Tras una larga espera, regresa una de las franquicias más indicadas para la época más estival de otoño, Little Nightmares 3 ya está a la venta y os contamos todas sus novedades en nuestro análisis. La saga de terror, puzles y plataformas por excelencia de Bandai Namco regresa con una nueva desarrolladora, Suppermasive Games.
Bien es cierto que ellos se encargaron del port de las anteriores entregas para consolas actuales, demostrando con creces que tienen experiencia con la saga. Pero es que además, la premisa cuenta con un mayor enfoque en el multijugador cooperativo, así que hay buenos motivos para darle una oportunidad.
Por supuesto, no es la única novedad que se incorpora en esta tercera entrega, la cual ya está a la venta. En esta ocasión, los dos protagonistas se diferencia más allá del apartado visual que representa, sumando muchas nuevas formas de jugar. Os lo contamos.
De Nowhere no podrás escapar solo: análisis de Little Nightmares 3

Del mismo modo tan ausente de las demás entregas, la trama del juego nos pone en la piel de Low y Alone, dos niños que ansían con escapar del tenebroso mundo de pesadilla den el que viven. Sin embargo, en su periplo por escapar, iremos descubriendo que a medida que avanzamos todo se torna más oscuro y macabro, dejando claro que quizás nunca queramos salir de el.
Si bien es cierto, la trama del juego sigue estando carente de diálogos o textos, esta vez los sucesos ocurren de un modo más explícito que en anteriores entregas. Lejos de acabar con las sorpresas que aguarda el juego, nos hace ser más conscientes de la mente creativa tras el proyecto. Aunque eso no quita, que tengamos que estar muy atentos a todo lo que vemos en pantalla, incluso cuando exploramos, para entender su mundo totalmente.
El juego vuelve a apostar por una aventura bilateral cargada de puzles, con un mundo enorme que busca hacernos sentir muy pequeños, y frágiles. Así, la sensación de peligro es constante, durante las casi 5 horas que hemos tardado en terminarlo.
Una vez más, la duración nos ha parecido un suspiro, aunque en este caso está a medio camino de lo visto entre la primera y segunda entrega. Sin embargo, justo cuando la historia empezaba a parecer más novedosa e interesante, el juego se acaba.
Muchas nuevas mecánicas lo hacen más interesante

Como hemos mencionado, lej uego está protagonizado por dos personajes totalmente distintos. Lejos de ser una simple skin, proponen jugabilidades distintas, por lo que siempre hay un aliciente a una segunda pasada controlando al otro personaje.
Con Low podremos disparar flechas, que lejos de ser un arma de combate, podremos usarla para romper cuerdas y abrirnos camino. En cambio Alone usa una llave inglesa con la que podemos romper barreras y accionar mecanismos. Por lo demás el control de ambos personajes es idéntico a la hora de correr o saltar. Pero el hecho de que cuenten con mecánicas diferentes, provoca que ocasiones tengan que seguir rumos distintos. De este modo, una segunda pasada merece aún más la pena.
Al margen de estas habilidades, también hay herramientas nuevas para darle un sentido diferente a la jugabilidad. Por ejemplo, con el paraguas podemos elevarnos aprovechando masas de viento, por lo que es probable que estemos ante la entrega que más cambios incorpora.
El equilibrio en el juego es muy importante: las zonas de tensión se intensifican cuando tenemos que hacer uso de nuestras habilidades al mando. Aunque también deja bastante hueco a los rompecabezas, a los que solo le pediríamos, que en ocasiones fueran algo más complejos. Aún así la variedad de situaciones nos ha encantado, y durante las casi cinco horas que hemos jugado nos han tenido pegados a la pantalla. Por sacarle algo de pega, y sin ser muy objetivos del todo, una tercera entrega ya se siente menos fresca, pues revive la esencia de toda la saga hasta el momento.
Con un amigo o con la IA, nunca juegas solo

