He de empezar este análisis de Ereban Shadow Legacy confesando mi admiración y pasión por los juegos de sigilo. Aún siendo uno de mis géneros preferidos, intentaré ser lo más imparcial posible y dar mi opinión tras acabar el juego para, también, aquellos jugadores a los que los juegos de este género no les llamen mucho la atención o quizás se quieran iniciar en dicha temática.
Además, para añadirme más presión, hablamos de un juego desarrollado por un estudio español, Baby Robot Games, formado tras la embrionaria idea creada como culmen de un trabajo de fin de carrera y que ahora, tras varios años de desarrollo y crisis del Covid mediante, ve por fin la luz el próximo este miércoles 10 de abril. Eso sí, a pesar de haber estado incluso anunciado para Game Pass, la versión de Xbox se canceló y no verá la luz, almenos de momento, debido a que el estudio confiesa que tienen aún mucha ilusión por llegar el juego a la plataforma de Microsoft.
Análisis de Ereban Shadow Legacy, así es su historia
En lo tocante a la historia de Ereban, el juego nos pone en la piel de Ayana, la última descendiente de los Ereban, una raza olvidada en un mundo postapocalíptico y de ciencia ficción en el que las máquinas gozan de inteligencia y la corporación Helios lo gobierna todo. Los compases iniciales de la aventura nos hablan de cómo el Sol se apaga y Helios, gracias a su tecnología, domina el mundo al ser la única proveedora de energía a nuestro planeta.
Nosotros, como Ayana, recibiremos una inocente invitación a dicha corporación Helios que acabará siendo una trampa y deberemos escapar de su sede, dando así inicio a un viaje en el que, además de intentar saber que oculta la oscura megacorporación Helios, investigaremos también nuestro pasado y el de los nuestros, así como una historia de descubrimiento personal y relacional con aquellos que nos topemos en la aventura.
Si bien la historia se sigue con interés, no estaremos ante nada que no hayamos visto ya puesto que, además de partir de un cliché ya usado en múltiples inicios de aventuras, el desarrollo de la trama cuenta con algún giro de guion que, aún siendo algo sorprendente, no te hará levantar de la silla. Creo que lo que se nos cuenta es mas bien un hilo conductor de misiones y de escenarios para poder lucir el verdadero aspecto importante de Ereban Shadow Legacy, su jugabilidad, basada en el diseño de escenarios y el sigilo.
Una base jugable ya conocida pero con una gran innovación
Entrando ya de lleno en lo jugable, a poco que hayas jugado títulos del género, reconocerás sus claras influencias (y el estudio no lo niega sino que además presume de haber crecido jugando a esos juegos) que abarcan juegos desde los también españoles Aragami hasta incluso la verticalidad de algún Assassin’s Creed.
Aunque la premisa de muchos juegos de sigilo se fundamenta en “hacer uso de las sombras”, en este juego no puede sentirse más literal, puesto que Ayana se podrá “sumergir” en los escenarios siempre y cuando esté con una sombra. Para explicarme mejor, si en una pared se refleja una sombra, tu podrás literalmente fusionarte en esa pared y “navegar”/desplazarte por ella. Eso sí, tendremos un tiempo limitado ya que contamos con un contador que, cuando se agote, nos hará emerger de nuevo y nos dejará expuestos si no hemos buscado una cobertura o un sitio fuera del alcance de la vista de los robots.
La base jugable será muy similar a lo visto en otros juegos del género. Deberemos eludir a los guardias para cumplir los objetivos asignados. En función de nuestro estilo de juego, podremos acabar con todos los enemigos que nos crucemos o, por el contrario, ser lo menos letal posible e intentar acabar el escenario sin ninguna baja.
En función de nuestro desempeño, al final de cada una de las 8 fases, se nos otorgará una puntuación (S-A-B, etc.) teniendo en cuenta las bajas acumuladas, los cuerpos descubiertos, las veces que nos han visto los enemigos, las veces que hemos muerto, etc. También te podrás “picar” contigo mismo y con tus amigos porque se nos medirá el tiempo que hemos tardado en completar ese nivel.
Corto pero muy rejugable
Esto da mucho juego a la rejugabilidad de los escenarios y del propio juego, puesto que podrás volver a intentarlo intentando coger todos los coleccionables, sin matar a nadie, etc. También contaremos en alguna fase alguna misión secundaria, dividida a su vez en varios objetivos. Si bien no dejan de ser encargos algo más rutinarios, servirán para obtener artilugios que nos ayudarán en nuestro viaje. Todos los escenarios contarán con una suerte de “tablets” donde ampliaremos el lore del mundo y añadirá más consistencia al ya jugoso mundo de Ereban.
He de reconocer que me ha gustado mucho el diseño de los escenarios, siendo abiertos (aunque en ciertos segmentos algo más lineales y donde se tira más de las plataformas puras) y dando lugar a múltiples opciones para avanzar. Desde el juego podemos activar (de hecho lo estarán por defecto) unas ayudas visuales en forma de pintura rosa que marcarán el camino a seguir. Personalmente las desactivé a los 5 minutos de juego. No por ser más listo que nadie, sino porque creo que puede romper algo la experiencia y creo que el juego se disfruta mucho más si somos nosotros los que jugamos con el escenario e intentamos ir por una ruta y otra.
