El pasado 20 de octubre se lanzaba el último título ambientado en alguno de los universos de Games Workshop. Este último Warhammer 40.000 Shootas Blood & Teef es un juego de plataformas de avance con pistolas desarrollado por el equipo Rogueside.
Como os comentaba, podéis haceros con el juego en Nintendo Switch, PlayStation 5, PlayStation 4, Xbox One, Steam, Xbox Series X y Series S y Mac OS. La historia del juego nos manda al planeta Alpha. Allí, durante muchos siglos, se ha producido material imprescindible para las guerras que asedian el sector Armageddon. Como consecuencia, el gran Kaudillo Ogruk Gutrekka lanza al Waaagh! para tomar el control.
Sin embargo, al llegar al planeta, Gutrekka se lleva a tu garrapato pelo más valioso. Con una enorme sed de venganza, juras hacer lo que sea para recuperar a tu garrapato pelo y demostrar quién es el más fuerte. Así empieza tu aventura en Luteus Prime.
Warhammer 40,000: Shootas, Blood & Teef es una aventura de acción en 2D dibujada a mano que nos llevará en un viaje frenético lleno de dakkas, gore y explosiones. Tendremos que abrirnos camino en Luteus Prime, luchando contra humanos, orkos y cultistas Genestealer. Todo con el objetivo de recuperar nuestro lujoso garrapato pelo de las manos del kaudillo Gutrekka.
Análisis de Warhammer 40.000 Shootas Blood & Teef | Empezamos por la jugabilidad
En esta ocasión solo os dejo la premisa de la historia y no profundizo mucho más en ella porque no es el fuerte. Es divertida, pero sin mucha chicha de donde sacar conclusiones. Eso sí, el tono macarra le sienta bien al estilo del juego en sí y tiene puntos graciosetes que están muy bien metidos. Aunque, más allá de eso no hay más.
Ahora bien, la jugabilidad es la piedra angular en la que se sustenta el sentido de la propuesta que nos da Rogueside, equipo ya veterano en este tipo de juegos (Guns, Gore & Cannoli). Está pensado para jugar con los colegas, ya que antes de empezar sale una pantalla de carga donde pueden unirse tres más (en línea o local) para completar juntos los niveles. Evidentemente, hacerlo en compañía supone experimentar la mejor versión del juego ya que el modo solitario es divertido, pero se nota mucho que no está pensado del todo para ello.
De hecho, a medida que avanzamos y nos llegan las hordas de enemigos veremos que a veces se quedan esperando en una zona. No es un fallo, es que supone la IA que ahí debería haber otro jugador y son los enemigos que le «correspondería». Es algo raro, muy raro. No se hace molesto porque el ritmo frenético te hace moverte por todo el mapa en solitario y tampoco lo achacas. No obstante, si planteas el nivel más pausado (especialmente cuando tienes que seleccionar las armas específicas) y de pronto se quedan los malos quietos en una zona, te quedas algo loco.
Los jefes y gunplay
Los niveles se articulan en varias fases que se van superando a medida que se avanza. El chorro de enemigos es continuo y solo hay breves fases de descanso donde nos da tiempo a preparar la siguiente zona. Normalmente es avance y eliminación, aniquilación (con sucesivas oleadas) o mini-jefes a derrotar. Una vez superamos todas aparecer un gran jefe que actúa como fin de «capítulo» o acto donde normalmente, al vencer, aparece una cinemática de la historia.
Pese al ritmo que he comentado, rápido y ágil, no descuida cierta estrategia. Ésta viene de la mano del gunplay o el selector de armas. Tendremos una «tienda» cada cierto tiempo desde donde podremos comprar diferentes armas. Por lo general, hay cuatro clases: pistola, fusil, pesada y escopeta. Ojo, no subestiméis la importancia de saber qué elegir en función del momento porque de lo contrario, habrá enemigos que costará vencer muchísimo. Especialmente con los jefes, el saber qué usar en función del momento es básico y me gusta esa pequeño momento de pensar antes de actuar.
Apartado técnico
El mundo de Luteus Prime está realizado con mimo, ya que los escenarios están dibujados con gusto. Dan una sensación de profundidad inmensa a un mundo en 2D. Además, los distintos enemigos y posibilidades de personalización (no abundantes, pero decentes para un juego de este tipo) hace que entre por los ojos desde el primer momento.
Aunque si por algo destaca de verdad el apartado artístico, más allá de su arte, es la música. Es increíble el repertorio de música heavy metal que nos acompaña desde el tutorial prácticamente en todos los niveles. Sencillamente brutal. Además, conjuga perfectamente con el tono de la historia, se adecua al ritmo de los niveles y al juego en sí.
Análisis de Warhammer 40.000 Shootas Blood & Teef | Conclusiones
Para finalizar, Warhammer 40.000: Shootas, Blood & Teef es un juego perfecto para tener a mano con los colegas y echar varias partidas. La historia no es nada del otro mundo, pero está ahí como excusa. Es un juego indie y para lo que es creo que cumple, no destaca en nada (aunque me gustó mucho la música), pero tampoco flojea en nada. Perfecto para ser un juego de fondo de armario al que acudir para partidas divertidas de vez en cuando.
- La música heavy metal está genial.
- El modo cooperativo es muy divertido.
- Los jefes finales.
- La IA del juego es algo floja.
- En ocasiones puede ser algo injusto.
- La historia es muy simplona.