Hablar de Alone in the Dark es hablar de uno de los juegos más icónicos que la industria ha dado. Allá por el 1992, Infogrames lanzaba el juego para PC y sembraba la semilla de lo que posteriormente conoceríamos como survival horror. Reconozco que en los inicios de los 90 aún no tenía PC y supongo que dedicaba mi tiempo a la Game Boy. Pero los poseedores de los ordenadores de la época seguro que alucinaban con esos pixeles y ese 3D embrionario.
Dejando ya de lado la nostalgia, acompañadme en este análisis de la nueva versión de Alone in the Dark, disponible el 20 de marzo en PC y consolas de actual generación, para contaros que nos ha parecido nuestro viaje a la Mansión Derceto. Al no haber jugado al original, no lo compararé con él mismo. Y creo que, para este caso, mejor, ya que debido al largo tiempo que ha pasado entre un lanzamiento y otro y que mucha de la audiencia a la que se dirige este juego es posible que ni hubiera nacido en el 1992, seremos lo más objetivos posibles y os daré mi opinión como producto independiente, sin vivir del legado de su precursor.
Análisis de Alone in the Dark, la importancia de los protagonistas
A poco que hayáis ido viendo nuestra cobertura en la web del juego, la historia de Alone in the Dark nos sitúa en la piel de dos protagonistas. Por un lado, Emily Hartwood, cuyo objetivo es dar con el paradero de su tío. Por otro, Edward Carnby, detective privado que ayudará a Emily en su tarea. Para plasmar en pantalla a ambos personajes se ha recurrido a dos actores reales tales como Jodie Comer (Killing Eve, Free Guy) y David Harbour (Stranger Things, Viuda Negra).
Y es normal que se haya querido dar tanto peso en ambos personajes ya que, tanto el uno como el otro, serán los protagonistas y viviremos nuestro viaje a través de sus ojos. Nada más llegar en coche a la Mansión Derceto (el tercer gran protagonista del juego), el juego nos hará escoger si queremos jugar con Emily o con Edward. En mi caso me decanté primero por Edward y después por Emily.
La sombra de Resident Evil es alargada
Aquí si que he de ser sincero y pensé que, como podría ocurrir en algunos juegos de la saga Resident Evil, viviríamos historias diferentes en lo jugable. Si bien es cierto que las cinemáticas serán algo diferentes para un personaje que para otro, jugablemente nos enfrentaremos a los mismo enemigos y los mismos puzles juegues como uno o juegues como otro. El principal atractivo pues, será vivir la historia desde otro punto de vista (especialmente interesante el final del juego). Será necesario jugar con ambos personajes para entender la totalidad de la historia ya que ésta será diferente (y sus cinemáticas) dependiendo del personaje. No viviremos las mismas situaciones dependiendo de con quien juguemos, cada personaje de la historia tendrá unos diálogos diferentes dependiendo de con quien se tope.
Otro aspecto diferencial entre vivir la historia con uno o con otro es, aunque algo menos importante, son los coleccionables que nos iremos encontrando a lo largo del camino. Hablaremos después sobre ello.
Una base jugable sólida y conocida
En lo jugable, y a poco que hayáis visto también los tráileres de anuncio, veréis como, bajo una vista en tercera persona, nos espera un survival horror muy clásico donde, como marcan los cánones del género, la escasez de recursos, la tensión, la acción y el sigilo, así como los puzles, marcarán las 8 o 9 horas que te puede durar una partida.
Si cuentas con algo de experiencia en el género, sabrás lo que te espera y en ese aspecto el juego no es muy innovador. Siendo una jugabilidad muy sólida igualmente, se pierde esa innovación que algunos jugadores podrían demandar. Pero la fórmula funciona y lo hace muy bien, añadiéndole, en mi opinión, dos puntos fuertes e interesantes: la historia y los escenarios.
La acción conjuga con los puzles
En lo puramente jugable, el juego se siente, como decía, algo corto. Hay tan sólo 3 tipos de enemigos y tan sólo tendremos 3 armas a nuestra disposición, además del arma a melee que te encuentres por el escenario. Seamos justos por eso y tampoco esperábamos unos personajes que fueran Rambo y fueran armados hasta los dientes, pero hubiera estado bien añadir algo de variedad en cuanto a los monstruos o que las armas fueran diferentes en función de si juegas con un personaje u otro.
La estructura del juego y como se nos narra la historia está fundamentada en un ciclo de repetición que, en lo esencial consta de la resolución de un puzle, viaje a “otra dimensión paralela” y vuelta a la mansión para resolver otro puzle que nos permita avanzar en nuestras pesquisas. No por ello es una narrativa repetitiva ni aburrida, al contrario. La tensión nos acompaña en todo momento y hasta en los escenarios más seguros como podrían ser la mansión Derceto notarás ese aura de tensión. Y todo ello sin recurrir a los manidos jumpscares más que en contadas ocasiones.
