Análisis de ‘Stellaris: Console Edition’

Un nuevo RTS llega a nuestras plataformas de juego... Are you ready?

0

¡Hola, muy buenas amantes de los videojuegos! Regresamos con un nuevo análisis. En esta ocasión hablaremos sobre Stellaris: Console Edition, o lo que es lo mismo, el lanzamiento de la versión física en PlayStation 4 y Xbox One del RTS de Paradox Interactive y Tantalus. Su distribución ha corrido a cargo de Koch Media, la cual se ha encargado de engarzar todo el contenido adicional del título en una sola edición. Así pues, Stellaris: Console Edition incluye el juego base, sus tres DLC (Leviathans, Pantoid y Utopia) y el modo multijugador.

No obstante, nos encontramos ante una propuesta arriesgada. No por nada, el género de la estrategia en tiempo real agradece, muchísimo, el uso de teclado y ratón. Si bien es cierto que Stellaris incluye opciones de pausa, sigue siendo peligroso. En consecuencia, es inevitable formular la siguiente pregunta: ¿Ha logrado Stellaris superar el escollo de los controles? Os lo contamos.

Stellaris: Console Edition

Análisis Stellaris Console Edition
Análisis Stellaris: Console Edition

En primer lugar, los controles y la interfaz. Aunque suelo potenciar en aquestas mis reseñas aspectos tales como la jugabilidad, la historia o el contenido, al menos en primera instancia, creo que el punto más importante de Stellaris: Console Edition son sus controles. Al menos en su versión para consolas. De buenas a primeras, el juego ofrece una serie de tutoriales muy bien hechos. Ofrecen gran cantidad de información y plantean solución a casi cualquier duda que podamos tener. Empero, no es oro todo lo que reluce, y es que Stellaris es denso. Muy denso. El primer escollo al cual se enfrenta cuasi cualquier jugador novato es, simple y llanamente, aprender. Se requieren no menos de un par de horas para manejar sus conceptos más sencillos. Así pues, la fase de adaptación es demasiado tosca.

Lo curioso es que no se debe a un error de diseño o una mala praxis. Las cualidades inherentes del género, así como la gran cantidad de información (ya sea a nivel de mecánicas, razas, tecnologías, etc.) que manejamos es… Es duro, la verdad. Paradox se lo ha currado mucho, y se nota. Por desgracia, esto puede provocar que la paciencia de no pocos usuarios se rompa antes de llegar al meollo del asunto; le cuesta arrancar, y en parte se debe a los controles. Ya en PC nos encontramos con esta problemática. Con mando, cómo no, se potencia. No es del todo cómodo de manejar, sobre todo cuando intentamos realizar selecciones amplias. La navegación llega a ser intuitiva y, con la práctica, agradable, pero se resiente por culpa del periférico; no está diseñado ser usado con mandos.

Aun con todo, considero que el esfuerzo realizado y el resultado obtenido no es malo. Stellaris se comporta bien y se deja querer. Los menús se han adaptado con pequeños cambios que facilitan su navegación, pues de otra forma sería muy complicado. A la larga, la mayoría de estos problemas terminan siendo anécdotas, pero requiere paciencia. Si queréis saber mi referencia personal, lo he disfrutado, mas es cierto que disfruto mucho de los juegos de estrategia en tiempo real y/o gestión de recursos. Es un género que, de base, conozco y disfruto.

Un universo de posibilidades

Ahora sí, pasemos al argumento. Lo curioso a este respecto es que, en realidad, Stellaris no tiene trama al uso. El título nos presenta un contexto de ciencia ficción en donde múltiples razas e imperios coexisten en el universo. Será tarea nuestra crear nuestra propia historia ya sea a través de una raza existente o a través de la creación de una nueva. En efecto, podremos crear desde cero nuestra identidad eligiendo no solo los rasgos físicos de nuestros personajes, sino también sus peculiaridades sociales, políticas y culturales. Al final, y con toda probabilidad, pasaremos un buen rato personalizando al máximo nuestra experiencia gracias a la muy extensa gama de posibilidades de las que dispondremos. Al mismo tiempo, podemos jugar o no con los DLC, los cuales no solo amplían el contenido, sino que nos regalan un nuevo abanico de opciones.

En lo que se refiere a material gráfico, Stellaris no destaca mucho, pero por el formato de juego. Casi todo el diseño queda reducido a la interfaz, la cual se compone de textos e imágenes. Al menos como norma general, que no siempre. Habrá escenas, movimientos, batallas especiales, etc. con secuencias animadas. Aunque pueda parecer aburrido, es muy lógico. Nuestra interfaz se superpone sobe una especie de mapa estelar en donde podremos consultar información sobre los distintos planetas que existen. Por ende, la experiencia, gráfica y jugabilidad se condensan en un conjunto de menús y elecciones.

Lo curioso es que ofrece una profundidad pasmosa que, eso sí, a veces premia en demasía el enfoque bélico. Porque, en efecto, tendremos toda clase de posibilidades expansionistas, desde el comercio hasta la diplomacia pura y dura pasando por contiendas estelares. A ese respecto, los combates son automáticos: seleccionaremos, simplemente, a las unidades que participarán. Habrá asedios y batallas de todo tipo, pero no podremos controlar nada en ellas una vez comiencen. La estrategia se da antes y después del combate a modo de resoluciones, refuerzos, gestión de recursos, etc.

Conclusiones

Análisis Stellaris: Console Edition
Análisis Stellaris: Console Edition

No quiero extenderme mucho más, pues al final el juego se resume en una cantidad de contenido, opciones, historias y desarrollos sin parangón. Cada partida sera diferente y, al final, seremos nosotros quienes determinemos todo. Es demasiado centrista, todo sea dicho, pero posee una IA para nada desdeñable. Mantiene, a grandes rasgos, las fortalezas de la edición de ordenador, las cuales se ven potenciadas por la inclusión de los tres DLC en el precio de una sola edición. A nivel de estrategia es un verdadero coloso; si os gusta mandar, programar y gestionar, vais a disfrutar como enanos. No solo eso, sino que ofrece una ingente cantidad de horas de entretenimiento. Es, de hecho, muy rejugable.

En contra, el apartado gráfico, el cual no destaca demasiado. Al mismo tiempo, se nota que la interfaz es algo regulera por culpa de los mandos. Además, el exceso de información puede hacer que los jugadores más novatos se vean muy desplazados. En líneas generales, la edición de consola es muy similar a la de PC. De forma subjetiva, creo que desde Paradox se ha hecho un buen trabajo; no es, simplemente, un port. Hay cariño detrás. Si no lo has jugado, no eres muy de PC, prefieres jugar en consola y/o te encanta la estrategia hardcore es un juego excelente. Si tienes curiosidad por los RTS, tal vez no sea el mejor para empezar, pero sigue siendo una gran opción por todo el contenido que ofrece.

Análisis de Stellaris: Console Edition. Edición física para PlayStation 4 cedida por Koch Media.

Dejar una respuesta

Please enter your comment!
Please enter your name here