
Estos días he tenido la suerte de probar REMATCH, el nuevo juego de fútbol desarrollado por los también creadores de SIFU. Dice ser una de las nuevas modas del momento, y con razón. Que haya logrado superar a FC 25 en jugadores simultáneos máximos en Steam con solo una beta.
Y aunque está claro que el simulador de EA tiene muchos usuarios en consola y/o en la propia app de Electronic Arts, no deja de ser un dato significativo y clarificador. A fin de cuentas, es de los pocos —yo no conozco ningún otro— juego de fútbol que haya logrado algo parecido.
Todo sea dicho, tras probar el juego, ya os advierto que no se parece en nada. Es más, si habéis visto el tráiler, lo sabréis, puesto que REMATCH apuesta por algo totalmente diferente. Se aleja de los simuladores deportivos clásicos y nos ofrece una experiencia mucho más refrescante.
O lo que es lo mismo, apuesta por una jugabilidad totalmente opuesta a lo que estamos acostumbrados a través de un gameplay tan directo como entretenido. Difícil de dominar, pero tremendamente satisfactorio, es como darle a un artista marcial una pelota para que haga virguerías.
Es el Shaolin Soccer de los videojuegos, y lo digo en el buen sentido, pues mis primeras impresiones para con la obra de Sloclap son buenísimas. Disponible a partir del 19 de junio en PC (Steam), PS5 y Xbox Series X/S, es uno de los mejores títulos deportivos que he probado en mucho tiempo.
Impresiones de REMATCH tras probar su última beta

Hay quienes lo definen como el Rocket League del fútbol, y entiendo por qué lo hacen, pero no solo me parece injusto, sino que —además— se queda muy corto. Sí, ambos comparten ese espíritu rompedor y dinámico en el que la acción lo es todo… y ya está.
Me parece injusto que se lo llame de esta manera cuando detrás de este juego hay un auténtico equipazo de desarrollo capaz de mezclar dos cosas tan dispares como movimientos acrobáticos al más puro estilo SIFU con un deporte de equipo sin que quede raro.
A través de tres modo de juego principales (3 vs. 3, 4 vs. 4 y 5 vs. 5) ha logrado combinar dos ingredientes que a priori no pegaban ni con colca hasta producir un plato final simplemente increíble. Como os habréis podido imaginar, me lo he pasado de lujo con REMATCH.

Lo he jugado tanto con amigos como mediante su matchmaking. En ambos casos la experiencia ha sido muy notable desde la perspectiva de una beta. En cierto modo, se me ha quedado corta, por lo que me gustaría que la versión final juego profundizase un poco más en las variantes disponibles.
Solo le pido eso, algo más de variedad, porque la base es realmente buena. Las animaciones (más allá de pequeños defectos propios de una beta) y los movimientos están muy bien planteados. Los controles son sencillos, por lo que todo el mundo puede jugar, pero dominarlos es complicado
Conclusiones

Es uno de esos juegos que recompensa la fidelidad y el entrenamiento, distinguiendo muy claramente entre los jugadores casuales y los que se han esforzado más para dominar sus técnicas. Lo malo de la beta es que no había tanto usuario, por lo que los emparejamientos sí que eran un poco erráticos.
Pese a ello, eso de sortear a mis rivales con sombreritos o echándome el balón hacia adelante (cuando no estás en contacto con él, eres ‘inmune’ a los barridos y el contacto físico) mientras me acerco a portería mola mucho.
Sobre todo porque estos recursos tienen la pega de que si alguien nos mide bien, nos puede quitar el balón muy fácilmente, dándole una lectura mucho más profunda de lo que se puede inferir de buenas a primeras. REMATCH es alocado, pero no caótico. Dentro de su jugabilidad hay un gameplay muy bien pensado.
Lo único que no me ha encajado es que el control a veces es un poco errático. Es muy fácil que se te vaya a donde no quieres, que el muñeco no adopte la posición que buscas y pase de largo o simplemente fallar al recogerlo.
A veces se mueve de manera un poco… extraña. Cuando no tienes el balón en las botas, cuesta incluso medir el movimiento. De hecho, a veces también pasa cuando lo llevas. Esas animaciones no son tan fluidas como me gustaría. Es como que le cuesta ajustarse.
Por suerte, no me parece algo especialmente complicado de corregir o mejorar. Dicho esto, mis primeras impresiones durante esta última beta de REMATCH antes de su lanzamiento son esencialmente buenas y le tengo bastantes ganas, la verdad.