Análisis Alone in the Dark, la Mansión, el tercer protagonista
Se combina muy bien los ratos “tranquilos” en los que deberás recorrer los diferentes recovecos de la Mansión y otras secuencias más orientadas a la acción en la que dejarás de lado los puzles y te centrarás en sobrevivir. El ritmo y el tempo del juego está muy bien llevado y en ningún momento te cansarás de una sección u otra. Entremezclándose muy bien sus partes más tranquilas y sus partes más de acción, la historia y los sucesos que tienen que ver con el tío de Emily servirán para hilar muy bien ambas secciones.
En cuanto a los puzles se refiere, si que creo que abusa algo del tipo de puzle clásico de “mover piezas para que esas piezas cuadren con las otras”. Es decir, muchos obstáculos consisten en alinear las diferentes piezas para que cuadren entre ellas. Hubiera agradecido algo de variedad en la resolución de los acertijos ya que, cuando llevas 2 o 3, los siguientes pueden hacerse algo pesados.
El diseño de los escenarios y como está diseñada la Mansión Derceto me ha parecido un gran punto a su favor y demuestra como, además del dúo protagonista, el escenario en el que se desarrolla es el tercer gran protagonista de la historia. Si bien es cierto que no sólo se limita a la Mansión donde transcurre el juego, sí que es ésta su base principal y donde más tiempo pasaremos. Pero notaremos como poco a poco la parte explorable es cada vez mayor y como el juego te arrastra casi sin darte cuenta a recorrer cada rincón de la Mansión. Además, la exploración concienzuda de los escenarios nos otorgará recompensas en forma de coleccionables o bien preciados recursos en forma de munición o “botiquines” (entre comillas, ya que son botellas de alcohol).
En cuanto a lo técnico…
En cuanto a lo puramente técnico, el juego luce muy bien tras jugarlo en PC. He de decir que el PC donde lo hemos jugado cumplía sobradamente los requisitos recomendados y la experiencia ha sido, a nivel gráfico, sensacional. Entendemos que en consolas también irá bien, pero en PC es posiblemente donde, si tienes un buen equipo, lucirá mejor.
El rendimiento ha sido muy sólido en toda la partida, salvo en una zona hacia la parte final del juego en el que la carga gráfica de una zona pantanosa lastraba la tasa de frames, bajando de los sólidos 60 a 40 y notándose algo ralentizada. Además de poder ser un error de la versión del juego que hemos jugado y que se solucione en su lanzamiento, ha sido algo testimonial y no empaña el gran rendimiento libre de tearing, popping o similares.
Sí que hemos sufrido algún clásico bug que encallaba el movimiento de nuestro personaje o no dejaba sacar las armas, pero ha sido tan sólo en un par o tres de ocasiones y gracias al generoso sistema de autoguardado del juego no ha sido ninguna catástrofe. Además, como decimos, del autoguardado automático según la zona, podrás guardar el progreso en cualquier momento, sin tener que esperar a alguna sala o zona en concreto.
En cuanto a lo visual…
Gráficamente, el juego de luces y sombras y el nivel de detalle de los escenarios me ha parecido soberbio. Las caras y las expresiones faciales de ambos protagonistas están muy bien recreadas y los veremos como si de una serie se tratara. También es cierto que los demás personajes, sin estar nada mal, no rallan al mismo nivel y se nota que el estudio ha querido enfatizar el peso de los protagonistas y su detalle gráfico.
La música, ambiental, también acompaña muy bien al ritmo del juego, añadiendo tensión en los momentos más apretados y dejándote más tranquilo cuando toque resolver un puzle.
Hemos probado también el juego en Steam Deck y funciona de forma nativa. No necesita de ningún requerimiento extra y funciona directamente. Y nos ha sorprendido el rendimiento ya que se ve bastante bien y la tasa de frames supera incluso los 30 cuadros por segundo. Eso sí, si tiras de ahorro de batería y quieres limitar el TDP, lo pagarás con una menor tasa de frames y puede hacerlo injugable. La única pega es que, almenos cuando hicimos la prueba, no funcionó correctamente el Steam Cloud y no reconocia las partidas que llevabas en PC.
Análisis Alone in the Dark, conclusiones
Alone in the Dark se asienta en las bases jugables de los survival horrors modernos y, a pesar de no sorprender en cuanto a sus mecánicas jugables, todo lo que se propone lo hace de manera más que correcta. Cuenta con una ambientación y unos gráficos soberbios. El ritmo es trepidante y combina muy bien secciones de puzles con fragmentos de acción. Hubiéramos agradecido algo más de variedad en sus puzles y enemigos, pero la riqueza de su historia y como se va desarrollando compensa con creces sus carencias. Sin lugar a duda, si te gustan los survival horrors debes darle una oportunidad. No te defraudará
- La ambientación y los personajes jugables
- Vivir la historia desde dos perspectivas diferentes
- Poca variedad de armas/enemigos
- Se agradecería más variedad dependiendo del personaje escogido