Como os decíamos, la colaboración entre los dos personajes es vital para salir adelante, de tal modo que en ocasiones, tendremos que abrirle el camino a nuestro compañero y viceversa. Como os podéis imaginar, jugar acompañado es totalmente obligatorio, aunque a diferencia de títulos como Split Fiction, no necesariamente tenemos que jugar con otro jugador.
La IA está francamente bien implementada, y obedece de un modo muy leal en todas las situaciones posibles, ya sea al resolver puzles o al escapar de nuestros opresores. También podemos darle órdenes a nuestro compañero cuando queramos que respondan a algún puzles, por lo que, aunque jugamos acompañados, nos sentimos la mente maestra de todo lo que pasa.
En cambio, jugar con un amigo es tremendamente divertido, aunque estamos ante un pseudo juego de terror, algunas muertes o situaciones nos han parecido tremendamente graciosas. El problema viene en que no se le ha dado todo el potencial que se merece, y solo podemos jugar acompañados en partidas en línea. De este modo, el multijugador en local no está disponible, una verdadera lástima. No poder ver a nuestro compañero en las situaciones de susto o tensión es un punto perdido, y lamentamos que no lo hayan implementado de esta manera.
También queremos hacer una mención especial a la variedad de escenarios tan grande que tiene para tratarse de un título relativamente corto. No solo es bueno en número de ecosistemas, sino que además, la puesta en escena de cada uno de ellos es muy interesante y atractiva.
Escalofriantemente precioso

Ya hemos explicado que nos ha parecido el mundo del juego y como nos hace sentir la proporción de tamaños en la jugamos, pero es que a nivel técnico hace verdaderos honores. La cantidad de detalles de cada escenario o sale, es apabullante, siendo muy importante estar atentos para resolver rompecabezas de su mundo o reunir pistas de su lore.
En consolas de sobremesa y Nintendo Switch 2, muestra una clara evolución respecto a las anteriores entregas, con mejor calidad de detalles y también en la iluminación, uno de los principales protagonistas de la obra. Sin embargo, en la consola original de Nintendo Switch es bastante tenebroso, y no en el buen sentido de la palabra, con grandes problemas de resolución. Eso sí, en ninguna de la versiones que hemos podido probar, hemos notado problemas de caídas ni bugs muy graves, cosa que sin duda le dan fluidez al título.
A nivel sonoro no sorprende tanto como otras entregas, aunque si ayuda a la inmersión haciendo que sea una verdadera experiencia de suspense. Donde si nos hemos sentido decepcionados ha sido en el cierre de la trama, y es que justo cuando más fuerza y enganche toma, se acaba de un modo cortante. Eso sí, nos deja preparados para dos expansiones argumentales que ponen fin a la trama y que llegarán a lo largo de 2026, por lo que tardaremos en estar ante la versión completa de esta historia.
Análisis de Little Nightmares 3: conclusiones finales


Little Nightmares 3 es una clara evolución jugable de la saga, que apuesta porque compartamos la experiencia con nuestros amigos, incluidos sustos y sobresaltos. La resolución de puzles, e incluso las zonas de tensión ganan al ir acompañados, ya sea por gente o por la IA. Eso sí, sentimos que hemos perdido la sensación de soledad que daban las otras entregas.
Tanto los rompecabezas como los retos jugables que plantea el juego a lo largo de sus 5 horas de duración nos ha dejado buen sabor de boca, y como os decíamos, tiene capacidad para ser rejugado gracias a las distintas mecánicas que ofrecen sus dos protagonistas, una novedad muy importante para futuras entregas.
En definitiva, si tenemos que irnos directamente a lo más nos ha sacado de la saga, ha sido el corte tan abrupto de la historia, que nos prepara a pagar una expansión para poder ponerle fin.


- Busca como evolucionar la fórmula de la saga.
- Las nuevas mecánicas son acertadas.
- El multijugador lo hace más ameno y divertido.
- La atmósfera de su mundo, inmersiva.

- No tiene multijugador local o en pantalla dividida.
- La duración es escasa.
- El corte del final para introducir contenido de pago que tardará en llegar.