
Os traemos nuestro análisis de Wuchang: Fallen Feathers, el soulslike chino que ha buscado enamorarnos con una premisa muy simple: muerte.
Los soulslike están de moda. Enfrentarte a un enemigo capaz de hacerte sufrir durante decenas de horas para luego sentir la satisfacción definitiva tras obtener la victoria es la nueva adrenalina a la que la industria se ha hecho afín. Siguiendo esa dinámica, hoy hemos querido hablaros de uno de los más esperados del año en nuestro análisis de Wuchang: Fallen Feathers.
De origen chino, cuando se anunció, trajo consigo una promesa: transportarnos a la dinastía Ming en una historia de fantasía y acción inspirada en la mitología china. Con una presentación como poco muy llamativa, generó bastante expectación desde el primer momento.
Un mundo inspirado en una cultura que nos encanta, una protagonista con carisma, un sistema de combate que parecía beber de FromSoftware y otros grandes del género… Había motivos más que suficientes como para esperar algo con fuerza, garra e impacto.
Ahora, tras dedicar no pocas horas de mi vida en PS5 a probarlo, os puedo decir que mi viaje muy positivo, pero con algunas notas un tanto ambivalente. Si bien es cierto que mi experiencia es generalmente positiva, también hubo momentos en los que esgrimí una pequeña mueca. ¿Por qué? Pues os lo cuento.
Análisis de Wuchang: Fallen Feathers
De buenas a primeras, Wuchang: Fallen Feathers logra hacer algo muy importante: atraparte. El sentimiento de inmersión narrativo y audiovisual inicial es muy potente. Los primeros minutos son realmente atractivos, pues el apartado artístico y la ambientación china son simplemente geniales.

Gráficamente, llama bastante la atención, y aunque no es lo más puntero que jamás haya visto, se ve realmente bien. Mezcla con habilidad la belleza de la fantasía china con el oscurantismo propio de un soulslike. Es, como poco, digno de mencionar.
En resumen, es un juego que da gusto explorar y visitar, salvo cuando te toca echarle horas a una secundaria. Si bien es cierto que la línea principal tiene más fuerza, las tareas opcionales no tienen la misma fuerza. Se sienten demasiado complementarias y no terminan de encajar con la ejecución de la narrativa central.
Además, algunos escenarios son demasiado enrevesados, por lo que acabas dando vueltas de más. Esto, en un soulslike puede resultar especialmente molesto, puesto que morir porque te has perdido nunca es plato de buen gusto para nada.

Menos todavía cuando te percatas de que el estudio, buscando esa sensación de dificultad, abusa un poco más de la cuenta de las trampas. Esto, más que tensión, a veces genera incomodidad, provocando que nuestro viaje no sean tan placentero (dentro de la adrenalina que trae un souls) como cabría esperar.
A palos en un mundo de mitología china
Por supuesto, no todo es negativo. De hecho, estos son los puntos flacos de un juego que logra destacar en lo más importante: el combate. Como juego de acción y combate, Wuchang: Fallen Feathers deja muy buenas sensaciones de principio a fin.
Con un abanico de posibilidades lo suficientemente amplio como para diseñar un estilo relativamente propio, y las distintas maneras de las que disponemos a la hora de abordar un combate, Wuchang: Fallen Feathers logra que nos sintamos como una auténtica guerrera.

Además, aunque he dicho que los escenarios pueden resultar algo caóticos, también es cierto que son muy bonitos. Los distintos entornos y biomas que se van presentando poco a poco parecen sacados de un cuento oriental… y nos encanta. Tiene el don de transportarte a otro mundo desde el minuto uno.
Esto es algo que se hace más evidente a medida que avanzas. La narrativa de Wuchang: Fallen Feathers tiene cierto carácter críptico, lo que hace que intentes ver cosas donde incluso no las hay. Prestas mucha atención mientras intentas pillarle el punto, y creo que lo han conseguido.
Y eso que en realidad la premisa no es complicada. En nuestra aventura seguimos a una joven con amnesia que busca una cura para su dolencia, una plaga, y respuestas sobre su identidad. Cuesta descubrirlo, pues va muy a su ritmo, lo cual puede costarle a quienes prefieren historias algo más directas.
Frenetismo y paisajes preciosos como grandes baluartes

Personalmente, creo que funciona bien, sobre todo porque está acompañado de un combate muy interesante. Dividido por armas (podemos usar desde espadas largas hasta hachas y armas de fuego algo más primitivas), Wuchang: Fallen Feathers le da mucha importancia a ejecutar grandes combos mientras ejecutas esquivas perfectas.
Es muy agresivo cuando lo dominas, porque la manera en la que más tensión (y diversión) he sentido fue cuando no paraba de pegar palos mientras esquivaba de aquí para allá. El timing es muy precios y aunque castiga con dureza, no es injusto.
Lo único malo es que los bloqueos tardan un poco en llegar, por lo que requiere algo de paciencia en ciertos momentos. A cambio tenemos una suerte de mecánica de locura que aumenta el daño realizado y recibido, lo que mola mucho por el sentimiento de riesgo-recompensa.

Por supuesto, no es la única manera de ser más efectivo. Dejando a un lado el clásico sistema de niveles o parámetros, Wuchang: Fallen Feathers se esfuerza más en crear un árbol de habilidades que se sienta interesante de verdad. Aunque prefiero algo más convencional, debo confesar que se sentía bastante bien.
El sentimiento es real y la sensación de que eres cada vez más fuerte está muy conseguida al obtener más movimientos, mejorar cierto parámetro, etc. Además, como se pueden reasignar con facilidad, no se sienten como una prisión. Eso es algo que también me ha gustado.
Wuchang: Fallen Feathers es un buen souls y sabe darnos acción de la buena
Bien cargado de jefes a la altura, y algo frustrado por su uso excesivo de trampas o sus escenarios algo laberínticos, Wuchang: Fallen Feathers nos da muchas cosas buenas y unas pocas no tanto. El resultado final, pues, es más bien positivo, por lo que lo valoro como un buen juego.

Visualmente atractivo, y con un sistema de combate bastante satisfactorio, deja con un buen sabor de poca, pese a que la traducción a veces tiene expresiones demasiado literales. Más allá de esto, debo confesar que no me arrepiento lo más mínimo de haberme embarcado en esta aventura.
Es más, considero que es una nueva demostración de que China se puso las pilas hace mucho tiempo y que ya son capaces de hacer juegos de mucha calidad. En resumen, Wuchang: Fallen Feathers es un buen juego, y se lo recomendaría especialmente a los fans de los soulslike.


- La ambientación en la China de la dinastía Ming con toques de horror cósmico atrapa visualmente.
- El combate brilla con el sistema de Skyborn Might y esquivas que premian la precisión.
- El árbol de habilidades ofrece libertad para experimentar con diferentes estilos de juego.
- Los jefes destacan por su diseño espectacular y desafíos intensos.
- La dirección artística fusiona mitología china y terror con gran personalidad.

- Los niveles laberínticos generan confusión y frustración al explorar.
- Las trampas y emboscadas abusivas restan diversión al desafío.
- La poca variedad de enemigos comunes hace que se sientan repetitivos.