Call of Duty Infinite Warfare se ambienta en un futuro no muy lejano donde solo el universo es el límite. Una nueva ambientación de la que se han desvelado nuevos detalles, pero que no ha gustado tanto al público. Aquí damos las claves de este nuevo estilo en la franquicia.
Call of Duty Infinite Warfare es el nuevo título de la conocida saga de Activision. Precisamente su nuevo aspecto innovador ambientado en un mundo futurista es algo que no ha gustado mucho al público en general. Brian Horton, director artístico del juego ha dado algunas pinceladas sobre este aspecto en una entrevista concedida al Blog Oficial PlayStation: «“Una de las cosas que queríamos hacer era usar la receta de Call of Duty que conocemos tan bien y buscar la manera de expandir su mecánica y tratar de lograr efectos visuales que no habíamos probado antes”.
«Imaginamos una fusión entre la NASA y la Marina: se toman los aspectos militares de esta última (como un acorazado, por ejemplo) y se llevan al espacio con una estética propia de la NASA. En esa fusión se crea lo que consideramos un futuro bastante plausible», añade Horton. Para el equipo de Call of Duty Infinite Warfare el objetivo es mezclar diferentes elementos de ciencia ficción con otros más reales imaginando una hipotética batalla interestelar dentro de un posible futuro.
Horton también hace hincapié en que realizar un juego «científicamente correcto» puede producir que se reduzcan los «principios fundamentales» que, bajo su criterio, «hacen de Call of Duty un gran juego». Además, también afirma que se han tomado algunas licencias con la ciencia, pero que han intentado no caer en los «rayos láser y los alienígenas».
Brian Horton también ha hablado un poco sobre algunas de las armas que aparecen en el tráiler y algún gadget como el gancho, del que dice que surgió como idea cuando trataban el tema de la ingravidez en el espacio: «empiezas a pensar que es difícil moverse en condiciones de ingravidez, así que se necesita algo que permita desplazarse por ese espacio de forma rápida. Así fue como surgió la idea del gancho».
“Las granadas normales pueden resultar un desafío en condiciones de ingravidez, así que hemos creado una granada buscadora. Al lanzarla, tiene su propio propulsor, que se dirige al objetivo y lo hace estallar. Hemos adaptado algunas armas tradicionales, como las granadas, a este entorno. También hemos introducido una nueva herramienta, un pequeño robot araña. En lugar de lanzar una granada, lanzamos este artefacto, que se adhiere al enemigo y luego explota”, explica Horton sobre algunas de las armas que encontraremos en el juego.
También hace mención al aspecto del sonido. El espacio es un lugar vacío por lo que los sonidos no pueden propagarse, pero hasta para eso han encontrado una solución un tanto diferente: «Nos pusimos a investigar para ver si podíamos simular el sonido en el espacio, porque en una aplicación militar la ausencia de sonido sería realmente perjudicial. Se necesita esa retroacción para saber cómo reaccionar. Y como jugador también es importante.”
Así pues, Horton termina comentando cuál fue el modo que tuvieron de «arreglar» este problema: «En el juego hay una forma en la que el traje puede simular esos sonidos e impactos con fotones, para que puedas tener una aproximación táctica de tu entorno. Hemos amortiguado un poco el sonido, pero sigue presente para garantizar el disfrute del jugador. Esto tampoco es ciencia ficción. De hecho es muy verosímil».
Sin duda, Call of Duty Infinite Warfare dará qué hablar en los próximos meses. Mientras tendremos que hacernos una idea de cómo podrá ser mediante los vídeos mostrados. ¿A vosotros os ha gustado este cambio hacia lo interestelar para Call of Duty? Contadnos lo que penséis, como siempre, en los comentarios o mediante Facebook y Twitter. Si queréis mencionarme en esta última red social podéis hacerlo con @Kevin_Croft_94.