estamos ante uno de los mejores títulos de su género y de este año. Prepararos para leer lo que nos ha parecido la nueva obra de Square-Enix, que sin duda podría ser su trabajo más importante hasta la fecha.
Impresiones de Final Fantasy VII Rebirth, podría ser más fiel al original de lo que pensamos
La sección de la demo que hemos jugado pertenece a la visita del grupo a Kalm, momento en el que Cloud les habla al grupo sobre el pasado de Sefiroth. Aquí indagaremos en el pasado de ambos personajes, además de descubrir como germinó el mal en el antiguo miembro de Soldado.
En líneas generales, nos ha traído grandes recuerdos del juego original, y es que ha sido fielmente adaptado y recreado. De esta manera, no nos ha dado la impresión de estar ante algo distinto, que cambie por completo el canon de la historia, pero si algo mucho más grande.
La demo tiene una duración aproximada de dos horas, mucho más de lo que tardamos en el original en explorar esta zona. Y es que hemos visto muchas tareas para completar al margen de la historia principal, pese a ser una demo.
En cuanto a tareas secundarias, si hemos visto pocas, aunque suficientes dado el momento del juego en el que se sitúa. Nos quedamos sin duda con el minijuego de tocar el piano, que promete que tendremos que dedicarle un buen número de horas cuando llegue el momento.
Más exploración, menos lineal: mucho mejor
En cuanto hemos podido controlar a Cloud hemos notado la primera gran aportación a la saga. El personaje que controlamos ahora podrá rodar y escalar, y no solo en momentos puntuales. Esto hace que podamos alcanzar zonas más altas, como tejados o rocas elevadas.
Aunque los escenarios no han perdido toda la linealidad (ni falta que le hace, es perfecto) ahora podemos llegar a más zonas, que seguramente aguardará algún secreto y potencia en gran medida la exploración. También hemos visto zonas más abiertas, pero aunque aún es pronto para sacar un veredicto final sobre este apartado -dado que solo hemos jugado una fase-, lo visto en los últimos tráilers deja claro que esto es solo la punta del iceberg.
Es como si la desarrolladora hubiese escuchado las quejas de los fans acerca de los escenarios y corregido uno de los principales problemas del original. Sin duda algo que nos inspira a pensar que estamos ante un título mejor, más divertido y menos lineal.
Los combates también han evolucionado sin perder la esencia del remake
Pese a que respeta la fórmula del original en cuanto a jugabilidad, hemos visto más y mejor. Más objetos -algunos elevan el toque estratégico-, más movimientos y más materias diferentes.
Sabemos que más no siempre es mejor, pero los movimientos de Cloud ahora son más variados, lo cual acorta la monotonía en combate. Además, el plantel de personajes jugables también ha crecido exponencialmente, y aunque aún no hemos podido probarlo, confiamos en que esto eleva la libertad y nos permitirá crear un grupo de personajes acorde a nuestra estrategia favorita.
Aún nos falta varios aspectos que pulir antes de la versión final, como la variedad de enemigos o la estrategia que planean. Pero se nota el desempeño de Square en hacer de la batalla algo más divertido y entretenido, su principal baza.
Gráficamente, también hemos notado mejoras, pero menos elevadas
Siendo francos, Final Fantasy VII Remake fue un juego adelantado a su época, y a día de hoy cuesta creer que un título de su calidad gráfica perteneciera a la generación pasada. Rebirth no solo ha heredado el motor gráfico, sino también un montón de detalles y texturas.
En primer lugar, algunas texturas se siguen viendo desfasadas, como poco detalladas pese a ser muy visibles, algo que ya pasaba en el anterior título con las puertas. Esto nos hace pensar que aunque se sigue viendo alucinante, este apartado ha evolucionado menos, y quizás ya no derrocha tanto potencial como antes. De hecho, en alguna ocasión hemos notado alguna bajada de fotogramas, nada importante ni que afecte a las batallas, eso sí.
Por el momento, desconocemos si se debe a la versión de la demo, ya que podría ser una presentada hace tiempo. Lo que si sabemos es que es el fin de las malas noticias, y también hay aspectos muy positivos. Por ejemplo, las animaciones de cada personaje es mucho más alto, contamos con un set de movimientos para cada ocasión. Animaciones cuando nos asomamos a un saliente, cuando nos acercamos a un pueblerino, más movimientos faciales… una pasada.
Eso sí, hemos alucinado con el nivel de detalle de las estancias. Cada casa, cada rincón tiene vida propia, y no parece que haya dos lugares iguales. Por no hablar de los enormes lugares que se ven a lo lejos, un regalo para la vista, deseando ser explorado. La banda sonora también cuenta ahora con una barbaridad de temas sonoros (hasta 104), en solo dos horas de demo hemos podido escuchar varias canciones, a cada cual más épico.
Impresiones de Final Fantasy VII Rebirth. Conclusiones
Final Fantay VII Rebirth promete ser más de lo que vimos en el original pero evolucionado. Cada lugar, cada combate y detalle ha sido mejorado, demostrando que una continuación no tiene que ser especialmente revolucionario, pero si tan divertido.
Y es que al margen de las buenas vibraciones que nos ha dejado la demo, estamos fritos por saber como continúa la historia que dejamos atrás hace cuatro años. Algo que sin duda parece respetar al juego original, pero que promete aguardar más de una sorpresa.
Aunque ya contamos los días para poder disfrutar al que sin duda será uno de los juegos del año, Final Fantasy VII Rebirth no llegará hasta el 29 de febrero, cuando se lanzará en exclusiva para PlayStation 5.
- Lo potenciada que está la exploración y los puzles.
- La historia nos tiene enganchadísimos y solo es la demo.
- Las nuevas posibilidades en combate y minijuegos.
- Gráficamente no ha evolucionado tanto, aunque se sigue viendo impresionante.
- Algunas texturas sin terminar.
- Que no esté ya a la venta.