Análisis de Ereban Shadow Legacy | Habilidades y artilugios de todo tipo
Pero además de intentar buscar la mejor ruta, podremos hacer uso de las habilidades y de los artilugios de Ayana. El árbol de habilidades se ramificará de tal manera que el juego nos obligará a escoger una rama u otra, puesto que escoger una habilidad nos impedirá al menos en un primer momento escoger la otra. Además, si durante la exploración de los escenarios recogemos las herramientas adecuadas, mejoraremos los 4 gadgets que tenemos disponibles
Dichos artilugios serán también los ya vistos en otros juegos del género y que abarcan desde un sonar que nos permite identificar a los enemigos hasta señuelos que atraerán la atención de los enemigos. Esos artilugios tendrán usos limitados y cuando los agotemos, deberemos encontrar más “munición” para poder usarlos. No será nada fácil encontrar las herramientas necesarias para mejorar esos artilugios ya que éstas estarán bien escondidas en los recovecos de los escenarios, que son de un tamaño considerable.
También tenemos algún puzle a mitad de juego, haciendo uso de las mismas sombras y teniendo que estrujarnos algo el cerebro (personalmente hubo uno en el que me encallé un buen rato)
En definitiva, tras exponer los principales puntos de la jugabilidad, creo que estamos ante un juego de los que podríamos decir “easy to learn, hard to master”, ya que será relativamente sencillo cumplir con los objetivos principales pero algo más difícil sacar la máxima puntuación o encontrar todos los coleccionables.
Las sombras serán nuestras mayores aliadas
Personalmente me ha gustado mucho el uso de la principal seña de identidad de este juego, el navegar por las sombras. Con un diseño de escenario muy adecuado y que permite el uso de esta mecánica, Ereban es un juego donde la expresión “esconderse en las sombras” se torna más real que nunca y dará mucho juego, dejándonos por ejemplo acceder a zonas en las que sin esa sombra no podríamos llegar. Además, con unos puntos de control muy “amables”, el fallo no se verá muy penalizado y el progreso será cómodo.
Por hablar del aspecto audiovisual, estamos ante un juego que utiliza un tono manganime que le sienta muy bien y la paleta de colores empleada se ajusta muy bien a la intención del gameplay. La importancia de las sombras y de los escenarios también se notan a nivel visual, destacando sus escenarios verticales y muy bien diseñados. A nivel musical, una “leve” música ambiental de fondo nos acompañará y ésta cumple correctamente. El juego, a pesar de estar desarrollado por un estudio español, no cuenta con voces en castellano. Eso sí, vendrá con subtítulos en español y no hemos observado fallos de localización.
En cuanto al rendimiento…
En cuanto al aspecto técnico, aún jugando el juego en un PC que cumplía de manera muy sobrada con los requisitos recomendados, no nos hemos librado de algún “tironcito” que, aunque leve, no nos ha dejado de extrañar. Entendemos que en estos días previos al lanzamiento o incluso en la primera semana desde su disponilibidad desde Baby Robot Games seguirán puliendo el juego, pero también he de decir que no ha sido nada grave y la experiencia, en conjunto, ha sido muy sólida.
También pude probar un rato como funcionaba en Steam Deck y se ejecuta correctamente sin necesidad de ningún ajuste adicional. El cuanto al rendimiento en el PC consolizado de Valve, rondará los 30 FPS y es bastante jugable, sobretodo por el tono “pausado” del juego. Eso sí, quise limitar el TDP a 8 para ahorrar algo de consumo de batería y ahí el juego se tornó bastante injugable. Así pues, se puede ejecutar sin problemas y, si te conformas con 30 FPS y no te preocupa el consumo de batería, podrás jugarlo sin problemas.
Análisis Ereban Shadow Legacy, conclusiones
Si has venido hasta aquí porque eres un fan de los juegos de sigilio, te alegrará saber que Ereban saciará tu sed de juegos de sigilo, algo que no se puede ver mucho últimamente. A pesar de ser muy tradicional en varios aspectos, la gran novedad de poder “surfear” las sombras y el juego que eso da en la exploración me parece suficiente para que el lector le dé una oportunidad. Si no eres fan del género, también recomiendo Ereban Shadow Legacy ya que puede ser la puerta de entrada perfecta para aquellos jugadores más noveles o menos experimentados que el sigilio se les haga algo tedioso.
Ereban Shadow Legacy ejecuta todo lo que se propone de manera más que correcta y además de las 8 horas que te puede durar en una partida normal, será un reto para los completistas o puristas, dada la rejugabilidad de la obra de Baby Robot Games, de aquellas que merece la pena, pudiendo revisitar un escenario y abordarlo de manera totalmente diferente. Y hasta aquí nuestro análisis de Ereban Shadow Legacy.
- La innovación del uso de las sombras para meternos y movernos por ellas
- El diseño de los escenarios
- La rejugabilidad para los completistas
- Habernos quedado con ganas de más escenarios
- Siendo un producto “made in Spain”, no viene con voces en castellano
- Algún fallo de rendimiento muy puntual
