Tras más de dos décadas de historia, Square Enix hace justicia a Romancing SaGa Minstrel Song Remastered con su versión International, del que hoy os traemos nuestro análisis. La remasterización del remake del juego que dio paso a toda una franquicia llega en su versión más mejorada hasta la fecha, y cargada de novedades.
Y es que no en vano, por fin podemos disfrutar de esta obra en español, siendo el segundo de la saga en llegar localizado a nuestro idioma. A esto podemos sumarle mejoras gráficas, ajustes en la interfaz, nuevas opciones de juego e incluso más personajes jugables.
El relanzamiento llega cargado de nostalgia, pero también con la intención de demostrar que los sistemas de juego no convencionales pueden seguir funcionando hoy, ofreciendo libertad, múltiples rutas narrativas y un mundo que invita a la exploración. Sin embargo, su ambición también levanta dudas, pues no es un JRPG convencional, e incorpora muchos cambios al género.
En otras palabras, estamos ante un JRPG para paladares selectos, que se aleja de la línea de otros de la misma compañía. Es desafiante, pero el simple hecho de que podamos jugarlo en nuestro idioma abre todo un abanico de posibilidades. Os lo contamos.
Ocho historias que dan paso a toda una odisea: análisis de Romancing SaGa Minstrel Song Remastered International

La historia de Minstrel Song Remastered se desarrolla en el mundo ficticio de Mardias, un reino moldeado por antiguas guerras entre dioses. Según la mitología del juego, una deidad maligna llamada Saruin fue contenida gracias al poder de las Fatestones, piedras místicas que sellaron su poder. Sin embargo, con el paso de los siglos, los males que fueron contenidos comienzan a resurgir, y el equilibrio del mundo vuelve a estar en peligro.
Antes de comenzar la aventura, tendremos que elegir entre ocho protagonistas distintos. Cada uno de ellos tiene su propia historia y un punto de partida distinto, por lo que hay ocho aventuras diferentes, interconectadas en algunos puntos. Esto por supuesto, también afecta a las tareas secundarias y a los personajes que podremos reclutar.
Además, la historia no es nada lineal, y desde prácticamente el inicio de la misma tendremos mucha libertad a la hora de viajar y visitar otras localizaciones. La jugabilidad no es exclusivamente abierta, pero a veces si es algo confusa. Tendremos que estar muy atentos a las conversaciones durante las escenas para saber como orientarnos. También es posible, que los jugadores menos experimentados con JRPGs más complejos, se sientan perdidos durante los primeros compases. Aunque por suerte, la traducción al español ayuda bastante, su principal plato fuerte.
Jugabilidad refrescante siguiendo la tónica de la saga

Como cabría esperar de un remake de la primera entrega, sigue las peculiaridades de la franquicia. Esto, lo diferencia bastante de los estándares de JRPGs actuales o más convencionales, así que también se mantiene desafiante.
Volviendo a la elección de personaje, esto no afecta únicamente al trasfondo argumental de la trama y las rutas que puede elegir. Como os decíamos, a medida que avanzamos, podremos reclutar otros luchadores a medida que avanzamos. La libertad de elección también se manifiesta en este sentido, pues dependiendo de como completemos algunas tareas secundarias podremos reclutar a unos u otros.
Esta libertad da mucha más complejidad a la jugabilidad, con lo que podemos garantizar que difícilmente habrá dos partidas iguales. Metiéndonos más en la materia de los combates, el juego abandona el sistema tradicional de experiencia al ganar una batalla. En su lugar, las habilidades y estadísticas de los personajes mejoran según su uso. Por ejemplo, usar una determinada arma repetidamente aumenta su dominio, y las técnicas se perfeccionan al usarlas mucho en combate.
Gracias a este sistema, se fomenta bastante la experimentación y el seguir empleando determinadas estrategias. Aunque en contra partida, el sistema de progresión es lento, y necesita demasiado farmeo para obtener resultados. Además, cuenta con otra peculiaridad que complica demasiado las cosas, el sistema de vidas. Si un personaje cae en batalla puede volver a la lucha como en cualquier JRPG. Pero cada personaje cuenta con un determinado número de vidas, por lo que si muere demasiadas veces, finalmente lo perderemos para siempre. Esto en ocasiones resulta frustrante, y más si ya le habíamos echado horas a ese combatiente.
Exploración clásica y llena de posibilidades

