Hoy toca analizar un nuevo juego de estrategia. Desarrollado por Destructive Creations, War Mongrels se presenta como un sucesor del mítico Commandos 2. ¿Lo es? Empezamos el análisis.
Análisis de War Mongrels; conociéndolo de cerca
¡Hola, gente! Hoy toca analiza el nuevo videojuego desarrollado por Destructive Creations: War Mongrels. Un juego de estrategia en tiempo real en perspectiva isométrica ambientado en la Segunda Guerra Mundial. En esta ocasión, nos lleva al frente oriental durante 1944, concretamente a la Polonia ocupada.
Salió al mercado el pasado 19 de octubre y está disponible para todas las plataformas de juego: PS4 y PS5, Xbox One y Series X/S y Steam (plataforma que se ha utilizado para el análisis). Huelga decir que en consolas saldrá más adelante, todavía por confirmar.
Un primer vistazo a la historia
La historia nos adentra en un par de soldados alemanes que en plena ejecución de civiles polacos deciden no obedecer. Como consecuencia, son condenados por deserción a servir como cebos en una misión suicida. No obstante, un ataque inesperado a la base de operaciones alemanas producirá un enorme caos que nuestros protagonistas aprovechan para escapar.
Con esta premisa inicia nuestra aventura por Polonia en un recorrido por 12 extensas misiones por diversos escenarios del país. En este sentido, habrá hasta 7 personajes distintos que podremos controlar y conocer el trasfondo de cada uno de ellos. Conocer sus ideas, motivaciones y ambiciones mientras que luchan por la libertad de Polonia como parte del movimiento partisano.
En cada escenario se nos ofrecerán distintas alternativas para completar los objetivos (procura ser imaginativo y resolutivo). También habrá dispersos numerosos coleccionables ambientados en noticias y posters reales que se dieron durante 1944. Cada misión tendrá los suyos y estarán asociados a lo que demanden los objetivos.
Un apartado gráfico muy chulo
Una de las cosas que más me han llamado la atención es lo bien que luce el juego gráficamente. Escenarios ricos en objetos y coberturas, las animaciones casan muy bien y te mete en el papel que tiene cada personaje. Además, el hecho de que siempre haya algún objeto del entorno nos incita a buscar las maneras de poder usarlo. El premio suele ser la eliminación de múltiples objetivos de golpe, aunque para llegar a ello haya habido que dar un rodeo.
La interfaz de menú es clara y la música también está genial (influye bastante en la experiencia de juego). De hecho, ya desde el menú podemos percatarnos del tono general del juego: crueldad y destrucción resultado de una guerra total. Por ello, me gustaría destacar enormemente el apartado artístico de War Mongrels. A comienzo de cada campaña nos salen cinemáticas para la narrativa de la historia, siendo dibujos a modo de aventura animada. Pues bien, rebosan de una calidad brutal, la representación de los soldados nazis son aterradores (en el buen sentido).
Toca hablar de la jugabilidad
Lo primero que se te viene a la cabeza una vez inicias War Mongrels es «estoy jugando al Commandos. Es increíble la influencia que ha tenido ese juego a lo largo de la historia y como, todos los juegos del género, lo imitan. Misma ambientación y mismas dinámicas de juego. Tenemos unos conos de visión, patrullas siguiendo unos patrones, personajes con habilidades únicas, etc.
No obstante incluye algunas novedades que me han parecido muy apropiadas. En primer lugar, desde el inicio, nos habilita la posibilidad de destacar todos los objetos con los que podemos interaccionar. Esto es, desde partes del escenario para eliminar enemigos a coleccionables (ayudando a encontrarlos). Esto lo he agradecido bastante ya que es un juego oscuro y te permite ahorrar tiempo buscando coleccionables que, en otras ocasiones, te lleva un buen rato encontrar.
En segundo lugar, tenemos la opción de abrirnos paso a tiros. Evidentemente no debe ser nunca nuestra primera, ni segunda, ni octava opción. Pero es cierto que si activamos el modo combate, podremos entrar en conflicto directo con los nazis. No obstante, esta debe ser la última opción porque siempre estaremos en inferioridad numérica y en condiciones armamentísticas inferiores. El caso es, si tras ver que no hay estrategia posible, un ataque rápido en un momento concreto puede solucionar una situación muy compleja.
Modo cooperativo / multijugador
La mayor parte de la campaña tuve la oportunidad de jugarlo con un colega. He de decir que la experiencia está siendo genial, ya que nos tenemos que coordinar muy bien para que los planes salgan bien. En partida podremos ser hasta un total de 7-8 jugadores en línea. Aunque recomiendo jugar con pocos amigos, para así coincida cada uno con un personaje para que se ajuste a su rol (lo que hace más divertida la partida).
Más allá de eso, en el multijugador podremos volver a jugar las misiones de la campaña. Quizá, una buena idea hubiera sido incluir algún mapa extra especializado en el juego en línea. También incluye un marcador para poder organizarte con tu compañero (puedes marcar localizaciones, enemigos, objetos, etc.). Por lo general, los escenarios pueden parecer muy complejos, pero en dificultades normales (las que suelo jugar), una vez captas las mecánicas es «relativamente sencillo». Siempre hay que ir con mucha paciencia porque precisamente cuando te confías te viene una sorpresa. Además, cada misión se irá complicando y te obliga a pensarte las cosas dos veces, pero en ningún caso es injusto.
Análisis de War Mongrels. Conclusiones
Un juego oscuro, violento, duro y cruel. Gracias al cuidado de los escenarios, un apartado artístico brutal y una banda sonora que engatusa; fácilmente nos encontramos inmersos en la Segunda Guerra Mundial. War Mongrels sigue la estela de Commandos como su influencia como si de una secuela se tratara. Salvo con una diferencia, consigue potenciar los aciertos del Commandos a la vez que incluye novedades jugables que le vienen como un guante.
Las pocas pegas que le encuentro están muy localizadas: mayor variedad de niveles en el multijugador (que no sea solo rejugar la campaña), voces sólo en inglés (me hubiera gustado que cada personaje hablase en su lengua natal para ayudar a comprender las diferencias entre personajes mucho mejor). Y especialmente, una cosa gravísima, ojo si se os actualiza el juego y tenéis una partida guardada con la versión anterior porque no podréis jugar a ella a menos que anuléis la actualización. Casi pierdo los datos guardados, lo que no me hizo mucha gracia.
Más allá de estos últimos apuntes, el juego está francamente bien y puedes comprarlo en Steam por 37,99€. Teniendo en cuenta que tiene cerca de 15-20 horas jugables, creo que la nota final no puede ser otra cosa que no sea…
Análisis de War Mongrels. Clave de juego para PC cedida por Destructive Creations.