Las aventuras gráficas son de los géneros que acompañaron al nacimiento de los videojuegos modernos. Si allá por los años 90 vivían su época dorada gracias a clásicos inmortales como Monkey Island, quizás otra de las sagas más famosas fue la protagonizada por Sam and Max. Este dueto nació de unas tiras cómicas en los años 80. Posteriormente, en 1993 se lanzó el primer juego, Sam and Max Hit the Road. Como muchas otras aventuras gráficas de los años 90, utilizaba el motor SCUMM.
Posteriormente, en 2005 fue TellTale la que echó la vista atrás y rescató a estos 2 detectives para lanzar 3 juegos por separado en las que esta pareja vivía nuevas aventuras. Como era marca de la casa en TellTale, cada uno de los 3 juegos estaba separado a su vez en varios episodios de una duración breve.
Análisis de Sam and Max: una remasterización con un buen lavado gráfico
Y en tiempos más actuales, se ha decidido a remasterizar y mejorar dicha trilogía de juegos. Empezando por Sam and Max Save the World en 2020 y seguidamente Sam and Max Beyond Time and Space en 2021, en pocos días asistiremos al lanzamiento del tercer y último juego de esta remasterizada trilogía, Sam and Max The Devil’s Playhouse. Y desde FreakEliteX nos hemos puesto al día con la saga al haber jugado las dos primeras partes y estar los más preparados posible para el próximo estreno del cierre. Acompañadnos y os contaremos, de forma resumida, que nos han parecido ambos juegos y que podemos esperar de Sam and Max The Devil’s Playhouse.
Para empezar, contextualicemos a los personajes. Sam and Max son un par de «policías independientes», situados en Nueva York y cuya posesión más preciada es su coche, un Chrysler Desoto del 60. Sam es un perro que bien podría inspirarse en el clásico Colombo, mientras que Max es un conejo blanco bastante más “extrovertido” y que ejerce de contrapunto total a su compañero por lo alocado de su carácter.
A nivel de historia, sin querer destripar nada, contamos con 6 capítulos que, si bien son independientes, estos están entrelazados en su narrativa. Los podrás jugar por separado y en el orden que quieras, pero tiene algo más de lógica en mi opinión el jugarlos de manera seguida y correlativa. Aun así, cada episodio es autoconclusivo y el jugarlos en el orden que tú quieras no te dejará fuera del hilo conductor que tienen todos ellos.
Los dos juegos son muy similares a nivel jugable
Ambos juegos son muy similares por no decir calcados en lo jugable. Como toda buena aventura gráfica, nos tocará resolver los misterios que se nos plantean, explorando para ello los escenarios y haciendo uso de los objetos que vamos recogiendo en la aventura, para combinarlos entre ellos o bien con otros objetos del escenario. Realmente, se sienten mecánicas muy clásicas y familiares para todos aquellos que disfrutamos con las aventuras gráficas. Así pues, en lo jugable, cero sorpresas, ya que es la misma jugabilidad de los títulos originales de los años 2000.
Si bien hay algunos puzles muy lógicos y que apenas representaran reto, también es decir que en ambos juegos habrá algunos otros donde el pico de dificultad sube de manera exagerada al ser una solución totalmente ilógica. De hecho, en muchas ocasiones, esa falta de coherencia viene dada por el propio guion, que será de lo más alocado que se haya visto en una aventura gráfica.
Pero si la dificultad se te atraganta, tendrás un sistema de pistas in-game muy útil, que es totalmente opcional y que podrás activar o desactivar a tu gusto. Además, tendremos el clásico botón de “hot-spot” con el que, apretándolo, se revelarán todos los puntos de interés del escenario.
Opciones para todos los jugadores
Si lo juegas con teclado y ratón, el desplazamiento y la interacción con los objetos serán los clásicos de este tipo de juegos. Pero la adaptación al mando me ha parecido muy correcta, moviendo a un personaje con un stick y utilizando el otro para interactuar con los objetos del escenario. También habrá algún breve segmento jugable en el que subiremos a bordo del coche y podremos dar ordenes por el megáfono, disparar, etc, añadiendo algo de variedad así al ritmo de la aventura.
Ambos juegos, al ser una remasterización, cuentas con mejores gráficos y mejores texturas. Aún así, puede haber algún jugador que los siga encontrando algo desfasados en lo gráfico. Lo que si que parece haber resistido mucho mejor el paso del tiempo es su excelente sentido del humor. Si bien esto es algo muy personal, yo me he sentido muy a gusto con las bromas y las sornas del perro detective y de su psicótico compañero. De hecho, las bromas que tienen que ver con la política quizás sean las que, curiosamente, aún se sientan más vigentes.
Un gran apartado sonoro nos espera
El juego viene con voces en inglés y textos en castellano. Si bien hubiéramos preferido que estuviera doblado al español, el nivel de doblaje en inglés es excepcional y la traducción muy acertada, incluso en momentos difíciles en los que algún chascarrillo podría ser difícil de traducir. Lo que también destila calidad es su banda sonora, que añade en esta versión cinco temas nuevos y en la que es el jazz el rey de la fiesta y el estilo que predominará durante las 12 o 13 horas que te puede durar cada juego.
Nuestras partidas en ambos juegos se han desarrollado íntegramente en Steam Deck, donde el juego es totalmente compatible y no requiere de ningún ajuste adicional. Además, limitando algo el TDP, la batería se puede alargar hasta las 3 horas fácilmente, sin resentirse a nivel de frames.
Análisis de Sam and Max: conclusiones
En definitiva, aunque podrás jugar Sam and Max The Devil’s Playhouse sin tener que haber jugado previamente a estos dos juegos, os recomendamos encarecidamente haber jugado a los juegos previos. No sólo para empaparse más del lore y del humor que destilan ambas obras, sino porque te estarías perdiendo un par de aventuras gráficas muy reconfortantes a las que sólo se les puede criticar no venir dobladas al castellano y contar con algún pico de dificultad exagerado debido a lo poco lógico de algún puzle.
- Una remasterización gráfica muy elaborada
- El humor constante y alocado
- Poder jugar los capítulos en el orden que quieras
- No viene con voces en castellano
- Algún puzle es demasiado difícil y poco lógico
