En FreakElitex pudimos acudir a la última edición del Festival del Cine de Málaga y hoy os traemos una nueva reseña de una de las películas a la que pudimos acudir: Hombre muerto no sabe vivir, una película de Ezekiel Montes protagonizada por Antonio Dechent.
Hombre muerto no sabe vivir: Las viejas glorias del narcotráfico
Si decimos: Málaga, Cádiz, Marruecos, y narcotráfico, ¿qué pensáis? Ya os lo digo yo: una lancha a todo trapo cruzando el estrecho. Una idea un poco trillada en películas y series españolas donde se tiran de estereotipos para personalizar a cada una de las partes. Si para el cine americano, utilizan a México y Colombia, en el cine español se tira de Marruecos y de Cádiz.
Pero Hombre muerto no sabe vivir va un poco más allá. Estamos tan acostumbrados a recibir violencia del cine que ha hecho que nuestro umbral de impacto haya aumentado y ya no nos afecta tanto ese tipo de violencia. El cine de Tarantino nos ha curtido, pero no es común ver ese tipo de escenas en el cine español.
Es ahí uno de los pilares fuertes de Hombre muerto no sabe vivir. La violencia es tan explícita que se cuela por momentos en el cine gore y donde todos los personajes están expuestos al peligro, razón que hace que saques cierta tensión con forme la película avanza.
El argumento de Hombre muerto no sabe vivir
Si hablamos del argumento, la película no es más que la primera frase de esta reseña. Una organización dedicada al narcotráfico donde una nueva droga ha entrado en circulación y se desconoce la procedencia de esta. A este problema se le suma, que los miembros de la organización y la dirección están mayores para hacerse cargo del trabajo; una organización en decadencia que busca un cambio generacional encarnado por Rubén Ochandiano, un tipo desagradable y loco sin sentimientos que busca la mano dura en la organización que ha dirigido durante tantos años su padre.
Pero Hombre bueno no sabe vivir es más que eso, es una película donde se muestran los valores “humanos” que puedan existir dentro de una organización dedicada al tráfico de drogas, con la excusa de que no todas las drogas son buenas…un argumento que se coge con pinzas, pero que muestra la intención de querer que, si la gente es inevitable que consuma, que por lo menos no sean tan nocivas, algo que ha hecho que se queden atrás.
Hombre muerto no sabe vivir: Conclusión
Como decía al principio, estamos acostumbrados a ver violencia en las películas. Ese cambio en nosotros está representado en la película por la violencia que muestran los jóvenes frente a los valores más éticos de la generación pasada y que no están tan acostumbrados a este tipo de impactos. Quizás Hombre muerto no sabe vivir sea ese cambio generacional para futuras películas españolas con tintes violentos. En definitiva, si quieren seguir impactando habrá siempre que ir un paso más allá, y eso en el cine español no es tan frecuente que ocurra y en esta película han avanzado con pasos de gigante.
En el reparto encontramos: a Antonio Dechent, Nancho Novo, Rubén Ochandiano, Elena Martínez, Juan Manuel Lara, Paco Tous y Jesús Castro.
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