
Primeras impresiones de Moonlighter 2: The Endless Vault, la secuela del que dice ser uno de los mejores indies españoles de los últimos años.
Allá en 2018, Moonlighter me sedujo con su precioso apartado artístico tipo pixel-art, su sistema de exploración de mazmorras tipo roguelite y su premisa. La idea de ejercer como tendero de día y aventurero de noche (para obtener mercancía) me gustó mucho, por lo que tenía muchas ganas de probar su secuela. Ahora, tras probar la demo de Moonlighter 2: The Endless Vault, por fin os puedo traer mis primeras impresiones.
Spoiler: son buenas. Mediante una versión de contenido recortado, he podido comprobar que Moonlighter 2: The Endless Vault ha llevado su fórmula a un nuevo nivel. En ese sentido, el cambio más destacado y evidente es el apartado gráfico.
Dudé cuando 11 bits studios y Digital Sun anunciaron que sería en 3D. Ahora, con el paso del tiempo, me toca darles la razón. No sin algún tropiezo en el camino, me he encontrado con un juego que rebosa potencial, pasión y ganas.
Empezamos en Tresna, un olvidado pueblo en una dimensión desconocida. Allí nos encontraremos con Will, un héroe-comerciante que debe reconstruir su vida y su negocio desde cero mientras ayuda al resto de habitantes del lugar a alcanzar una vida mejor.
La premisa sigue siendo sencilla: explora la mazmorra, obten recursos (o poder) y repite una y otra vez. La estructura como roguelite sigue siendo la misma, pero Moonlighter 2 trae una novedad consigo: ahora no te limitas a tu tienda.
En esta ocasión también puedes —y debes— invertir en el desarrollo de tu pueblo. Formas parte activa de la comunidad y cuando la aldea crece, tu tienda también, pudiendo desbloquear distintas mejoras y oportunidades a medida que este crece.
Primeras impresiones de Moonlighter 2: The Endless Vault




Este enfoque de «reconstrucción colectiva» añade una capa de progresión que se siente más orgánica que en el primer juego, donde las mejoras se limitaban principalmente a la tienda y el equipo de Will. Aquí cada decisión parece tener un impacto más tangible en el mundo, lo que me hizo sentir que mis esfuerzos como comerciante y aventurero realmente transformaban Tresna.
Al menos en principio. Como ya he dicho, he probado una demo, por lo que no sé cuál es el alcance real de este cambio, pero pinta bastante bien. No es la única novedad. Además del ya mencionado apartado gráfico, Moonlighter 2: The Endless Vault también se ha actualizado en lo jugable.
En general, el juego se siente más dinámico. Las mazmorras se sienten ligeramente diferentes, eliminando de la ecuación —en gran medida— las plataformas, trae combates más tácticos y pausados. Su diseño es más inteligente, ofreciendo un gameplay más pulido y menos monótono.
Por supuesto, las esquivas siguen estando muy presentes. Aunque los combates se sienten más tácticos, no han perdido ritmo. Es más, es un apartado en el que he notado mejoras notables respecto a su predecesor. Es más sólido y más compacto. Se siente más ARPG.
Eso sí, en esta demo he creído ver cierta falta de equilibro. Algunos enemigos hacen demasiado daño en las primeras fases de juego y la curva de entrada puede ser compleja para jugadores novicios. Sea como fuere, sigue siendo una demo, por lo que no lo tendría tan en cuenta, pues la verisón final puede ser muy distinta en ese sentido.
Aun así, la sensación de adentrarte en una mazmorra, recolectar reliquias y volver para venderlas es tan adictiva como siempre, con el aliciente de poder personalizar el diseño de tu tienda, algo que añade un toque de personalidad al aspecto de gestión.
La evolución natural de Moonlighter




Comparado con el original, Moonlighter 2: The Endless Vault es más ambicioso. Mantiene la esencia, y sigue siendo aquel juego del que muchos nos enamoró pese a la pérdida del pixel-art. Mantiene la esencia y aspira a un gameplay más completo en términos generales.
Es menos rígido en el bucle de tienda-mazmorra. Es más flexible, y en gran medida eso es gracias a que la gestión del inventario es más fluida. Eso sí, la interfaz necesita algo más de pulida. Es atractiva, pero aún tienen que pulirla un poco más para que sea más intuitiva.
Personalmente, me ha gustado lo de poder colaborar con el resto de la comunidad, aunque entiendo que a muchos no les gustará, puesto que se pierde parte de la magia de llevar tu propia tienda en un ejercicio de capitalismo extremo. Aquí creo que sí se pierde algo.
Tal vez sea porque es una demo, pero jugar con el precio y la demanda se pierde. No es tan necesario gestionar que vendes y que dejas de vender, tal y como ocurría en la primera entrega. Respecto a la narrativa, no puedo hablar mucho, ya que la demo no da para mucho en ese sentido. Es normal, todo sea dicho.
En resumidas cuentas, la demo de Moonlighter 2: The Endless Vault me ha dejado sensaciones mayormente positivas. El juego se siente más compacto. Diría que es mejor en términos generales que el primero, aunque quiero ver hasta donde llega la gestión de nuestra tienda antes de mojarme.
Es donde más he notado que podría perder algunos puntos, ya que en los demás aspectos sí que considero que ha mejorado notablemente. Además, me parece bien que el estudio intente innovar sin olvidarse de su anterior trabajo.
Pinta bien y tengo fe de que irá a mejor. De momento está en mi whislist y de ahí no se mueve. Tiene potencial, me ha llamado mucho la atención y quiero ver hasta dónde son capaces de llegar.
Hemos podido escribir este texto tras recibir una clave de Game Press. Para una mejor visualización del juego, hemos preferido utilizar imágenes oficiales distribuidas por el estudio en plataformas como Steam en lugar de capturas propias.