La exploración es otro pilar del juego. Mardias es un mundo variado compuesto por ciudades, bosques, mazmorras, islas y rutas marítimas. La libertad de movimiento permite descubrir misiones secundarias, encontrar personajes reclutables y toparse con eventos dinámicos. Las decisiones del jugador influyen en qué misiones aparecen y cómo se desarrollan los acontecimientos, lo que refuerza la sensación de un mundo vivo y lleno de cosas por hacer.
Otro de sus grandes atractivos es la rejugabilidad. Con ocho protagonistas, múltiples rutas y misiones secundarias, cada partida puede ofrecer una experiencia distinta. Completar la historia principal puede llevar unas 30 horas, pero explorar todas las rutas y descubrir todos los secretos puede extender la duración de manera considerable.
Minstrel Song es un juego que pide pausa y jugar con cabeza, por lo que no se disfruta jugando a lo loco y sin concentración. Sin embargo, la experimentación y la planificación también se premia, es un juego en el que vas a tener que invertir distintas estrategias dependiendo del jefe. Sí, en ocasiones puede resultar abrumador, pero si eres más de descubrir las cosas por tu cuenta, este es te juego.
A esto, podemos sumarle los nuevos personajes añadidos, que dan mas horas de jugabilidad. Así como más mazmorras y el contenido de la Nueva Partida +. Desde ya os avisamos, que si vais a por el 100% de los logros/platino, tenéis más de un centenar de horas por delante.
Técnicamente es una buena remasterización pero con los inconvenientes del original

Visualmente, el juego mantiene un estilo artístico único. Los escenarios y entornos recuerdan a acuarelas pintadas a mano, con un aire de cuento de hadas que le otorga personalidad. Aunque los modelos de personajes en 3D pueden parecer toscos o desproporcionados en ciertos momentos (son potencialmente cabezones), el conjunto logra crear una atmósfera coherente y atractiva.
Además, gracias a esta revisión se ha cuidado mucho más resolución o el bordeado de los polígonos. Esto potencia la conexión de los modelados con los escenarios, aunque estos se sienten menos cuidados en proporción. En definitiva, cumple como remasterización sin grandes alardes.
La banda sonora es otro punto fuerte. La música, que combina melodías épicas y momentos más íntimos, refuerza la narrativa y la inmersión en el mundo. Además, la remasterización incluye mejoras de interfaz y calidad de vida, como la posibilidad de acelerar combates (importantísimo, créenos), guardar en múltiples puntos y acceder a contenido expandido de manera más cómoda.
No obstante, algunos elementos han envejecido mal. Las cinemáticas pre-renderizadas muestran baja resolución y ciertos modelados de personajes se sienten desfasados respecto a otros. Otro aspecto que no termina de encajar, son los movimientos de los personajes en el mapeado y las ciudades, demasiado ortopédico.
El plato fuerte de este apartado sin duda lo cumple la traducción al español. Esta es bastante buena, con aires de la época en la que trascurre el juego, y en definitiva, un premio que la comunidad de amantes de los JRPGs nos merecíamos tras los palos de Final Fantasy Tactics y Fantasian Neo Dimension.
Conclusiones finales | Análisis de Romancing SaGa: Minstrel Song Remastered International

Romancing SaGa: Minstrel Song Remastered International es un juego sin duda, con personalidad propia. Su mayor fortaleza radica en la libertad narrativa, la rejugabilidad y un sistema de progresión que premia la experimentación y la planificación. Para jugadores con paciencia y gusto por los JRPGs clásicos, puede ser una experiencia profundamente satisfactoria.
Sin embargo, su complejidad, la falta de guía clara y ciertos elementos técnicos desfasados pueden generar frustración en jugadores más acostumbrados a títulos modernos y lineales. El juego se disfruta mejor con calma, explorando cada rincón de Mardias y experimentando con sus sistemas.
Es una joya para quienes buscan un JRPG diferente, pero no necesariamente para aquellos que prefieren mecánicas rápidas y guías claras. Su mayor acierto, la localización al castellano, así como los nuevos añadidos a esta versión que mejoran considerablemente su calidad de vida.


- Mucha libertad narrativa que potencia la rejugabilidad.
- Sistema de progresión profundo y único.
- Artísticamente único, como si fuera un cuento.

- Puede hacerse lento, aún con las mejoras de calidad de vida.
- La falta de guía puede hacerse tediosa para los menos experimentados.
- Visualmente puede no agradarle a todo el mundo por la desproporción o los movimientos de los personajes.